Primer caso confirmado de sumisi¨®n con burundanga en Espa?a
Un mujer de 36 a?os atendida de urgencia en Palma de Mallorca fue presuntamente intoxicada con escopolamina por su exmarido
El burundanga es una droga rodeada de mitos. Se dice que con soplarla a la cara elimina la voluntad de una persona y se puede hacer con ella lo que se desee sin que luego recuerde nada. Otras fuentes hablan de folletos impregnados con esta sustancia para intoxicar y robar a ancianos. Aunque para algunos m¨¦dicos estas posibilidades son poco cre¨ªbles, muchos admiten que los mitos en parte se sostienen porque la escopolamina, el nombre cient¨ªfico de esta sustancia, es muy dif¨ªcil de detectar en el cuerpo con an¨¢lisis convencionales. Pero no imposible.
Un estudio acaba de describir el primer caso de intoxicaci¨®n confirmada con burundanga en Espa?a. Sucedi¨® en Palma de Mallorca en la primavera de este a?o. Una mujer de 36 a?os acudi¨® a urgencias del Hospital Universitario de Son Espases. Estaba ¡°obnubilada y confusa, con discurso incoherente, pupilas midri¨¢ticas [muy dilatadas], visi¨®n borrosa e inestabilidad de la marcha¡±.
En los an¨¢lisis de la orina de la paciente no hab¨ªa rastro de drogas incluidas en el protocolo de sumisi¨®n qu¨ªmica. Pero s¨ª la encontr¨® otra t¨¦cnica conocida como espectrometr¨ªa de masas
Un primer an¨¢lisis de orina no detect¨® ni rastro de las sustancias m¨¢s habituales en estos casos: cannabis, benzodiacepinas, anfetaminas, ¨¦xtasis, coca¨ªna y opi¨¢ceos, y tampoco se detect¨® etanol (alcohol) en suero. Entonces, la amiga que acompa?aba a la paciente dijo que sospechaba que el exmarido de la afectada, con quien estaba en tr¨¢mite de divorcio, le hab¨ªa echado ¡°alg¨²n f¨¢rmaco en la bebida¡±. La propia paciente, al recobrar la consciencia, confirm¨® esa sospecha.
Fue el comienzo de un caso totalmente nuevo para el personal de la Unidad de Toxicolog¨ªa del Hospital balear. Los responsables iniciaron el protocolo de actuaci¨®n en casos de sumisi¨®n qu¨ªmica, el uso de drogas o f¨¢rmacos para robos o agresiones sexuales, y emitieron un parte judicial.
En los an¨¢lisis de la orina de la paciente no hab¨ªa rastro de drogas incluidas en el protocolo de sumisi¨®n qu¨ªmica como atropina, hiosciamina, GHB [¨¦xtasis l¨ªquido], ketamina, metoxetamina, alpha-PVP,metilona, mefedrona, MDPV y para-metoxi-metanfetamina. Pero las pruebas, conocidas como cromatograf¨ªa de gases acoplada a espectrometr¨ªa de masas, s¨ª dieron positivo para escopolamina. A la paciente se le ofreci¨® la posibilidad de realizar un an¨¢lisis de pelo para conocer una posible administraci¨®n repetida, pero lo rechaz¨®.
¡°No tenemos constancia de ning¨²n otro caso como este en la literatura cient¨ªfica¡±, explica a Materia Bernardino Barcel¨®, jefe de la Unidad de toxicolog¨ªa de Son Espases. La detecci¨®n ha sido en parte posible gracias a la t¨¦cnica especial de espectrometr¨ªa, que es ¡°cara, requiere profesionales formados¡± y no est¨¢ disponible ¡°en la pr¨¢ctica totalidad de hospitales de Espa?a¡±, explica. La cromatograf¨ªa de gases y la espectrometr¨ªa de masas son t¨¦cnicas que constituyen una herramienta potente para separar, identificar y cuantificar los componentes vol¨¢tiles y semivol¨¢tiles de mezclas complejas.
¡°En nuestro hospital hemos analizado 500 v¨ªctimas de una agresi¨®n sexual de este tipo y no hemos encontrado escopolamina en ninguna, esto no es ni mucho menos una epidemia
Santiago Nogu¨¦, jefe de Toxicolog¨ªa cl¨ªnica en el Hospital Cl¨ªnico de Barcelona
Dos d¨ªas despu¨¦s de que le dieran el alta, la paciente volvi¨® a un chequeo al hospital e inform¨® que su ex-marido hab¨ªa reconocido a la Polic¨ªa haberle suministrado escopolamina a escondidas que hab¨ªa comprado por Internet, seg¨²n la descripci¨®n de este primer caso, publicada en la revista especializada Medicina Cl¨ªnica. "Es este caso", explica Barcel¨®, "no se trataba de una agresi¨®n sexual sino solo de provocar da?o a la expareja".
Aunque en Europa y EE UU se conocen ¡°muchos casos confirmados¡±, este es el primero en el que se demuestra cl¨ªnicamente el uso de esta sustancia para realizar una sumisi¨®n qu¨ªmica en Espa?a, resalta Barcel¨®.
"El uso de la escopolamina en nuestro entorno no es un mito¡±, dice el estudio. Pero Barcel¨® matiza que probablemente se trata de ¡°una excepci¨®n¡±. Es imposible saber si est¨¢ habiendo un repunte de casos de sumisi¨®n qu¨ªmica en Espa?a. Se debe en parte a que no existe ning¨²n registro a nivel nacional, pero sobre todo a lo complicado que es determinar cu¨¢ndo una persona ha sido efectivamente drogada por otra y cu¨¢ndo el paciente, ¡°para evadir responsabilidades por consumo de drogas, dice ¡®me han echado algo¡±, resalta el toxic¨®logo.
De la misma opini¨®n es Santiago Nogu¨¦, jefe de Toxicolog¨ªa cl¨ªnica en el Hospital Cl¨ªnico de Barcelona, centro de referencia en Espa?a para casos de agresi¨®n sexual. ¡°No sabemos las cifras reales¡± sobre sumisi¨®n qu¨ªmica, se?ala, aunque los datos disponibles no confirman que hayan aumentado los casos. ¡°Todo caso de supuesta agresi¨®n sexual en Barcelona es derivado a este hospital¡±, explica Nogu¨¦. ¡°El n¨²mero de personas en las que encontramos drogas u otras sustancias se mantiene estable, pero s¨ª ha crecido el n¨²mero de pacientes que dicen haber sido v¨ªctimas de la sumisi¨®n qu¨ªmica, parece haber m¨¢s concienciaci¨®n de que puede existir, pero el porcentaje de personas en las que encontramos esas sustancias es la misma, no hay un rebrote real¡±, se?ala.
El burundanga es dif¨ªcil de detectar porque solo permanece en el cuerpo durante una ¡°ventana de tiempo de unas seis horas¡±, reconoce Nogu¨¦, pero asegura que mucho de lo que se dice o se escribe sobre ella ¡°sigue siendo un mito¡±. En el caso de Palma es ¡°evidente hubo una sumisi¨®n qu¨ªmica con escopolamina¡±, pero tambi¨¦n se trata de un caso muy puntual. En la mayor¨ªa de casos no es esta sustancia la que se usa, resalta. ¡°En nuestro hospital hemos analizado 500 v¨ªctimas de una agresi¨®n sexual de este tipo y no hemos encontrado escopolamina en ninguna, esto no es ni mucho menos una epidemia¡±. Algunas veces no se detecta nada, pues los afectados acuden al hospital demasiado tarde, cuando las sustancias ya se han eliminado del cuerpo. En los casos positivos de sumisi¨®n qu¨ªmica lo m¨¢s com¨²n es que se encuentre alcohol y, en menor medida, "coca¨ªna, cannabis, GHB o benzodiazepinas", resalta Nogu¨¦ La posibilidad de que se pueda anular la conciencia y la memoria soplando burundanga en la cara, ¡°con un libro impregnado, o un abrazo, es una mentira absoluta¡±, concluye.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.