Ahora Alemania
El atentado en M¨²nich confirma la crisis de seguridad que vive Europa
Apenas una semana despu¨¦s del brutal atentando de inspiraci¨®n yihadista perpetrado en Niza, otro ataque, esta vez en M¨²nich, sacude a un pa¨ªs europeo. La enorme preocupaci¨®n ante la cadena de atentados padecidos en el ¨²ltimo a?o ¡ªque ha visto los escenarios del terror alcanzar, entre otros lugares, a las ciudades de Par¨ªs y Niza, el aeropuerto de Bruselas y el de Estambul, un tren en Baviera y ahora, M¨²nich¡ª est¨¢ justificada.
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Es evidente que Europa est¨¢ atravesando una crisis de seguridad, y que esta crisis no tiene una soluci¨®n f¨¢cil ni r¨¢pida. La raz¨®n est¨¢ en el modus operandi de los terroristas, cuya ausencia total de humanidad y su deseo de causar el m¨¢ximo da?o les lleva a atentar indiscriminadamente contra pac¨ªficos ciudadanos que desarrollan su vida diaria con la normalidad que es propia de sociedades libres, seguras y dem¨®craticas.
Toca a las autoridades nacionales ¡ªtambi¨¦n a las europeas, sin duda, pues la escala del problema escapa la capacidad de actuaci¨®n individual de los Estados¡ª afrontar esta crisis con serenidad, pero con mucha determinaci¨®n. Urge pues convocar a los responsables de las fuerzas y cuerpos de seguridad de los pa¨ªses y a los ministros del Interior de la Uni¨®n Europea a que se re¨²nan de urgencia para estudiar c¨®mo mejorar la capacidad de respuesta ante este grave desaf¨ªo. El proyecto europeo, que atraviesa horas dif¨ªciles, no puede bajar los brazos ante una amenaza de tal gravedad.
Esa cooperaci¨®n debe ser tambi¨¦n internacional. Sabemos que la amenaza que representa el autodenominado Estado Isl¨¢mico es global, y que sus v¨ªctimas potenciales incluyen a todo tipo de personas, de cualquier nacionalidad, etnia o religi¨®n y en cualquier pa¨ªs. Ello deber¨ªa ofrecer, adem¨¢s de un elemento de esperanza en cuanto a las posibilidades de derrotar a esta barbarie sin sentido que nos ha tocado vivir, un acicate para lograr que la solidaridad ante esta amenaza se traduzca en acciones ¡ªde inteligencia, policiales, militares y judiciales¡ª que nos ayuden a derrotarlo.
Mientras llegan las respuestas es muy importante que nuestras sociedades no caigan en la desmoralizaci¨®n. Hemos visto en Francia inoportunas divisiones pol¨ªticas e inaceptables intentos de capitalizar electoralmente los atentados de Niza. Alemania, que se ha conducido de forma ejemplar en la cuesti¨®n de los refugiados, debe estar orgullosa de lo logrado en este ¨²ltimo a?o en materia de acogida e integraci¨®n. Los asaltos a mujeres en Colonia en Nochevieja, el reciente ataque en el tren de Baviera y ahora este atentado ofrecen una tentaci¨®n a los demagogos y populistas de volver sobre lo andado que debe ser rechazada con toda firmeza.
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