?Una campa?a ¡®manos limpias¡¯ en versi¨®n tunecina?

En su investidura hace un a?o, el primer ministro de T¨²nez, Youssef Chahed, prometi¨® hacer de la lucha contra la corrupci¨®n una de sus grandes prioridades. Pese a la ca¨ªda de la dictadura clept¨®crata de Ben Al¨ª en 2011, la naciente democracia tunecina no ha sido capaz de poner fin a las corruptelas del sistema; m¨¢s bien, seg¨²n la ONG IWatch, se han ¡°democratizado y extendido¡±.

Tras meses de inacci¨®n, la justicia empez¨® a actuar con contundencia a fines de mayo: arresto de una decena de hombres de negocios ligados al contrabando y congelaci¨®n de sus activos y apertura de una investigaci¨®n a m¨¢s de una veintena de agentes de aduanas.

A pesar de que la prensa ha aplaudido de forma un¨¢nime la campa?a de detenciones, que algunos medios han bautizado como manos limpias inspir¨¢ndose en la vasta operaci¨®n anticorrupci¨®n en la Italia de los a?os noventa, algunos observadores y opositores recelan de las intenciones del Gobierno. El hecho de que el partido del primer ministro, Nid¨¢ Tunis, acoja a numerosos hombres de negocios de dudosa reputaci¨®n y de que los arrestos sucedieran al d¨ªa siguiente del estallido de una protesta social en el sur del pa¨ªs despierta suspicacias. ?Se trata de una cortina de humo para tapar algunas deficiencias gubernamentales o del inicio de un verdadero esfuerzo anticorrupci¨®n?

Hay razones para ambas interpretaciones. El Gobierno multiplic¨® los recursos de la Instancia Nacional de la Lucha contra la Corrupci¨®n, que hasta 2016 eran rid¨ªculos. Sus investigadores han pasado de solo dos a una treintena, y su presupuesto de 300.000 dinares a cerca de dos millones. Ahora bien, la cruzada anticorrupci¨®n no ha tocado a ning¨²n sospechoso de fraude en las contrataciones p¨²blicas, un ¨¢mbito m¨¢s cercano a la pol¨ªtica que el contrabando, y por lo tanto, m¨¢s sensible. Tampoco ha presentado el Gobierno ning¨²n proyecto sobre c¨®mo integrar la econom¨ªa paralela, que podr¨ªa representar hasta un 45% del PIB, en el sector formal. Esta ser¨¢ la piedra de toque para evaluar la autenticidad de las proclamas de Chahed.