Las enfermeras tambi¨¦n cuentan (y mucho)
Inversi¨®n, educaci¨®n y empoderamiento de las trabajadoras del sector salud son claves para conseguir los Objetivos de Desarrollo Sostenible, seg¨²n los expertos del Congreso Internacional de Enfermer¨ªa
"Si no tienes una silla en la mesa, trae tu propia silla". Este ha sido el mantra de la jornada de este lunes en el Congreso Internacional de Enfermer¨ªa, en el que expertos del sector de la salud de todo el mundo reunidos en Barcelona han reivindicado el papel central jugado por las mujeres en el camino hacia el desarrollo sostenible y la importancia de que se involucren en los procesos de toma de decisi¨®n.
Alrededor de 20 millones de personas a escala mundial trabajan en enfermer¨ªa, seg¨²n los ¨²ltimos datos de Naciones Unidas, y las mujeres representan m¨¢s del 80% de este total. No obstante, si se mira a las posiciones de liderazgo, ellas brillan por su ausencia y apenas un 27% de los ministros del sector son mujeres.
"Las enfermeras tienen que estar en la vanguardia de la regeneraci¨®n de la sanidad, porque son la clave para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible", ha insistido Julia Duncan-Cassell, ministra de G¨¦nero, Infancia y Protecci¨®n Social de Liberia. La participaci¨®n en el ¨¢mbito pol¨ªtico a¨²n es dif¨ªcil para las mujeres, ha admitido la ministra, debido sobre todo a las distintas percepciones de los roles en funci¨®n el sexo, pero ha invitado a que se impliquen en los procesos de toma de decisi¨®n para que su enorme potencial no quede menoscabado.
Duncan-Cassell ha hecho referencia al papel de las enfermeras en la crisis del ¨¦bola que asol¨® su pa¨ªs en 2014. El 53% de los infectados por el ¨¦bola en Liberia fueron trabajadores de la salud; 120 de entre ellos murieron y 98 eran mujeres profesionales de atenci¨®n primaria. "Durante la emergencia, muchos medios internacionales se hicieron eco de las historias de las enfermeras extranjeras, pero muy poco se habl¨® de las liberianas, que realizaron un trabajo dif¨ªcil y peligroso. A pesar de todo, se mantuvieron en primera l¨ªnea. Muchas de entre ellas perdieron familiares, est¨¢n traumatizadas, pero no recibieron ning¨²n tipo de cuidado", ha explicado. "Es como cuando viajas en un avi¨®n y te dicen que tienes que abrochar tu propio cintur¨®n de seguridad antes de atender a los dem¨¢s. Les invitamos a que hagan lo mismo".
Las mujeres representan m¨¢s del 80% del personal de enfermer¨ªa. No obstante, si se mira a las posiciones de liderazgo, ellas brillan por su ausencia
Tras una evaluaci¨®n del sistema de salud realizada en 2015, las autoridades sanitarias de Liberia decidieron canalizar los esfuerzos hacia la mejora de las instalaciones y un aumento de la inversi¨®n en educaci¨®n y formaci¨®n. "Prevenir, prevenir y prevenir. Esto es lo que hay que hacer. Tenemos que estar preparados e innovar para hacer de la escasez virtud. Si hay que usar una bolsa de pl¨¢stico porque no tenemos guantes, pues se hace", ha destacado la ministra. Para lograrlo es crucial la voluntad pol¨ªtica en reconocer la importancia del gasto en salud, ha sostenido la ministra, pero, sobre todo, que las mujeres tomen las riendas de su destino.
Para alcanzar las metas fijadas para 2030, quedan muchos retos pendientes, adem¨¢s de la igualdad de g¨¦nero. La presidenta del Consejo Internacional de Enfermer¨ªa, Judith Shamian, ha recordado que para ese a?o ser¨¢n necesarios 40 millones de empleos en el sector sanitario, y que habr¨¢ que prestar atenci¨®n a que los j¨®venes no se queden fuera. La tecnolog¨ªa y la tendencia a la privatizaci¨®n de la informaci¨®n son otros puntos que las autoridades no pueden perder de vista. "La enfermer¨ªa no es un gasto, sino una inversi¨®n", ha subrayado al destacar que por cada d¨®lar empleado en salud, 77 centavos se traducen en contribuci¨®n al ¨¦xito econ¨®mico del pa¨ªs.
"El gasto en sanidad se convierte en salud, crecimiento econ¨®mico y seguridad econ¨®mica", ha coincidido Rowaida Al-Ma¡¯aitah, profesora de la Facultad de Enfermer¨ªa en la Universidad Jordana de Ciencia y Tecnolog¨ªa y vicepresidenta del Consejo Nacional para la Salud de las Mujeres. "En la era de la globalizaci¨®n, todo atraviesa las fronteras¡ ?Y entonces por qu¨¦ no pueden hacerlo las voces de las enfermeras?".
"No podemos tener personas sanas en un planeta enfermo", ha afirmado Barbara Sattler, docente de la Universidad de San Francisco y fundadora de la Alianza de Enfermeras para Entornos Saludables. La experta ha hablado de las consecuencias del cambio clim¨¢tico sobre la salud, especialmente para las personas m¨¢s vulnerables y los pa¨ªses con menos recursos. El calor extremo y la escasez de agua, por ejemplo, son la causa del fracaso de los cultivos y, por tanto, de hambrunas y malnutrici¨®n. Por otro lado, la prolongaci¨®n de las estaciones h¨²medas lleva a una proliferaci¨®n de los vectores que transmiten enfermedades como el dengue o la malaria. El cambio en los patrones del clima tambi¨¦n se refleja en un incremento de incendios, de patolog¨ªas transmitidas por el agua, de exposici¨®n a al¨¦rgenos, entre otros, causando masivos desplazamientos de la poblaci¨®n.
"El cambio clim¨¢tico puede dar al traste con los avances en los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Las enfermeras no solo tienen que estar preparadas para hacer frente a la situaci¨®n, sino que tienen que fomentar activamente pr¨¢cticas compatibles con el cuidado del planeta", ha afirmado Sattler. El uso de la refrigeraci¨®n solar para las vacunas y la sangre o reducir el consumo de carne en los hospitales son algunas de ellas.
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