Mamadou Saliou y el proyecto de su vida
El guineano, criado en Senegal, no lleg¨® a ser futbolista en Europa, pero cumpli¨® un sue?o cuando cre¨® Diand¨¦ Africa, una ONG que combate el abandono escolar en Senegal
Mamadou Saliou ten¨ªa 16 a?os cuando cumpli¨® uno de sus sue?os. Quer¨ªa ser futbolista y tener una oportunidad en Europa, pero nunca se imagin¨® lo dura que iba a ser su vida en Barcelona. El joven naci¨® en Guinea Conakri. A los cinco a?os se traslad¨® con su familia al sur de Senegal, al barrio de Lyndiane, en la regi¨®n de Ziguinchor. Su familia y amigos cre¨ªan que podr¨ªa triunfar en el mundo del f¨²tbol y le ayudaron a subirse a un barco pesquero con destino a Espa?a.
¡°Pensaba en Europa como un para¨ªso donde iba a ganar 1.500 euros al mes. Eso es lo que escuchaba en mi pa¨ªs¡±, confiesa Saliou. Pero la realidad sustituy¨® al sue?o cuando se fue a vivir a un centro de menores. ¡°No ten¨ªa la autonom¨ªa de la que gozaba desde los 12 a?os. Pas¨¦ de ser un ni?o adulto a un adulto ni?o¡±.
Durante su estancia en Barcelona, el joven pas¨® por varias entidades sociales como Casal dels Infants, Punt de Refer¨¨ncia o Fundaci¨®n Exit, donde continu¨® su formaci¨®n hasta cumplir la mayor¨ªa de edad. La b¨²squeda de trabajo para legalizar su situaci¨®n se alarg¨® durante tres a?os m¨¢s, ya que necesitaba un contrato de doce meses como m¨ªnimo para conseguir los papeles.
El joven comenz¨® a trabajar y en 2012, durante su mes de vacaciones, viaj¨® a Senegal. En aquella ¨¦poca ya ten¨ªa rodado un corto que se proyect¨® en colegios y universidades de su regi¨®n. Bajo el t¨ªtulo Si yo sabr¨ªa, no vendr¨ªa, Saliou mostr¨® algunas de las realidades de los migrantes en Barcelona. ¡°La mayor¨ªa viven en casas ocupas, en condiciones muy complicadas. No pretendo desanimar a nadie, solo mostrarles que podr¨ªan vivir mejor en su pa¨ªs¡±.
Tras la buena experiencia de las charlas, Saliou pens¨® que ser¨ªa una buena idea fundar una organizaci¨®n en su pa¨ªs que hiciera un trabajo similar al de las entidades sociales de Barcelona. Y de ah¨ª naci¨® Diand¨¦ Africa, un proyecto de escolarizaci¨®n en Senegal ¨Cdiand¨¦ en fula, lengua materna de Saliou, significa educaci¨®n.
El joven se anim¨® a crear un proyecto de clases de refuerzo en su propio barrio y, en el curso 2013-2014, consigui¨® recaudar 3.500 euros. ¡°En Senegal, el periodo escolar se reduce a cuatro meses, los otros cinco est¨¢n de huelgas, ya sea de alumnos, profesores o de la administraci¨®n p¨²blica¡±.
Durante los primeros cuatro meses, Diand¨¦ Africa escolariz¨® a diez ni?os y ni?as. En 2017, la organizaci¨®n ha conseguido su objetivo de apoyar a treinta estudiantes. ¡°Les ofrecemos un poco de todo, desde pagarles el material escolar y uniformes, hasta poner a su disposici¨®n profesionales para clases de refuerzo¡±, afirma Saliou.
Los criterios para escoger a los beneficiados se basaron inicialmente en las condiciones de necesidad de las familias, por las que los hijos no pod¨ªan ir a la escuela. Sin embargo, con el tiempo, vieron que era muy dif¨ªcil conseguir resultados en esos ni?os. ¡°Tienen que ir al campo, trabajar en las tareas del hogar y no les queda mucho tiempo para poder estudiar¡±, destaca el promotor de la ONG.
De los diez que empezaron, contin¨²an ocho y, aunque siguen manteniendo a estos mismos ni?os, este a?o han cambiado los criterios y se centran en aquellos menores cuyas familias no tienen recursos suficientes, pero cuyos hijos van al colegio y necesitan apoyo. ¡°Buscamos a ni?os que con nuestra ayuda no van a abandonar la escuela¡±.
Saliou? rod¨® un corto que se proyect¨® en colegios y universidades de su regi¨®n en Senegal. En ¨¦l, mostraba algunas de las realidades de los migrantes en Barcelona
Las personas que trabajan en Diand¨¦ Africa desde Espa?a son voluntarias. En Senegal son cuatro profesores cobrando, entre los que se encuentra la persona que coordina el proyecto desde Ziguinchor. Tambi¨¦n en Senegal, la asociaci¨®n contrata a estudiantes en pr¨¢cticas que necesitan ayuda para seguir con su formaci¨®n universitaria.
La financiaci¨®n se obtiene a trav¨¦s de las actividades que la ONG organiza para recaudar fondos, de los amigos que conocen el proyecto y la treintena de socios y socias que cubren los gastos de los educadores.
Paralelamente a la escolarizaci¨®n de los menores, Saliou ha fundado una cooperativa de confituras en Lyndiane junto a Georgina Reg¨¤s, fundadora del Museo de la Confitura en Torrent (Catalu?a). Ambos se conocieron en el evento TED de j¨®venes con talento de 2015 en Barcelona e impulsaron esta cooperativa de mujeres en la que se pretende que las madres de los menores puedan cubrir los gastos de la escolarizaci¨®n de sus hijos.
En la actualidad, son tres madres las que elaboran confituras, chutney y jalea de hibisco, aunque Saliou espera que sean siete m¨¢s las que puedan incorporarse al programa de la Coop¨¦rative des Mamans de Ziguinchor. ¡°El proyecto debe seguir adelante, a pesar de la falta de presupuesto. Admiro el esfuerzo de Georgina, que con 84 a?os ha viajado a Senegal para formar a las madres¡±, matiza Saliou.
La Barcelona de Mamadou
Otra de las actividades con las que la ONG obtiene fondos es la ruta en bici que Saliou organiza dentro de su empresa de alquiler de bicicletas en el centro de Barcelona, la cual es ¡°totalmente independiente de la ONG¡±.
La Barcelona de Mamadou es un recorrido en bicicleta por el barrio del Raval, donde se encuentran algunas de las entidades sociales que ayudaron al joven a salir adelante cuando lleg¨® a Espa?a. Durante dos horas, la ruta visita el Casal dels Infants, entidad de apoyo a ni?os y j¨®venes con dificultades, El Chiringuito de Dios, donde se reparten comidas diarias, El Espacio del Inmigrante, que naci¨® en 2013 como respuesta vecinal a la exclusi¨®n de la sanidad p¨²blica para los inmigrantes sin papeles, Punt de Refer¨¨ncia, asociaci¨®n que ofrece soporte a j¨®venes ex tutelados, y el parque Sant Pau, punto de reuni¨®n de aquellas personas que trabajan recogiendo hierro por las calles de la ciudad.
¡°De esta manera, el p¨²blico obtiene otra imagen del barrio y aprende a mirar una realidad muy distinta a la suya¡±, destaca Saliou. La actividad, que se vende tanto a empresas, como a estudiantes y grupos de amigos, tambi¨¦n forma a j¨®venes de las organizaciones visitadas como gu¨ªas o acompa?antes de la ruta.
Y, aunque el sue?o del joven de ser futbolista no se cumpli¨® ¨C¡°pas¨¦ de jugar en segunda nacional a estar ahora en una liga de amigos¡±¨C, consigui¨® crear un proyecto en su regi¨®n para combatir el abandono escolar y cambiar el imaginario de algunos j¨®venes senegaleses hacia Europa, aunque ¡°esta es una tarea de los medios de comunicaci¨®n¡±.
La historia y el trabajo de Mamadou Saliou han sido reconocidos a trav¨¦s de uno de los VII Premios J¨®venes Emprendedores Sociales de la Universidad Europea y a la invitaci¨®n al evento TEDxYouth Barcelona. Su vida y testimonio sirven como punto de reflexi¨®n de una realidad desde el otro punto de vista.
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