Las emociones humanas en el mundo
L A PROLIFERACI?N diaria de noticias angustiosas desde m¨²ltiples lugares del planeta nos puede hacer creer que en el mundo prevalecen emociones y experiencias negativas, como la rabia, el estr¨¦s o la preocupaci¨®n, sobre aquellas otras de signo positivo como el disfrute, la risa, el sentirse respetado o bien descansado. No es as¨ª.
Gallup pregunta a la gente en alrededor de 140 pa¨ªses sobre diez emociones o experiencias, cinco positivas y cinco negativas, que pudieron haber experimentado durante el d¨ªa anterior a la encuesta. Luego, con las respuestas obtenidas crea un ¨ªndice para cada categor¨ªa. Van de 0 a 100, y los valores m¨¢s altos indican mayor prevalencia de las emociones de que se trate. Al mirar el ¨ªndice mundial de emociones positivas, destacan dos cosas: lo elevado del n¨²mero y lo estable en el tiempo. En los ¨²ltimos 10 a?os, que son los que lleva Gallup haciendo estas mediciones, ese ¨ªndice se ha movido entre 68 y 71. Ha permanecido en 71, su valor m¨¢s alto, durante los ¨²ltimos tres a?os.
En cifras globales, la preocupaci¨®n es la experiencia negativa m¨¢s extendida.
?Qu¨¦ dice la gente? El 85,5% de la muestra mundial se sinti¨® respetada durante la mayor parte del d¨ªa anterior a la entrevista; el 71% rio o sonri¨®; el 69% disfrut¨®; el 67% se sinti¨® bien descansado; el 53,5% hizo o aprendi¨® algo interesante. Es decir, en general, y a juzgar por lo que dicen los propios entrevistados, el mundo no lo est¨¢ pasando tan mal. Por supuesto, hay pa¨ªses que atraviesan situaciones muy dif¨ªciles, como Siria, cuyo ¨ªndice global lo coloca en el ¨²ltimo lugar del planeta en emociones positivas. All¨ª, ninguna de estas llega a ser experimentada ni siquiera por la mitad de la poblaci¨®n. Pero los pa¨ªses en esa situaci¨®n son los menos. En el caso de Espa?a, el ¨ªndice de experiencias provechosas ha estado en alza durante los ¨²ltimos cuatro a?os, si bien ese incremento es, en buena medida, una recuperaci¨®n de los valores alcanzados entre 2008 y 2011. Entre las vivencias positivas que Gallup eval¨²a, la predominante entre los espa?oles es la de sentirse respetado, que, con el 93,8% de respuestas positivas, se convierte en uno de los porcentajes m¨¢s altos en el mundo. En el extremo opuesto se encuentra la experiencia de haber disfrutado gran parte del d¨ªa anterior, a lo cual responde afirmativamente casi un 65% de la muestra; una proporci¨®n de todas maneras alta.
Entre las variables analizadas que mejor predicen las emociones positivas est¨¢n la existencia de redes sociales en las cuales la gente encuentra apoyo, as¨ª como la generosidad y la libertad.
Mientras que los ingresos o el dinero son el predictor individual m¨¢s importante de cu¨¢n feliz la gente afirma sentirse, no lo es as¨ª de las emociones positivas que experimenta. Una mayor ganancia nos puede hace pensar que somos m¨¢s felices, pero no necesariamente nos hace experimentar m¨¢s sensaciones gratas en nuestra vida diaria.
Por otro lado, est¨¢ el ¨ªndice de emociones negativas. En los ¨²ltimos 10 a?os, este ¨ªndice se ha mantenido tambi¨¦n en un rango bastante estrecho, entre 24 y 28, siendo este ¨²ltimo valor el que alcanz¨® en 2015.
Valga aclarar que las experiencias positivas y negativas no est¨¢n inversamente relacionadas; es decir, que porque una persona perciba mucho de unas, no va a tener poco de las otras. Hay individuos y poblaciones que reportan altos niveles de sensaciones de los dos tipos a la vez, lo cual nos lleva a referirnos a ellas como las m¨¢s emocionales. Espa?a, por ejemplo, aparece por encima del mundo en ambos tipos de experiencias.
?Cu¨¢les son las emociones negativas que experimentan los valores m¨¢s altos y m¨¢s bajos? Mundialmente, el estar preocupado es la sensaci¨®n negativa m¨¢s extendida. En 2015 lo soportaba el 39% de la poblaci¨®n mundial; y en el caso de Espa?a un porcentaje a¨²n mayor, un 47.
A la preocupaci¨®n le sigue el estr¨¦s (34%), el dolor f¨ªsico (31%), la tristeza (23%) y la rabia (20%). Como es de suponer, estas experiencias negativas tambi¨¦n se distribuyen de manera desigual en el mundo. Los pa¨ªses en guerra como Siria e Irak reflejan estados de tristeza y rabia muy extendidos que afectan a la mayor¨ªa de la poblaci¨®n.
Este cuadro general de emociones positivas y negativas nos dice que, si bien el mundo no anda tan mal como a veces creemos, hay materia para pensar: ?no sigue siendo mucho que alrededor de una quinta parte de la poblaci¨®n mundial est¨¦ experimentando rabia y tristeza gran parte de sus d¨ªas? Si usted lo cree as¨ª, ahora tiene un motivo m¨¢s para preocuparse.
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