Marruecos no quiere ni una bolsa de pl¨¢stico

El 1 de julio Marruecos deber¨ªa enterrar las bolsas de pl¨¢stico en el pasado. Quedar¨¢ prohibida su fabricaci¨®n, importaci¨®n, exportaci¨®n, comercializaci¨®n y uso. Ni siquiera pagando por ellas deber¨ªa conseguirse estas bolsas en los s¨²per. Lo cual es como quitarle a un fumador sus dos paquetes diarios de tabaco. Hay quienes dudan de que un h¨¢bito tan arraigado vaya a desaparecer de la noche a la ma?ana. Y recuerdan que aunque el Parlamento aprob¨® en 2008 una ley que prohib¨ªa fumar en los lugares p¨²blicos, despu¨¦s de ocho a?os a¨²n est¨¢ pendiente de publicarse la norma en el Bolet¨ªn Oficial. La cobard¨ªa de los gobernantes y la fuerza de las multinacionales del tabaco siguen facilitando que hoy en d¨ªa pueda fumarse en comercios, restaurantes, trenes, cines, tribunales y salas de espera.

En el caso de las bolsas, la ley se aprob¨® en diciembre de 2015 y deber¨ªa entrar en vigor en julio. Ahora es el mism¨ªsimo rey Mohamed VI quien ha puesto gran empe?o en que se cumpla la norma. Tal vez influya el hecho de que en noviembre Marrakech acoger¨¢ la cumbre clim¨¢tica COP22 y Marruecos se est¨¢ volcando en ofrecer una buena imagen. Para concienciar a los ciudadanos, el Gobierno ha promovido una campa?a de ¡°Bolsas Cero¡±, donde varios famosos posan con cestos de mimbres y bolsas de tela.

Hace ya tres a?os que Mauritania tom¨® la iniciativa en el Magreb para limpiar el pa¨ªs de bolsas, por delante de Argelia y T¨²nez, que baraja tambi¨¦n la prohibici¨®n. En Mauritania la gente tiraba las bolsas de basura en el desierto y el viento las devolv¨ªa a la ciudad. Las ca?er¨ªas se atascaban y se produc¨ªan inundaciones en Nuakchot, la capital. Adem¨¢s, las cabras se las com¨ªan y el 80% de los bovinos llegaban al matadero con bolsas en el est¨®mago.