Destructivo Trump

La dimisi¨®n del director de Comunicaci¨®n de la Casa Blanca, Mike Dubke, con apenas tres meses en el desempe?o de sus funciones, es un nuevo ejemplo del preocupante nivel de desorganizaci¨®n en la administraci¨®n pol¨ªtica m¨¢s poderosa del planeta. Dubke habr¨ªa presentado su renuncia hace semanas, pero se decidi¨® posponer el anuncio para no entorpecer la gira presidencial por Oriente Pr¨®ximo y Europa, que por otra parte ha tenido unos resultados nefastos en t¨¦rminos de comunicaci¨®n.

Contratado en febrero por Sean Spicer, jefe de prensa y portavoz de la Casa Blanca, Dubke hab¨ªa tratado de poner orden en la ca¨®tica imagen que ofrece casi a diario la presidencia de EE?UU. Una tarea que parece imposible con un presidente que ¡ªseg¨²n ¨¦l mismo ha revelado en varias entrevistas¡ª utiliza por las noches, sin que lo sepa el equipo de comunicaci¨®n, su cuenta personal de Twitter de forma irresponsable y a menudo agresiva.

Donald Trump parece no haber entendido ¡ªes dif¨ªcil que lo entienda ya¡ª que no es un usuario m¨¢s de las redes sociales y que no se puede comportar en ellas como lo que se conoce como un troll, un perfil gamberro que polemiza sobre cualquier tema. Ante este panorama, no ser¨ªa de extra?ar que se confirmaran los vaticinios de la prensa estadounidense, y que el pr¨®ximo en presentar la renuncia fuera el mism¨ªsimo portavoz de la Casa Blanca.

El ¨²ltimo objetivo de Trump en las redes ha sido la canciller alemana, Angela Merkel. Ayer el presidente volvi¨® a echar en cara a Alemania que la balanza comercial con EE?UU sea positiva para Berl¨ªn, como si eso constituyera una afrenta, y finaliz¨® su mensaje con una amenaza propia de taberna de poco fuste y, en cualquier caso, totalmente inaceptable en la pol¨ªtica internacional y las relaciones entre aliados: ¡°Esto va a cambiar¡±.

Seguramente para Trump, acostumbrado a denigrar y atacar personalmente a sus rivales, resultar¨¢ poco comprensible que haya sido el principal rival de Merkel, el socialdem¨®crata Martin Schulz, el que ayer haya apoyado la postura de la canciller. Schulz ha calificado a Trump como ¡°destructor de todos los valores occidentales¡±, expresi¨®n que a lo mejor al presidente estadounidense ¡ªaficionado al lenguaje brusco¡ª no le parece muy fuerte, pero que es un duro diagn¨®stico de lo que est¨¢ haciendo el inquilino de la Casa Blanca.

Esos valores occidentales son sin duda tambi¨¦n estadounidenses. Resulta urgente que los legisladores de Washington tomen conciencia de que ambas orillas del Atl¨¢ntico pagar¨¢n un alto e indeseable precio si este presidente err¨¢tico e incapaz de dominar sus impulsos sigue arremetiendo contra unos lazos que tanto ha costado tejer. Ellos tienen los mecanismos legales para que esto no suceda.