Maduro, fuera de la realidad

Resulta revelador del grado de descomposici¨®n al que est¨¢ llegando Venezuela que el pasado martes el presidente de la Rep¨²blica Bolivariana, Nicol¨¢s Maduro, fuera agredido con una andanada de huevos durante la celebraci¨®n de un acto patri¨®tico en una localidad de signo indiscutiblemente chavista. Al Gobierno se le est¨¢n yendo las cosas de las manos, y un s¨ªntoma inquietante de la anarqu¨ªa que azota al pa¨ªs es que sean ya cinco los fallecidos desde que la oposici¨®n empez¨® a movilizarse tras el fallido golpe de Estado en el que el Tribunal Supremo pretendi¨® hace m¨¢s de dos semanas asumir las competencias de la Asamblea Nacional, el poder legislativo, hasta que no tuvo m¨¢s remedio que recular. La violencia es cada vez mayor en las calles y al desorden contribuyen decididamente los llamados colectivos,grupos de choque afines al chavismo, a los que se ha acusado de ser responsables de algunas de las recientes muertes.

En su af¨¢n por enrocarse en el poder, y en no propiciar una salida al pa¨ªs a trav¨¦s de la convocatoria de elecciones y la liberaci¨®n de todos los presos pol¨ªticos, Maduro empieza a estar fuera de la realidad. No se trata solo de que sus bases empiecen a cuestionarlo y de que el Gobierno pierda el control sobre los grupos armados del oficialismo, es que adem¨¢s no deja de provocar a la oposici¨®n: hace poco facilit¨® la inhabilitaci¨®n de Henrique Capriles, excandidato presidencial y gobernador del Estado de Miranda, para ejercer cargos p¨²blicos durante 15 a?os. Otro signo ostensible del deterioro general ha sido el intento de agresi¨®n que sufri¨® el arzobispo de Caracas cuando critic¨® al Gobierno por amparar a ¡°los grupos armados que act¨²an con presunta impunidad¡±.

Estos signos contribuyen a que la tensi¨®n crezca ante la gran marcha convocada el mi¨¦rcoles por la oposici¨®n. Del Gobierno de Maduro depende ahora garantizar que las cosas no se descontrolen.