Ser de izquierdas

Si en la Espa?a del bipartidismo un congreso del PSOE hubiera decidido dar un giro hacia la izquierda, nadie habr¨ªa tenido nada que objetar. El voto del hartazgo hacia el PP probablemente se hubiera trasladado hacia el PSOE en todo caso. Ya ocurri¨® otras veces. Esta l¨®gica binaria ha funcionado bien en Reino Unido y, en principio, no hay raz¨®n aparente para que aqu¨ª no lo hiciera. Aunque, no nos olvidemos, Corbyn no gan¨® contra la peor candidata de la reciente historia brit¨¢nica y su ret¨®rica de vieja socialdemocracia cobra m¨¢s sentido en un pa¨ªs que aspira a volver al estatismo.

El problema es que aqu¨ª, como en Francia, que es tambi¨¦n otro espejo en el que mirarse, el votante de izquierdas tiene ya donde elegir, el bipartidismo est¨¢ enterrado. Apartado Errej¨®n e incorporada IU, Podemos y sus confluencias son ya de hecho partidos de izquierdas, porque as¨ª es como son percibidos, que es lo importante. Con el a?adido de que no tienen historia, salvo la breve gesti¨®n local, y no arrastran una mochila ¡°sist¨¦mica¡±. O sea, son una izquierda cre¨ªble porque es presunta, no ha sido refutada por los hechos. Otra cosa es que ya no les funcione bien el ¡°n¨²cleo irradiador¡±.

Para que el PSOE emprenda ahora un viraje eficaz en esa direcci¨®n y encuentre un hueco en ese espacio, me temo que va a tener que ¡°sobreactuar¡±. Y la contrariedad asociada a las sobreactuaciones ideol¨®gicas es que las cuestiones de principio no dejan ver el bosque; es decir, empecen posicionamientos pol¨ªticos m¨¢s pragm¨¢ticos en l¨ªnea con las condiciones en las que se desenvuelve la gobernanza actual. Un ejemplo reciente es su posicionamiento ante el CETA, que recuerda a eso de la OTAN ¡°de entrada no¡±. Luego fue que s¨ª, como sabemos, porque ya no estamos en un orden westfaliano. Y seguramente tambi¨¦n ocurrir¨¢ con el CETA, porque objetivamente alinear¨ªa al PSOE con la idea de globalizaci¨®n de Trump frente a la de Trudeau o con la Linke alemana frente al SPD.

No se pide a un pol¨ªtico que reitere que est¨¢ en contra de las desigualdades sino que consiga aminorarlas, que act¨²e

Tengo para m¨ª que ser de izquierdas significa estar siempre a favor de la rectificaci¨®n de las injusticias, como dice S. Lukes; no darse por satisfecho, en definitiva, con el mundo tal y como es. Es un principio regulativo, no se traduce en un dec¨¢logo de actuaciones ¡°a pesar de los hechos¡±. Dada la naturaleza de la pol¨ªtica, debe moverse en el situacionismo y la contingencia, no en el ¡°estos son mis principios¡± de los intelectuales que ofician como ¡°sacerdotes impecables¡± (R. del ?guila). Eso es lo f¨¢cil, como lo es proclamar que se est¨¢ contra las desigualdades. Lo que se le pide a un pol¨ªtico no es que nos lo reitere hasta la saciedad, sino que consiga aminorarlas, que act¨²e. Y para ello es imprescindible ganar las elecciones. O sea, orientarse hacia donde est¨¢n los votos.