Putin allana su camino

Los resultados de las elecciones a la Duma celebradas este domingo en la Federaci¨®n Rusa se inscriben, por predecibles, en un guion perfilado hace a?os. Pese a ello, y pese a las denuncias por irregularidades en no pocos distritos electorales, la victoria de Rusia Unida es indiscutible. Desde su fundaci¨®n en 2001, el partido de Vlad¨ªmir Putin ha conseguido cuatro victorias abrumadoras en otros tantos procesos parlamentarios, asegur¨¢ndose una vez m¨¢s la mayor¨ªa absoluta en la c¨¢mara baja. En esta ocasi¨®n, con m¨¢s de un 54% de los votos (con un 93% escrutado), el resultado es aplastante: 343 esca?os de un total de 450.

La llegada de Putin al poder, all¨¢ por el a?o 2000, supuso numerosos cambios en el sistema pol¨ªtico ruso. Entre ellos, plaza en la que fracas¨® Yeltsin una y otra vez, la definitiva creaci¨®n de un sistema de partidos estable. No est¨¢ de m¨¢s recordar que el actual sistema ruso se erigi¨® sobre las cenizas de un Parlamento bombardeado por Yeltsin en su disputa por el poder postsovi¨¦tico; que la actual Constituci¨®n de 1993 fue una ¡°carta otorgada¡±, aprobada en refer¨¦ndum, eso s¨ª, pero no redactada de forma constituyente; o que los poderes que el texto constitucional concede al presidente exceden a los de cualquier sistema presidencialista democr¨¢tico. De ah¨ª que el papel de los partidos pol¨ªticos y del propio Parlamento, dadas sus limitaciones y escasas competencias, sea secundario, aunque no poco importante.

Al contrario que Putin, Yeltsin nunca estuvo al frente de ning¨²n partido. M¨¢s preocupado por consolidar su poder y legitimar su cargo ¡ªno se celebraron elecciones presidenciales hasta 1996, ?casi cinco a?os despu¨¦s de la desaparici¨®n de la URSS!¡ª, dej¨® de lado la pol¨ªtica partidista. A su alrededor conform¨® el denominado ¡°partido del poder¡±, un conglomerado pol¨ªtico y econ¨®mico con v¨ªnculos clientelistas que fue representado en los primeros procesos electorales parlamentarios por diferentes l¨ªderes y partidos. As¨ª, en 1993 fue su ex primer ministro, Yegor Gaidar, quien lider¨® Opci¨®n de Rusia; en 1995, el entonces primer ministro V¨ªktor Chernomirdin fue el llamado a situarse al frente del bloque presidencial, con Nuestra Casa es Rusia; y en 1999 Serguei Shoig¨², ministro para las situaciones de emergencia, encabez¨® el cartel electoral con Unidad. Sus resultados fueron m¨¢s que discretos: en 1993 venci¨® el populista Partido Liberal Democr¨¢tico, del ultranacionalista Vlad¨ªmir Zhirinovski, mientras que en 1995 y 1999 lo hizo el Partido Comunista de la Federaci¨®n Rusa de Guennadi Ziug¨¢noz.

Desde un primer momento, Putin estuvo convencido de que para afianzar su poder deb¨ªa, adem¨¢s de centralizar territorialmente el pa¨ªs y liberarse de la oligarqu¨ªa yeltsinista, controlar el sistema de partidos. Para ello modific¨® la ley electoral en 2001, y posteriormente tantas veces como ha sido necesario, y promovi¨® la gestaci¨®n de Rusia Unida. Hasta la reciente nueva reforma de 2012, obligada por las manifestaciones de protesta que estallaron tras las parlamentarias de 2011, los partidos necesitaban 40.000 afiliados para registrarse y 100.000 firmas para presentarse a las elecciones. Ello, unido a que el umbral de votos v¨¢lidos para acceder a la Duma lleg¨® a estar en el 7%, miniaturiz¨® el sistema, haciendo imposible la competencia frente a una Rusia Unida que cuenta con todos los recursos estatales y medi¨¢ticos posibles.

Las elecciones parlamentarias facilitan la reelecci¨®n de Putin dentro de dos a?os

El dominio de Rusia Unida es, sin duda, resultado de una exitosa estrategia dise?ada por Putin, quien en todo momento ha estado m¨¢s preocupado por intervenir en los partidos pol¨ªticos que en su fortalecimiento como instituci¨®n estatal. Desde 2003, tan solo han conseguido acceder a la Duma cuatro partidos: Rusia Unida y tres comparsas que, aunque a veces ense?an los dientes, como en ocasiones hacen el Partido Comunista o el PLDR de Zhirinovski, a la hora de la verdad se repliegan en el voto nacionalista com¨²n a todos ellos. En un cuarto de siglo de andadura independiente, Rusia ha pasado del sistema de partido ¨²nico sovi¨¦tico a un modelo de ¨²nico partido.

A pesar de la alta abstenci¨®n, la apuesta de Putin ha alcanzado cifras incre¨ªbles para un pa¨ªs en crisis econ¨®mica. Con este resultado, que previsiblemente resolver¨¢ sus dudas sobre si presentarse o no, ha allanado su camino a la reelecci¨®n dentro de dos a?os, la cual le permitir¨ªa ostentar la presidencia hasta 2024. Ah¨ª, y no en el Parlamento, es donde se dirimir¨¢ el futuro de Rusia. Al fin y al cabo, como dec¨ªa uno de los dirigentes de Rusia Unida, el exministro de Interior Bor¨ªs Grizlov, la Duma no es lugar para discusiones.

Jes¨²s de Andr¨¦s es profesor titular de Ciencia Pol¨ªtica en la UNED.