Le Mans merece m¨¢s de 24 horas

Un c¨¢mping con caravanas retro, a orillas del r¨ªo Sarthe, en plena naturaleza y a unos pocos kil¨®metros de Le Mans (Francia). Un sitio bastante alucinante, como un viaje a los sesenta o setenta. ?C¨®mo he llegado hasta aqu¨ª? Sencillo: en un intento enloquecido de no perder ni un detalle de Le Mans y alrededores (si se vuela por ejemplo al Charles de Gaulle en Easyjet, desde el mismo aeropuerto se puede tomar un TGV y se llega bastante r¨¢pido), nos estamos dando un atrac¨®n de lugares interesantes que hacen que por momentos uno pierda el oremus.

Por no olvidar el principio, conviene se?alar que pasear por el casco antiguo de Le Mans es toda una aventura. Las callejuelas medievales de la que se conoce como ciudad plantagenet han servido de decorado a pel¨ªculas como Cyrano de Bergerac, con D¨¦pardieu como protagonista.

Esta ciudad del noroeste de Francia, de unos 144.000 habitantes, tambi¨¦n es escenario de las 24 Horas de Le Mans, que se disputan el 17 y 18 de junio en un circuito m¨ªtico, creadas en 1923 para demostrar que los coches pod¨ªan correr de noche. Todo esto lo explican divinamente en un museo inmenso repleto de modelos inolvidables que han participado en la carrera.

Pero como no estamos aqu¨ª para competir, una de las mejores opciones para conocer esta regi¨®n situada en el valle del r¨ªo Loir (no confundir con el Loira) es alquilar una bicicleta y tomar una de los m¨²ltiples sendas cicloturistas que recorren la zona. As¨ª podemos llegar hasta el castillo renacentista del Lude, que est¨¢ habitado por unos marqueses con los que no es descabellado toparse durante la visita.

Y, cuando dejamos la bici, nos espera un viaje en barcaza. Se pueden alquilar a orillas de los r¨ªos Sarthe y Mayenne, que dividen la regi¨®n, y supone sin duda una forma m¨¢s relajada de descubrir todo esto. No esperen quedarse quietos, eso por aqu¨ª resulta imposible.