Twin Peaks no es para tanto y estos son algunos motivos
El 'hater' Ferm¨ªn Zabalegui se atreve a cuestionar la serie de David Lynch que se convirti¨® en obra de culto en los 90 y este a?o regresa con nueva temporada
Hoy vamos a linchar lynchianos. Como buenos haters, los retos nos excitan, y no hay serie m¨¢s de culto y ej¨¦rcito de seguidores m¨¢s irracional que los adoradores de Twin peaks. Con un poco de perspectiva, descubrir¨¢ que la obra de David Lynch -¡ªpatrimonio art¨ªstico universal que ahora regresa con tercera temporada, 26 a?os despu¨¦s¡ª resulta una pieza insufrible e indefendible. Los devotos abandonar¨¢n sus madrigueras, saldr¨¢n a la luz con fervor y all¨ª estaremos nosotros para azotarles como es debido y dejarles m¨¢s helados que a Laura Palmer.
1.?Mucha Forma,?poco fondo
Imaginen una mala persona, aburrida y necia, cuyas ¨²nicas virtudes son que es guapa, misteriosa y viste y habla raro. Eso es Twin peaks. El gui¨®n es infumable, como un mal cap¨ªtulo de Se ha escrito un crimen alargado en 30 episodios. Las expresiones de sus abogados defensores ser¨¢n del tipo: "qu¨¦ fotograf¨ªa", "qu¨¦ manera de contar una historia", "nunca nadie hab¨ªa hecho algo as¨ª en televisi¨®n", "es una serie adelantada a su tiempo". No encontrar¨¢n m¨¢s argumentos a favor porque, simplemente, no los hay. Twin peaks es una producci¨®n mediocre envuelta en un papel de regalo car¨ªsimo.
2.?Twin Peaks?y la memoria?selectiva
La nostalgia no es m¨¢s que mala memoria. Twin peaks consta de 30 episodios y la gran mayor¨ªa de ellos no tiene ning¨²n inter¨¦s. Los fieles de Lynch alegan que los cap¨ªtulos buenos son los 6 que dirigi¨® ¨¦l personalmente, y los dem¨¢s los obvian. Cuando se menciona la segunda temporada, con sus 22 eternos episodios, muchos dicen que esa no cuenta o que, al menos, no lo hace desde que se conoce al asesino de Laura Palmer. Es decir, en el cap¨ªtulo 7. Luego siguen 15 bodrios hasta llegar al final de temporada que vuelve a dirigir Lynch. Adem¨¢s, tuvieron la desfachatez de rodar la pel¨ªcula precuela que no tiene ning¨²n sentido. Mientras que en Los Soprano o en The wire todos los episodios son obras de arte, en Twin peaks tenemos que hacer la vista gorda. Pues vale.
3.?La gran?mentira de los?personajes
Muchos personajes de Twin peaks se encuentran entre los peor construidos de la cultura audiovisual. Empecemos. La se?ora del le?o es un personaje transgresor que consiste en una se?ora¡ con un le?o. El joven James Hurley, el James Dean de la serie, tan imposible de creer y forzado que resulta el Jar Jar Binks de Twin peaks. El sheriff Truman pasa de estar tranquilo a, de repente, cruz¨¢rsele un cable y parecer un neoyorquino disfrazado. Maddy Ferguson, la prima de Laura Palmer, es id¨¦ntica a Laura Palmer en una dualidad innecesaria. Y as¨ª, un largo etc¨¦tera de personajes cuya ¨²nica virtud es vivir en un extremo imposible de la psicolog¨ªa humana. Twin peaks parece un frenop¨¢tico y no un pueblo en las monta?as.
4.?La falacia del universo Lynch
No hay nada m¨¢s estomagante que un defensor a ultranza del "mundo particular" de David Lynch. En el caso del director del pelo electrificado, parece que todas sus salidas rarunas y exc¨¦ntricas deben ser glorificadas. Desde la habitaci¨®n roja hasta las lechuzas, pasando por el hombre peque?o que habla al rev¨¦s y por la se?ora del le?o, todo tiene que tener un halo de misterio y una simbolog¨ªa m¨ªtica. El objetivo es penetrar en la mente del p¨²blico y crear una experiencia divergente basada en el morbo barato por lo desconocido. Haciendo una descripci¨®n literal, la serie va de un tipo del FBI mentalmente inestable y con adicci¨®n al caf¨¦ que intenta resolver un crimen mediante sue?os, salt¨¢ndose todos los protocolos conocidos. El resto es literatura y ganas de pasar el rato buscando posibles interpretaciones a cual m¨¢s peregrina sobre algo que, en realidad, no tiene ning¨²n sentido. Y eso lo sabe hasta el propio Lynch.
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