Los siete planetas m¨¢s extremos descubiertos hasta la fecha
Estrellas que arden a 10.000?C y gigantes de miles de millones de a?os de antig¨¹edad son algunos de los objetos celestes m¨¢s excesivos que conocemos
Los cient¨ªficos han descubierto hace poco el planeta m¨¢s c¨¢lido jam¨¢s hallado, cuya temperatura en superficie es m¨¢s alta que la de algunas estrellas. A medida que avanza la b¨²squeda de planetas fuera de nuestro sistema solar, estamos descubriendo muchos otros mundos con caracter¨ªsticas extremas. Por su parte, la exploraci¨®n que estamos llevando a cabo en nuestro propio sistema tambi¨¦n ha dado a conocer algunos candidatos bastante curiosos. He aqu¨ª siete entre los m¨¢s excesivos.
El m¨¢s c¨¢lido
El calor que hace en un planeta depende en primera instancia de lo cerca que est¨¦ de su estrella anfitriona y de a qu¨¦ temperatura arda esta. En nuestro sistema solar, Mercurio es el planeta m¨¢s cercano al Sol, del que dista 57.910.000 kil¨®metros de media. Las temperaturas en su cara iluminada alcanzan unos 430?C, mientras que el Sol tiene una temperatura en superficie de 5.500?C.
Pero las estrechas m¨¢s masivas que el Sol arden a temperaturas m¨¢s altas. La estrella HD 195689 ¨Ctambi¨¦n conocida como KELT-9¨C, es 2,5 veces m¨¢s masiva que el primero y tiene una temperatura en superficie de casi 10.000?C. Su planeta KELT-9b est¨¢ mucho m¨¢s cerca de su estrella anfitriona que Mercurio del Sol.
Aunque desde lejos no podemos medir la distancia con exactitud, el planeta da una vuelta alrededor de su estrella cada 1,5 d¨ªas (la ¨®rbita de Mercurio dura 88 d¨ªas). El resultado es la colosal temperatura de 4.300?C, superior a la de muchas estrellas con menos masa que nuestro sol, y a la que el rocoso Mercurio ser¨ªa una gotita de lava. Pero KELT-9b es un gigante de gas del mismo tipo que J¨²piter, que va encogiendo y disip¨¢ndose a medida que las mol¨¦culas de su atm¨®sfera se descomponen en los ¨¢tomos que las constituyen y se queman.
El m¨¢s fr¨ªo
A una temperatura de tan solo 50 grados sobre el cero absoluto ¨C223 ?C¨C, OGLE-2005-BLG-390Lb se ha hecho con el t¨ªtulo de planeta m¨¢s fr¨ªo. Con una masa aproximadamente 5,5 veces la de la Tierra, es probable que tambi¨¦n sea un planeta rocoso. Aunque no demasiado alejado de su estrella anfitriona, a una ¨®rbita que lo situar¨ªa en alg¨²n punto entre Marte y J¨²piter en nuestro sistema solar, la suya es una estrella fr¨ªa y con poca masa conocida como enana roja.
Popularmente recibe el nombre de Hoth, en referencia a un planeta helado de la serie La guerra de las galaxias. Sin embargo, al contrario que su hom¨®logo de ficci¨®n, en ¨¦l la atm¨®sfera ¨Cy, si vamos al caso, la vida¨C, dif¨ªcilmente resistir¨ªa mucho tiempo. La raz¨®n es que los gases se solidificar¨ªan por el fr¨ªo e ir¨ªan a a?adirse a la nieve de su superficie.
El m¨¢s grande
Si un planeta puede ser tan c¨¢lido como una estrella, ?en qu¨¦ consiste la diferencia entre unos y otras? Las estrellas son mucho m¨¢s masivas que los planetas. Tanto que, a consecuencia de las inmensas fuerzas gravitacionales de sus n¨²cleos, se inflaman debido a los procesos de fusi¨®n. Las estrellas corrientes, como nuestro sol, arden por la fusi¨®n del hidr¨®geno y su conversi¨®n en helio, pero existe un tipo de estrellas llamadas enanas marrones que son los bastante grandes para empezar algunos procesos de fusi¨®n, pero no lo suficiente para mantenerlos. El planeta DENIS-P J082303.1-491201 b¨Ccuyo igualmente impronunciable sobrenombre es 2MASS J08230313-4912012 b¨C tiene 28,5 veces la masa de J¨²piter, lo que lo sit¨²a como el planeta m¨¢s masivo registrado en el archivo de exoplanetas de la NASA. Su densidad es tal que se discute si sigue siendo un planeta (ser¨ªa un gigante gaseoso del tipo de J¨²piter), o si, en realidad, se deber¨ªa clasificar como una enana marr¨®n. Se ha comprobado que, ir¨®nicamente, su estrella anfitriona s¨ª que lo es.
El m¨¢s peque?o
Apenas algo mayor que nuestra luna y m¨¢s peque?o que Mercurio, Kepler-37b es el exoplaneta de menor tama?o descubierto hasta la fecha. Constituye un mundo rocoso m¨¢s pr¨®ximo a su estrella anfitriona que Mercurio al Sol. Esto significa que en el planeta hace demasiado calor para que exista agua l¨ªquida, y por consiguiente, vida en su superficie.
El m¨¢s viejo
Con sus 12.700 millones de a?os, PSR B1620-26 b es el planeta m¨¢s viejo conocido. Por lo que parece, este gigante gaseoso con una masa 2,5 veces superior a la de J¨²piter, ha existido siempre. Nuestro universo tiene 13.800 millones de a?os, as¨ª que es solo 1.000 millones de a?os m¨¢s antiguo.
PSR B1620-26 b tiene dos estrellas anfitrionas que giran una alrededor de la otra, y su presencia excede la existencia de ambas. Se trata de una estrella de neutrones y de una enana blanca, que son lo que queda de una estrella que ha quemado todo su combustible y ha estallado como una supernova. Sin embargo, dado que el planeta se form¨® en un momento tan temprano de la historia del universo, probablemente no contenga suficientes elementos pesados, como el carbono o el ox¨ªgeno (que se formaron m¨¢s tarde), necesarios para el desarrollo de la vida.
El m¨¢s joven
El sistema planetario V830 Tauri0 solo tiene dos millones de a?os. Su estrella anfitriona tiene la misma masa que nuestro sol, pero el doble de radio, lo que significa que a¨²n no ha acabado de contraerse hasta adquirir su forma definitiva. Del mismo modo, es probable que el planeta ¨Cun gigante gaseoso con tres cuartas partes de la masa de J¨²piter¨C todav¨ªa est¨¦ creciendo. Esto quiere decir que est¨¢ adquiriendo m¨¢s masa al colisionar a menudo con otros cuerpos planetarios, como los asteroides que se cruzan en su camino, lo cual lo convierte en un lugar poco seguro para vivir.
Donde hace peor tiempo
Como los exoplanetas est¨¢n demasiado lejos de nosotros como para que podamos observar alguna pauta meteorol¨®gica, tenemos que volver la mirada a nuestro sistema solar. Si ha visto los gigantescos huracanes en espiral fotografiados por la nave espacial Juno mientras sobrevuelan los polos de J¨²piter, no cabe duda de que el mayor planeta de nuestro sistema es un buen candidato. Sin embargo, el t¨ªtulo le corresponde a Venus, un planeta del mismo tama?o que la Tierra rodeado de nubes de ¨¢cido sulf¨²rico.
La atm¨®sfera de Venus se mueve alrededor del planeta a una velocidad muy superior a la del giro de este, con vientos que alcanzan velocidades huracanadas de 360 kil¨®metros por hora. Los ciclones de doble ojo son constantes sobre ambos polos. La densidad de esta atm¨®sfera es casi 100 veces mayor que la de la Tierra y est¨¢ compuesta por m¨¢s de un 95% de di¨®xido de carbono. El efecto invernadero resultante produce temperaturas infernales de al menos 462 ?C en la superficie, que es efectivamente m¨¢s c¨¢lida que la de Mercurio. Aunque ¨¢rido en extremo y hostil para la vida, el calor podr¨ªa explicar por qu¨¦ Venus tiene menos volcanes que la Tierra.
Christian Schroeder es profesor de Ciencias Ambientales y Exploraci¨®n Planetaria de la Universidad de Stirling.
Cl¨¢usula de divulgaci¨®n:
Christian Schroeder no trabaja para ninguna empresa u organizaci¨®n que pueda beneficiarse de este art¨ªculo, no las asesora, no posee acciones en ellas ni recibe financiaci¨®n. Tampoco declara otras vinculaciones relevantes aparte del cargo acad¨¦mico mencionado.
Este art¨ªculo fue publicado originalmente en ingl¨¦s en la web The Conversation.
Traducci¨®n de News Clips.
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