?Silicon Valley? No, ?Elche Valley!

Si se piensa en Elche, es probable que lo primero que venga a la cabeza sea la ic¨®nica Dama de arte ¨ªbero, su palmeral, su tradicional industria del calzado o El Ni?o de Elche, la sensaci¨®n del ?amenco vanguardista. Lo que puede que no sea tan evidente es que esta localidad alicantina de algo m¨¢s de 220.000 habitantes parece tener algo m¨¢gico para las startups tecnol¨®gicas. Desde all¨ª se per?la, en cierto modo, lo que puede ser el futuro de nuestro pa¨ªs en campos como la aeron¨¢utica y la rob¨®tica, y nacen empresas que entienden a la perfecci¨®n qu¨¦ es eso de ser 2.0. ?Un Silicon Valley a la espa?ola? ?Por qu¨¦ no? Algunos de sus proyectos podr¨ªan haber nacido perfectamente al sur de la Bah¨ªa de San Francisco.

El caso m¨¢s llamativo puede que sea el de las gafas de sol Hawkers. La marca empez¨® hace poco m¨¢s de dos a?os con 300 euros aportados por cuatro amigos, y ha acabado 2015 con m¨¢s de 40 millones de euros de facturaci¨®n y siendo patrocinadora de Los ?ngeles Lakers de la NBA. "La nuestra es una historia de garaje", explica Francisco P¨¦rez, uno de sus fundadores. "Le compr¨¢bamos las gafas a una empresa americana y hasta les hacke¨¢bamos su web, pero vend¨ªamos tantas que nos acabaron haciendo sus distribuidores o? ciales", recuerda. En a?o y medio hab¨ªan despachado tanto como la marca original en cinco, as¨ª que decidieron fundar Hawkers. Y controlando su propia producci¨®n de gafas de sol, con precios asequibles de entre 20 y 40 euros, han logrado colocar m¨¢s de 1,6 millones de unidades.

Pero, ?qu¨¦ tienen que ver las gafas con una empresa tecnol¨®gica? Que su ¨¦xito no se explicar¨ªa si no fuera por su control de las redes sociales y de Facebook Ads, la herramienta de publicidad de la compa?¨ªa de Mark Zuckerberg. "Nuestra manera de usar la aplicaci¨®n hizo que nos invitaran a la sede de Facebook para ayudar a mejorarla. Ahora somos uno de los pocos betatester en Europa de sus productos nuevos", se?ala P¨¦rez. Aunque aseguran que no cogieron ideas de su visita al cortijo de Zuckerberg, la sede de Hawkers no podr¨ªa ser menos espa?ola: no hay despachos, tienen cocinero propio, mesa de ping-pong y la media de edad es de 26 a?os. Adem¨¢s, est¨¢n justo frente a la sede de Tempe, la ? lial de la mastod¨®ntica Inditex que fabrica todo su calzado. Un ejemplo a seguir para una startup que factura m¨¢s de la mitad de su negocio fuera de Espa?a y que este verano ampliar¨¢ su plantilla a 100 personas, con per? les de Londres, Alemania o Italia. Todos residir¨¢n, naturalmente, en Elche.

La SpaceX europea

Si desde la localidad levantina Hawkers ha revolucionado el mercado de las gafas de sol, la empresa PLD Space tiene incluso un prop¨®sito m¨¢s espectacular: cambiar para siempre la exploraci¨®n espacial. Al estilo de SpaceX, la compa?¨ªa del multimillonario Elon Musk, la empresa ilicitana est¨¢ desarrollando cohetes espaciales reutilizables que har¨ªan de los lanzamientos algo mucho m¨¢s asequible. "Los cohetes que hay disponibles est¨¢n pensados para lanzar sat¨¦lites enormes", explica Ra¨²l Verd¨², uno de los fundadores de la compa?¨ªa, "pero los de nueva generaci¨®n pueden pesar poco m¨¢s de un kilo". Como, aparte de Elon Musk en EE UU, en Europa no lo hace nadie, los datos de la empresa son esperanzadores: en 2013 recibieron una inversi¨®n de un mill¨®nde euros, y esperan una inyecci¨®n de capital con la que pasar¨¢n de seis a treinta trabajadores. Adem¨¢s de su car¨¢cter internacional, la compa?¨ªa tiene dos bases de operaciones fuera de Alicante: en Teruel, donde est¨¢ el banco de pruebas de sus motores, y en Huelva, donde har¨¢n sus primeros lanzamientos en 2018.

"Ya tenemos varios clientes interesados, pero obviamente no podemos decir nombres", cuenta Verd¨² con cierto punto enigm¨¢tico. Seg¨²n el fundador de la SpaceX levantina, su ¨¦xito ha sido posible porque "en Alicante existe el tejido industrial necesario para lanzar un proyecto as¨ª" y gracias, en parte, al apoyo del Parque Cient¨ª?co de la Universidad Miguel Hern¨¢ndez de Elche (UMH), donde tienen su sede. PLD Space no es la ¨²nica compa?¨ªa de Elche que intenta llegar al espacio. Emxys se encuentra dise?ando junto a la Agencia Espacial Europea una sonda para aterrizar en el asteroide Didymos. ?El objetivo del plan? De ciencia ?cci¨®n: modi?car su ¨®rbita en caso de que vaya a colisionar con la Tierra al m¨¢s puro estilo Deep impact. Adem¨¢s, tambi¨¦n est¨¢n implicados en la misi¨®n Mars sample and return, que traer¨¢ a nuestro planeta 500 gramos de tierra marciana para su estudio.

Al igual que PLD Space, Emxys se encuentra en el Parque Cient¨ª?co de la UMH, donde comparte espacio y ambiente de compa?erismo con startups como Ion Eyewear, que desarrolla las gafas inteligentes WeON glasses; Prompsit, que se centra en sistemas de traducci¨®n autom¨¢tica; o Aisoy Robotics. "Lo que uno no sabe, lo sabe el otro y, aunque no te conozcas, echas una mano", explica Jos¨¦ Manuel del R¨ªo, CEO y cofundador de Aisoy. Su empresa fue una de las pioneras en hacer realidad algunas de las teor¨ªas de Alan Turing y plantear que eso de hablar con una m¨¢quina no es ciencia ?cci¨®n. "Empezamos en 2010 haciendo un robot con el que puedes hablar. Ahora es m¨¢s f¨¢cil comprender algo tipo Siri, pero entonces nadie lo entend¨ªa", recuerda. La empresa acaba de presentar un robot emocional multiuso capaz de conversar con humanos, interactuar con ni?os autistas, ense?ar programaci¨®n o hasta hacer obras de teatro. Algunos de ellos ya se venden en Australia o EE UU. De hecho, no ser¨ªa raro que alguno haya acabado en Silicon Valley, donde quiz¨¢s no sepan que procede de un lugar bastante lejano pero no demasiado distinto, con startups, sol y palmeras, pero en el que, en el lugar del viento de California, sopla la brisa del Levante.