Dos juicios contra el LRA
Por primera vez en la historia el grupo terrorista se enfrenta a los tribunales en La Haya y en Kampala
El 6 de diciembre la Corte Penal Internacional (CPI) abr¨ªa en La Haya el juicio contra Dominic Ongwen, comandante del Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n del Se?or (LRA, por sus siglas en ingl¨¦s). Se trata de una muy buena noticia despu¨¦s de que durante los ¨²ltimos meses varios pa¨ªses africanos pusieran en tela de juicio el papel de esta instituci¨®n y anunciasen su salida de ella, adem¨¢s de ser muy esperado por las v¨ªctimas del grupo armado.
En esta primera fase del juicio se leen los cargos que pesan sobre el acusado y el fiscal y los abogados, que representan a varios miles de v¨ªctimas, har¨¢n sus primeras declaraciones. A continuaci¨®n,la vista se suspender¨¢ hasta el 16 de enero, d¨ªa en el que el ministerio fiscal comenzar¨¢ a presentar sus pruebas.
El acusado ya hab¨ªa comparecido ante el tribunal el 26 de enero de 2015, pocos d¨ªas despu¨¦s de su traslado a la ciudad holandesa desde Bangui, capital de la Rep¨²blica Centroafricana, tras rendirse a principios de ese mes, diez a?os despu¨¦s de que la CPI lanzase la orden de busca y captura contra ¨¦l junto a Jospeh Kony, Vicent Otti (mandado asesinar por Kony en 2007 por participar en conversaciones de paz) y Okot Odhiambo.
En enero de 2015, Ongwe se identific¨® a s¨ª mismo y dijo haber nacido en Gulu, en el norte de Uganda, en 1975. Hablando en acholi, a?adi¨®: ¡°quiero dar gracias a Dios por crear cielo y tierra junto con todos los que est¨¢n en la tierra¡±. Luego declar¨® que fue secuestrado por el LRA en 1988, cuando ten¨ªa 14 a?os.
Ongwen fue secuestrado por el LRA en 1988, cuando ten¨ªa 14 a?os
Ongwen fue secuestrado a esa edad (algunas informaciones hablan de que tendr¨ªa solo 10 a?os) en su camino hacia la escuela, para luego ir ascendiendo en las filas del LRA hasta convertirse en uno de sus m¨¢s temidos comandantes, estando al mando de la conocida como Brigada Sinia, famosa por sus operaciones de castigo contra civiles y el corte de labios y orejas de sus v¨ªctimas. Adem¨¢s era miembro del Control Altar, como es conocido el alto mando del LRA.
Algunos grupos de derechos humanos se?alan que el hecho de que ¨¦l mismo fuera primero una v¨ªctima, obligado a ser ni?o soldado, podr¨ªa ser un atenuante si se le encontrase culpable de los cargos que se le imputan. Casualmente, la CPI le acusa de muchos de los cr¨ªmenes que inicialmente fueron perpetrados contra ¨¦l. Sin embargo, otros activistas defienden que ese pasado no debe interferir en su condena porque es responsable de graves cr¨ªmenes y ha tenido muchas oportunidades para entregarse a la justicia con anterioridad.
Elise Keppler, directora adjunta del Programa de justicia internacional de Human Right Watch (HRW) ha declarado que ¡°el enjuiciamiento por parte de la CPI de Dominic Ongwen es un paso muy importante para que se haga justicia por las atrocidades cometidas por el LR¡±.
Este grupo es conocido por su brutalidad contra los civiles y el continuo secuestro de ni?as y ni?os para ser utilizados como soldados y esclavas sexuales (el LRA habr¨ªa secuestrado a m¨¢s de 70.000 ni?os y ni?as, aunque en los ¨²ltimos a?os ha sido dif¨ªcil seguir las cifras del grupo con exactitud), pero nunca antes uno de sus comandantes hab¨ªa sido llevado a juicio.
El LRA surgi¨® por primera vez en el norte de Uganda a mediados de los a?os 80 del siglo pasado cuando se levant¨® en armas en nombre del pueblo acholi contra el gobierno del presidente Yoweri Museveni. Desde un principio cont¨® con el apoyo, la financiaci¨®n y la protecci¨®n del gobierno de Sud¨¢n, donde durante a?os estuvieron sus principales bases.
Una vez que el grupo rebelde, tras a?os de destrucci¨®n, matanzas y secuestros, fue expulsado de la zona, hace m¨¢s de una d¨¦cada, gracias a las acciones del ej¨¦rcito ugand¨¦s con apoyo estadounidense, se ha movido por Sursud¨¢n, Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo, Rep¨²blica Centroafricana y Sud¨¢n.
En los ¨²ltimos a?os, varios informes hab¨ªan hablado de la poca operatividad del LRA e insinuaban que solo unas pocas docenas de guerrilleros segu¨ªan perteneciendo al mismo. Estas se hayar¨ªan diseminadas por tres pa¨ªses: Darfur en Sud¨¢n, donde se encontrar¨ªa Joseph Kony, RDC y RCA. Muchos de los antiguos seguidores del l¨ªder guerrillero habr¨ªan desertado, la mayor¨ªa de los comandantes rebeldes habr¨ªan muerto o se habr¨ªan rendido a la justicia como es el caso de Ongwen y los pocos fieles a Joseph Kony habr¨ªan abandonado el proyecto inicial del grupo -derrotar al gobierno ugand¨¦s y establecer una rep¨²blica basada en los Diez mandamientos de la Biblia- concentrando sus esfuerzos en seguir vivos a costa de acosar a civiles residentes en zonas cercanas a sus campamentos. Las mismas fuentes tambi¨¦n indicaban que hace ya a?os que Kony no dirige ninguna operaci¨®n militar, dejando la oportunidad de estas al arbitrio de cada comando. Incluso hay un informe de Enough project que asegura que Kony no mantiene el control total del grupo.
Desde principios del presente a?o se empez¨® a hablar de un aumento de la actividad del grupo. El pasado mes de julio se confirmaba este rumor y se denunciaban actuaciones en nuevas ¨¢reas y nuevos secuestros de ni?as y ni?os en la Rep¨²blica Centroafricana.
Volviendo a Ongwen, se?alar que se le acusa de 70 delitos tipificados como cr¨ªmenes de guerra y contra la humanidad cometidos en el norte de Uganda entre 2003 y 2004 durante los ataques a cuatro campos de desplazados -Pajule, Odek, Abok y Lukodi-, estos incluyen muerte, tortura, esclavitud, persecuci¨®n y saqueo. Tambi¨¦n comprenden cr¨ªmenes de ¨ªndole sexual y de g¨¦nero as¨ª como el secuestro y uso de menores soldados en el norte de Uganda entre 2002 y 2005. En su comarecencia, el ex ni?o soldado se ha declarado inocente de todas los cargos que se le imputan.
Junto a este juicio que se celebra en La Haya, en Uganda est¨¢ a punto de comenzar el de Thomas Kwoyelo, otro comandante del LRA, primero en ser juzgado por los cr¨ªmenes cometidos durante su pertenencia al grupo armado en suelo africano. Este otro proceso tambi¨¦n supone un nuevo paso en la lucha contra la impunidad y en el fortalecimiento de la justicia transicional en el continente. Su celebraci¨®n es posible gracias a la creaci¨®n de la Divisi¨®n de Cr¨ªmenes Internacionales dentro del Tribunal Supremo ugand¨¦s. El pasado mes de marzo se aprobaron las reglas procesales de la misma y desde entonces es factible juzgar en el pa¨ªs a personas como Kwoyelo.
En la primera comparecencia ente el tribunal, el abogado defensor de Kwoyelo no se present¨® y tuvo que nombrarse uno nuevo, y el fiscal y el abogado de las v¨ªctimas han pedido a?adir nuevos cargos contra el acusado: los de cr¨ªmenes de ¨ªndole sexual y de g¨¦nero. No es la primera vez que se suspende este proceso y por eso surgen dudas sobre el mismo.
Thomas Kwoyele es el primer comandante del LRA en ser juzgado en suelo africano
Para facilitar el seguimiento del juicio de Ongwen por sus v¨ªctimas y el p¨²blico en general, la CPI ha habilitado cuatro centros donde se podr¨¢ seguir en directo, en los lugares donde los cr¨ªmenes fueron cometidos, al igual que en Gulu, la mayor ciudad de la regi¨®n, y en Cooron, cerca del ¨¢rea donde el antiguo comandante del LRA naci¨®. La CPI tambi¨¦n ha llevado algunos l¨ªderes comunitarios ugandeses hasta La Haya para que sean testigos de la apertura del juicio.
Aqu¨ª podemos ver la comparecencia de Dominic Ongwen ante la CPI el seis de diciembre de 2016:
En este proceso dos abogados representan a m¨¢s de 4.100 v¨ªctimas. La funci¨®n de estos letrados es muy importante porque al margen de poder ser llamadas como testigos, a trav¨¦s de ellos, las v¨ªctimas podr¨¢n contribuir al proceso interrogando a los testigos o sometiendo a la consideraci¨®n del tribunal temas legales o de otra ¨ªndole.
Este juicio levanta muchas expectativas ya que, como se?al¨¢bamos anteriormente, es la primera vez que un antiguo ni?o soldado aparece ante la justicia internacional. El tribunal tendr¨¢ que dilucidar si este hecho sirve de atenuante. Child Soldiers International ha querido personarse en la causa para ofrecer sus conocimientos pero su petici¨®n fue rechazada por los jueces.
Al mismo tiempo, est¨¢ en juego la reparaci¨®n de las v¨ªctimas un punto en el que hasta el momento la CPI no ha encontrado el equilibrio apropiado.
En los pr¨®ximos meses nos enfrentamos a dos procesos, el de Ongwen y el de Kwoyelo, y ser¨¢ muy interesante seguir su desarrollo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.