Luchar contra el cambio clim¨¢tico por los derechos de la infancia
El calentamiento global pone en riesgo la salud y el desarrollo futuro de los ni?os

El cambio clim¨¢tico afecta a todas las personas. Independientemente del pa¨ªs o continente en el que vivan y de manera muy especial a las personas m¨¢s vulnerables. Tiene un impacto negativo en la salud y el desarrollo, tambi¨¦n en los niveles de productividad de las comunidades y los pa¨ªses.
Implica m¨¢s sequ¨ªas, inundaciones, olas de calor, incremento de los niveles del mar y otros fen¨®menos meteorol¨®gicos extremos. Cientos de millones de ni?os viven hoy en zonas sumamente expuestas a las consecuencias del cambio clim¨¢tico: desde las zonas costeras de Asia meridional al delta del Mekong, y de las islas del Pac¨ªfico al Cuerno de ?frica, ?frica ecuatorial, Am¨¦rica Latina y el Caribe. Alrededor de 160 millones de ni?os menores de cinco a?os viven en zonas con una alta probabilidad de sequ¨ªas y m¨¢s de 500 millones habitan en regiones con un alto riesgo de inundaciones.
Cuatro de cada cinco enfermedades, lesiones y muertes atribuibles al cambio clim¨¢tico, las sufren ni?os. Los cambios extremos que afectan a las condiciones clim¨¢ticas generan una mayor propagaci¨®n de la malnutrici¨®n, el paludismo y la diarrea, que se cuentan entre las principales causas de la mortalidad en la infancia. M¨¢s de 400 millones de ni?os viven en pa¨ªses con altas tasas de mortalidad por diarrea, en zonas donde la probabilidad de que ocurran inundaciones es sumamente alta.
Cuatro de cada cinco enfermedades, lesiones y muertes atribuibles al cambio clim¨¢tico, las sufren ni?os
La evidencia es indiscutible: el cambio clim¨¢tico tendr¨¢ cada vez m¨¢s consecuencias sobre todos los seres humanos, pero los ni?os se ver¨¢n afectados de manera desproporcionada, especialmente en las zonas m¨¢s pobres. Este fen¨®meno representa una amenaza fundamental para la mayor¨ªa de sus derechos b¨¢sicos, incluido el acceso a alimentos y agua, educaci¨®n, salud y con demasiada frecuencia, a su propia supervivencia. Adem¨¢s, la p¨¦rdida de los medios de subsistencia familiar y la migraci¨®n forzada tras los desastres relacionados con efectos clim¨¢ticos, tambi¨¦n exponen a los ni?os a peligros vinculados a la explotaci¨®n, la violencia y el abuso.
El combate contra el cambio clim¨¢tico est¨¢ en el centro del desarrollo sostenible y es parte esencial del mundo en el que queremos vivir. Desde todos los rincones del planeta se erigen voces que exigen liderazgo pol¨ªtico para hacer frente al cambio clim¨¢tico, la pobreza y la desigualdad. Para ello, el tr¨¢nsito hacia una econom¨ªa sostenible baja en emisiones de carbono, basada en la eficiencia energ¨¦tica y en las energ¨ªas renovables resulta fundamental, y este 2016 presenta una serie de oportunidades sin precedentes para alcanzar el mundo que queremos.
Hoy, 22 de abril, se firma el Acuerdo de Par¨ªs en la sede de Naciones Unidas, fecha que coincide con el D¨ªa Internacional de la Madre Tierra. Un n¨²mero r¨¦cord de pa¨ªses (155) han confirmado su voluntad de firmar el acuerdo, entre ellos Espa?a. Los gobiernos tienen un a?o para ratificar el texto, que entrar¨¢ en vigor 30 d¨ªas despu¨¦s de la adhesi¨®n de al menos 55 miembros de la Convenci¨®n Marco de las Naciones Unidas para el Cambio Clim¨¢tico que, en conjunto, sean responsables del 55% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero. El Acuerdo de Par¨ªs, suscrito por 196 Estados y partes en Par¨ªs el 12 de diciembre de 2015, supone la primera alianza universal sobre cambio clim¨¢tico. En este acuerdo hist¨®rico, todos los estados se comprometieron a trabajar para limitar el aumento de la temperatura global por debajo de los 2?, y a esforzarse porque esta no llegue a 1,5?.
Combatir el cambio clim¨¢tico resulta fundamental para alcanzar todos los objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
El camino que sigan los l¨ªderes, los gobiernos y otros actores mundiales marcar¨¢ el futuro de los ni?os
El reto universal de adoptar medidas urgentes para combatir el cambio clim¨¢tico y sus efectos se recoge en el Objetivo de Desarrollo Sostenible 13 (ODS). Para abordar este desaf¨ªo se requiere una acci¨®n global que trascienda las fronteras nacionales y que, a la vez, aglutine medidas locales dirigidas a promover el desarrollo humano y la preservaci¨®n del medio ambiente. Las emisiones en un punto del planeta afectan a comunidades que se encuentran en el otro extremo. Por eso, este problema precisa una coordinaci¨®n exhaustiva y activa por parte de los l¨ªderes y las instituciones pol¨ªticas.
El cambio clim¨¢tico afecta de forma decisiva a la gesti¨®n de riesgos como el hambre, las migraciones, las epidemias, las desigualdades y la inestabilidad pol¨ªtica. La protecci¨®n del medio ambiente y, en especial la mitigaci¨®n del cambio clim¨¢tico, son tareas vitales para reducir la carga mundial de enfermedades y mejorar la salud y la productividad de las poblaciones.
No podemos seguir haciendo las cosas de la misma manera. La Agenda 2030 hace una afirmaci¨®n crucial: quiz¨¢s seamos la ¨²ltima generaci¨®n que todav¨ªa tenga posibilidades de salvar el planeta. Nuestros l¨ªderes deben abordar este importante desaf¨ªo desde una mirada integral, garantizando que no se deje a nadie atr¨¢s.
El camino que sigan los l¨ªderes, los gobiernos y otros actores mundiales marcar¨¢ de forma indeleble el futuro de los ni?os.
La firma del Acuerdo de Par¨ªs abre una oportunidad para interpelar a nuestros l¨ªderes y gobiernos. Ahora pueden marcar la diferencia, hacer realidad la protecci¨®n del medio ambiente y tomar medidas que protejan a los m¨¢s vulnerables de los efectos del cambio clim¨¢tico. Para ello, los l¨ªderes y pa¨ªses del mundo, incluyendo Espa?a, deben priorizar las necesidades de adaptaci¨®n al cambio clim¨¢tico de las personas m¨¢s vulnerables, incluidos los ni?os; adoptar medidas que permitan mitigar el cambio clim¨¢tico; incorporar la perspectiva de los derechos de la infancia en los marcos normativos nacionales medioambientales; invertir en la infancia en los planes nacionales de mitigaci¨®n y adaptaci¨®n clim¨¢tica, y brindar educaci¨®n y capacitaci¨®n sobre cambio clim¨¢tico a la poblaci¨®n, especialmente, a los ni?os y j¨®venes.
Espa?a, anunci¨® con anterioridad que incrementar¨ªa la financiaci¨®n para combatir el cambio clim¨¢tico en relaci¨®n con las cifras de 2014, movilizando 900 millones de euros para 2020. Este hito es una gran oportunidad para recordar a los ciudadanos la necesidad de alzar sus voces y demandar a nuestros dirigentes, ahora m¨¢s que nunca, que Espa?a debe proteger a los ni?os dentro y fuera de nuestras fronteras de los efectos del cambio clim¨¢tico. Todos podemos desempe?ar una funci¨®n importante para proteger los derechos de las personas m¨¢s vulnerables y del medio ambiente.
Sandra Astete es especialista en pol¨ªticas de infancia en UNICEF Comit¨¦ Espa?ol.
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