Soria vendi¨® el coche para comprar gasolina
Lo que entr¨® (mal) por la puerta como recorte desatinado de primas y subidas fiscales de garraf¨®n se escapa por la ventana de las indemnizaciones y da?os colaterales de la regulaci¨®n el¨¦ctrica
Recordar¨¢n sin duda el alboroto desatado en torno al d¨¦ficit de tarifa el¨¦ctrica. Sin entrar en detalles, que dar¨ªan para una Summa energ¨¦tica digna de Tom¨¢s de Aquino, la conclusi¨®n del invento, gestado a medias por la avidez de las el¨¦ctricas y la incapacidad de los gobiernos para frenar tales apetencias, los espa?oles deb¨ªan a las compa?¨ªas 23.000 millones. ?Que se hizo de tal d¨¦ficit? Pues que se convirti¨® en super¨¢vit. Entre 2014 y 2016 aparece un super¨¢vit acumulado de 1.118 millones. El modo y manera puede explicarse (y lamentarse) f¨¢cilmente. Por una parte, el gobierno del PP procedi¨® a un recorte de las primas a las energ¨ªas renovables, una idea razonable aplicada con tal zafiedad por el ministerio de Jos¨¦ Manuel Soria El Paname?o que ha provovcado los recursos legales de todas las compa?¨ªas, nacionales y extranjeras, afectadas por el desaguisado. Por otra, el mismo gobierno asperj¨® la producci¨®n el¨¦ctrica con impuestos rid¨ªculos cuya recaudaci¨®n s¨®lo conoce con exactitud Crist¨®bal Montoro.
Este cuento, a pesar del super¨¢vit de 1.118 millones, probablemente acabar¨¢ mal. Primero, porque el micronizado de impuestos (protestado por los hooligans el¨¦ctricos a pesar de que acaba pag¨¢ndolo el cliente) est¨¢ agotando sus efectos, como se advierte en el hecho de que las proyecciones de super¨¢vit cada vez son menores. Para este a?o est¨¢n previstos 9 millones ¡ªen 2015 fueron 470 millones y en 2016 se consiguieron 99¡ª, pero la an¨¦mica evoluci¨®n de la demanda el¨¦ctrica invita a temer un nuevo d¨¦ficit. La pendiente del super¨¢vit confirma que, como suele suceder en los gobiernos del PP, la soluci¨®n de los recortes y los impuestos sea un mero parche para fardar (?hemos resuelto el problema!) y, como dice el dicho popular, el que venga atr¨¢s que arree.
Pero falta el volat¨ªn final, digno de la l¨®gica del ¡°hombre que vendi¨® el coche para comprar gasolina¡±. El super¨¢vit de tarifa solo pod¨ªa, con raz¨®n, utilizarse para reducir el d¨¦ficit de tarifa; esto es, para reducir la factura acumulada de 23.000 millones. Pero el Gobierno, en el ¨²ltimo presupuesto, adjunt¨® una disposici¨®n cantinflesca: el super¨¢vit pod¨ªa utlizarse para pagar los costes jur¨ªdicos derivados de las sentencias y laudos a los que tiene que enfrentarse la Administraci¨®n espa?ola en el terreno de la energ¨ªa.
Enti¨¦ndanse bien la gesti¨®n pol¨ªtica del Gobierno y sus consecuencias dignas del repertorio de chistes del Almanaque Zaragozano. Orquesta una subida disparatada de impuestos, contraria a las t¨¦cnicas fiscales posteriores a Jovellanos y la cantidad, finalista en principio, desaparece engullida por las necesidades superiores del d¨¦ficit general que manipula Montoro. Promueve un basto (con b) recorte de las primas a las renovables, pero como vulnera de largo la seguridad jur¨ªdica, tendr¨¢ que pagar m¨¢s de lo que se ahorra. De forma que lo que entr¨® (mal) por la puerta como recorte desatinado de primas y subidas fiscales de garraf¨®n se escapa por la ventana de las indemnizaciones y da?os colaterales de la regulaci¨®n. Y luego dir¨¢n que la derecha gestiona bien. La que nos ha tocado, por desgracia, es un prodigio de ineptitud.
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