Un estudio busca las claves para hacerse mayor sin envejecer
El proyecto Athlos analiza la vida de casi 400.000 personas para determinar las mejores conductas

Lo que importa no son los a?os que se cumpla, sino "funcionar" a esas edades. Es la palabra que repiten Josep Maria Haro, coordinador del proyecto, y otros participantes en el proyecto Athlos de la UE, como Jos¨¦ Luis Ayuso y Fernando Rodr¨ªguez Artalejo, tres de los espa?oles de esta iniciativa internacional (14 grupos de 11 pa¨ªses). Su cometido es encontrar las claves de lo que se denomina envejecimiento saludable, aquel que no impide cierta autonom¨ªa y en el que no se pierden muchas capacidades. Para ello cuentan con una ingente base de datos, las historias cl¨ªnicas y las vidas de casi 400.000 personas, en las que explorar y trabajar para elegir los factores m¨¢s importantes, y, a continuaci¨®n, aconsejar como potenciarlos, indica Ayuso, psiquiatra de la Universidad Aut¨®noma de Madrid.
El proyecto empez¨® hace un a?o, y le quedan cuatro para cerrar los trabajos. Pero Haro, del Sant Joan de D¨¦u, apunta a cinco l¨ªneas fundamentales: salud mental (la primera causa de p¨¦rdida de a?os de vida saludable), enfermedades osteomusculares (la segunda), los trastornos cognitivos, las enfermedades cardiovasculares y el c¨¢ncer.
Pero no se trata solo de un trabajo centrado en la medicina, apunta Ayuso. "Muchas de las enfermedades que asociamos a la vejez tienen factores comunes", afirma, "pero no es solo eso". Por ejemplo, destaca "la sensaci¨®n de soledad" como un agente negativo. "Se puede estar rodeado de familia y no tener con qui¨¦n compartir algo importante", explica. Y tampoco es cuesti¨®n "de tener ayuda". Con la idea de buscar la salud a edades avanzadas, "entendida como la define la OMS, como bienestar". "Ahora se llega a los 65 con un nivel de funcionamiento que antes no se alcanzaba. Se trata de ver qu¨¦ hace que unos lleguemos mejor que otros", insiste.
Haro expone otro ejemplo de lo fino que quieren llegar a hilar. "No es lo mismo capacidad que funcionamiento", afirma. Se refiere, por ejemplo, a que una persona que necesita una silla de ruedas para moverse no funciona igual si vive en una ciudad adaptada que si lo hace en un entorno que no est¨¢ preparado.
A falta de conclusiones cerradas, Haro apunta a que, aunque haya muchos factores comunes (el ejercicio en s¨ª mismo es bueno, aparte de sus valores protectores de enfermedades cardiovasculares; la dieta tambi¨¦n es importante), hay muchos otros aspectos que medir. "Se pueden hacer microsimulaciones para ver c¨®mo un cambio a los 20 a?os repercute en los 65", indica. Por ejemplo, la hipertensi¨®n no es tan importante con 80 a?os que con 40, o el ¨ªndice de masa corporal que mide la posible obesidad hay que interpretarlo de manera diferente: en un joven debe ser bajo, en alguien muy mayor que sea m¨¢s alto est¨¢ bien, comenta el coordinador del trabajo.
La gran cantidad de datos de que disponen permite hacer esos estudios sin tener que dise?ar un ensayo desde cero, lo que implicar¨ªa tener que esperar 20 o 30 a?os para saber el posible efecto de una intervenci¨®n. O incluso m¨¢s tiempo, porque "el envejecimiento empieza desde antes de nacer", apunta Ayuso.
El trabajo, "el m¨¢s importante de los financiados por la UE para conocer los determinantes del envejecimiento saludable", en palabras de Artalejo, aspira a ser algo m¨¢s que un buen desarrollo acad¨¦mico. "Elaboramos material did¨¢ctico y contamos con la colaboraci¨®n de la Age Platform, la mayor ONG sobre envejecimiento de Europa", dice Haro. "Ellos tienen experiencia sobre c¨®mo hacer lobby. Tambi¨¦n est¨¢ representada la Administraci¨®n en nuestro comit¨¦ asesor", a?ade. "La UE est¨¢ envejeciendo y ello aumenta los retos. Ese es el sentido de nuestro trabajo", concluye Ayuso.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.