?Sexo casual? Por supuesto
Distraen, alegran, relajan¡ Normas para el buen uso de los amantes de una noche
El sexo ocasional, s¨ª, ese que se practica con alguien sin que haya de por medio un v¨ªnculo ni compromiso afectivo, ha sido motivo de observaci¨®n cient¨ªfica para comprobar si quienes adoptan esta pr¨¢ctica, m¨¢s all¨¢ de los juicios ¨¦ticos, cojean de ciertas cualidades psicol¨®gicas y/o an¨ªmicas. Sara Sandberg-Thoma y Claire Kamp Dush, por ejemplo, profesoras de la Universidad de Ohio, dirigieron un estudio en 2013 en el que, de alguna manera, se percib¨ªa un ligero v¨ªnculo entre el sexo ocasional y una salud mental d¨¦bil. Al parecer, una cosa llevaba a la otra, sin saber exactamente cu¨¢l era la causa o el efecto.
Sin embargo, otras investigaciones han ido revelando que este tipo de pr¨¢ctica sexual en el que no hay una relaci¨®n estable ni un m¨ªnimo de obligaciones sentimentales entre las dos personas, no solo no puede ser mala, sino que funciona como inhibidor del estr¨¦s y ayuda a sentirse de mejor humor con todo. Ese al menos es el mensaje que promueve un v¨ªdeo educativo publicado en la web Science of us, que se basa en las conclusiones de la investigaci¨®n que dirigi¨® la doctora Zhana Vrangalova, del departamento de Psicolog¨ªa de la Universidad de Nueva York, en la que se observ¨® la reacci¨®n emocional de 371 universitarios tras mantener relaciones sexuales ocasionales y tras no hacerlo.
El sexo ocasional funciona como inhibidor del estr¨¦s y ayuda a sentirse de mejor humor con todo
Una de las conclusiones fue que, a diferencia de quienes no ve¨ªan con demasiado inter¨¦s irse a la cama con cualquier sujeto que no fuera pareja, los que s¨ª recurr¨ªan al sexo ocasional experimentaban un mayor bienestar general en la vida. De ah¨ª que, como aconseja la pieza elaborada por Abraham Riesman y Jesse Singal, que este h¨¢bito sea un posible recurso para reducir el estr¨¦s y aumentar la autoestima. ¡°Cualquier encuentro er¨®tico satisfactorio, ya sea sin compromiso o con la pareja estable, tiene todo tipo de beneficios, tanto a nivel org¨¢nico como para el estado de ¨¢nimo. Equilibra y mejora los niveles de estr¨¦s, las endorfinas y la serotonina, entre otros¡±, afirma Ana Fern¨¢ndez Alonso, sex¨®loga y presidenta de la Asociaci¨®n Asturiana para la Educaci¨®n Sexual (ASTURSEX) y miembro de la Asociaci¨®n Estatal de Profesionales de la Sexolog¨ªa (AEPS).
Algunos estudios, como el del psic¨®logo Stuart Brody, han llegado a sugerir que quienes disfrutaban de relaciones sexuales completas ten¨ªan una mejor respuesta a las situaciones de estr¨¦s que se les presentaban en un periodo de tiempo relativamente corto; los sex¨®logos Beverly Whipple y Barry Komisaruk, por su parte, tambi¨¦n descubrieron que la autoestimulaci¨®n genital y vaginal de las mujeres hacia cotas de placer reduc¨ªa su sensibilidad al dolor, relacionando as¨ª el orgasmo con un aparente efecto analg¨¦sico; y el mismo Brody public¨® una amplia revisi¨®n de la literatura cient¨ªfica que enumeraba, uno detr¨¢s de otro, los muy diversos beneficios de la actividad sexual sobre la salud.
Con todos estos datos en la mano, usted podr¨ªa preguntarse: ?por qu¨¦ entonces a¨²n sigue siendo un tab¨² para muchos lo de la canita al aire? ¡°Porque nuestra sociedad occidental est¨¢ muy influenciada por cuestiones morales derivadas de ciertas ideolog¨ªas religiosas, que condenaban cualquier conducta er¨®tica que no fuera en el marco de la pareja estable. Y ah¨ª seguimos anclados¡±, afirma la experta.
Ahora bien, para adentrarse en estos mundos sin sufrir efectos secundarios, tenga en cuenta ciertos consejos:
Use protecci¨®n
¡°Conviene que ambos sepan a qu¨¦ est¨¢n jugando, tengan las reglas claras y se usen m¨¦todos preventivos en el plano f¨ªsico para evitar riesgos para la salud. Desde ah¨ª, no vemos que se puedan ocasionar perjuicios con este tipo de relaciones¡±, comenta Lurdes Lavado, psic¨®loga y sex¨®loga del gabinete psicol¨®gico Albora Bide. Efectivamente, aparte de la salud e higiene sexual como prioridad, es importante conocer la situaci¨®n y no llevarse a enga?o, porque las implicaciones emocionales tambi¨¦n pueden dejar secuelas.
Olv¨ªdese del amor, pero no de la emoci¨®n
¡°En bastantes ocasiones sucede que algunas personas quedan decepcionadas porque su par en la cama no llega a implicarse, pese a que tal vez lo haya dejado claro desde el principio¡±, comenta la psic¨®loga Lavado.
Parte de la culpa de que ocurra con frecuencia entre las f¨¦minas, como matiza la sex¨®loga Fern¨¢ndez, se debe a los convencionalismos sociales. ¡°En nuestra cultura, la promiscuidad masculina est¨¢ legitimada y aceptada socialmente como algo intr¨ªnseco del hecho de ser hombre. Digamos que la moral social es permisiva con los encuentros er¨®ticos ocasionales o espor¨¢dicos cuando se dan en los varones. Y no as¨ª en las mujeres, para las que tradicionalmente las pr¨¢cticas er¨®ticas solo estaban legitimadas si inclu¨ªan el amor¡±, puntualiza la sex¨®loga Fern¨¢ndez. Sin embargo, sea usted hombre o mujer, enamoradizo o d¨ªscolo, ha de tener en cuenta esto que subraya la especialista: ¡°El sexo jam¨¢s se desvincula de la emoci¨®n, porque el sexo es una emoci¨®n en s¨ª misma¡±.
Sea honesto
¡°Si el encuentro er¨®tico es satisfactorio, ambas partes est¨¢n de acuerdo y buscan lo mismo, no va a ser fuente de complicaciones, ni preocupaciones, ni remordimientos¡ S¨ª que lo ser¨¢ si alguno de los dos quiere algo m¨¢s y est¨¢ jugando a enga?ar o enga?arse con sus sentimientos y emociones¡±, a?ade Ana Fern¨¢ndez. Por eso mismo, la persona que a priori est¨¢ menos comprometida ha de asegurase de que la otra piensa exactamente igual, ya que, como argumenta la sex¨®loga, ¡°por muy ocasional que sea un encuentro er¨®tico, siempre hay un componente afectivo¡±.
Respete todas las posturas
¡°La orientaci¨®n sociosexual de las personas tiene mucho que ver con los valores que tenemos. Hay quienes son incapaces de tener sexo por sexo, y para acceder a la sexualidad necesitan estar en una relaci¨®n amorosa o, por lo menos, partir del hecho de que en alg¨²n momento habr¨¢ algo m¨¢s. Pero hay otras que elijen el sexo ocasional como forma de vida. No quieren compartir su d¨ªa a d¨ªa, necesitan su libertad, no tener que dar cuentas a nadie y, no por ello, quieren renunciar a la compa?¨ªa ¨ªntima espor¨¢dica de otras personas¡±, dice Lavado, de Albora Bide.
"Nuestra sociedad occidental est¨¢ muy influenciada por cuestiones morales derivadas de ciertas ideolog¨ªas religiosas, que condenaban cualquier conducta er¨®tica que no fuera en el marco de la pareja estable" (Ana Fern¨¢ndez Alonso, sex¨®loga)
No se ponga intenso
El beneficio de las relaciones ef¨ªmeras "reside en que solo se comparten buenos momentos de ocio, y la responsabilidad del d¨ªa a d¨ªa queda en otro lugar. Los problemas se dejan a un lado porque para un d¨ªa o un rato que vamos a estar juntos se evita saturar al otro con las densidades de nuestra vida¡±, desgrana Lurdes Lavado. ¡°Esto consigue que tambi¨¦n nos alejemos un poco de nuestros propios problemas. Libera y relaja: todo es bonito¡±.
Sea m¨¢s prudente con la edad
No porque sea un factor decisivo para gozar m¨¢s o menos en la cama, ni para protagonizar, muchos o pocos, encuentros er¨®ticos ocasionales, sino porque, como advierte la presidenta de ASTURSEX, ¡°si nos confundimos y nos metemos en un encuentro er¨®tico ocasional cuando lo que buscamos es una relaci¨®n estable, el coste emocional ser¨¢ m¨¢s intenso cuanto mayores seamos. Es una mera raz¨®n de oportunidades, ya que el hecho de no tener pareja puede vivirse [err¨®neamente] como un fracaso¡±.
Los expertos coinciden. Si busca a toda costa a su media naranja, mejor abst¨¦ngase: el sexo ocasional solo merece la pena si no causa frustraci¨®n.
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