Qui¨¦n roba a Catalu?a

Artur Mas, primer ministro del ¨²ltimo Gobierno de Jordi Pujol y presidente de la Generalitat despu¨¦s, queda inmediata y directamente interpelado por los hechos expuestos por los m¨¢ximos responsables del Palau de la M¨²sica Catalana ante el tribunal que les juzga. Hasta ahora, las reacciones de Mas a las diversas tramas corruptas recuerdan mucho a las del Partido Popular y de Mariano Rajoy en la cascada de casos judiciales que afectan a personas de su formaci¨®n pol¨ªtica: son asuntos del pasado, el proceso judicial ha durado demasiado tiempo, ya veremos en qu¨¦ queda todo. Pero el sucesor de Jordi Pujol hereda tambi¨¦n las consecuencias de la corrupci¨®n rampante en su partido y, por m¨¢s que intente envolverse en tecnicismos, pocos pueden dudar ya de su responsabilidad pol¨ªtica.

En su d¨ªa, Mas asegur¨® en el Parlament que Converg¨¨ncia era ajena al saqueo. ?ltimamente ha garantizado en p¨²blico su plena confianza en los que han sido tesoreros de Converg¨¨ncia bajo sus mandatos. Mientras tanto, la justicia ha seguido su curso y se han abierto m¨¢s procesos en los que tambi¨¦n se investiga el pago de otras comisiones. La oposici¨®n ha pedido explicaciones inmediatas de Mas en el Parlamento de Catalu?a, y sorprende que Esquerra Republicana, tan activa en el trabajo contra la corrupci¨®n, no forme parte ahora de las fuerzas que lo exigen, sin duda a la espera de obtener r¨¦ditos pol¨ªticos de las ruinas del nacionalismo.

De lo escuchado en el juicio queda claro que el Palau de la M¨²sica era uno de los medios utilizados por Converg¨¨ncia para financiarse ilegalmente. Y sus responsables no cobraban solo la cifra m¨ªtica del 3% del importe de adjudicaci¨®n de obras p¨²blicas, sino que hubieron de subir al 4% ¡°porque Converg¨¨ncia quer¨ªa m¨¢s dinero¡±, seg¨²n la abrumadora declaraci¨®n de Jordi Montull, ex n¨²mero dos del Palau, quien ha confirmado y ampliado la del d¨ªa anterior de F¨¦lix Millet, el principal responsable. El modus operandi ¡ªpagos en efectivo a los tesoreros del partido¡ª era el habitual de tantas tramas corruptas. El entonces tesorero Daniel Os¨¤car ¡°ven¨ªa a buscar el dinero al Palau. Yo ten¨ªa el dinero a punto en un sobre, ¨¦l lo recog¨ªa, lo contaba y se iba¡±, siempre seg¨²n Montull.

El sentimiento independentista no va a desaparecer en Catalu?a por los casos de corrupci¨®n, pero todo cuando se va sabiendo cuestiona el ¡°Espa?a nos roba¡±, argumento con que el aparato de propaganda del separatismo ha machacado durante a?os. Por el momento, el que se est¨¢ demostrando que rob¨® a Catalu?a es el que fue su partido gobernante durante muchos a?os, y esto no se borra por m¨¢s que haya transmutado sus siglas a las de PDECat.

Que todo esto coincida con la mixtificaci¨®n de un tr¨¢mite urgente y semisecreto de la reforma del reglamento del Parlament, destinada a encubrir jur¨ªdicamente la declaraci¨®n de Catalu?a como rep¨²blica independiente, es una cortina de humo demasiado burda y un modo realmente estramb¨®tico de defender la necesidad ag¨®nica de una nueva patria. Todo hecho contra las promesas de transparencia, respeto a la legalidad y compromiso de contar con la mayor¨ªa social que el independentismo hab¨ªa predicado.