La boda de Messi y Antonela Roccuzzo re¨²ne a casi todo el Barcelona

Lleg¨® el d¨ªa m¨¢s esperado para la familia Messi. Lionel y Antonela dan el s¨ª en un mega evento cerrado al p¨²blico y con estrictas restricciones a la prensa. El hermetismo impuesto por la pareja y respetado a rajatabla por los organizadores y el grupo de amigos ¨ªntimos dio sus frutos. En la v¨ªspera, las calles de la ciudad mantuvieron el ritmo acostumbrado y, por la noche, el VIP Bar, reducto ubicado a metros del colosal monumento a la bandera argentina y del que Messi es uno de los due?os, tuvo la mayor¨ªa de sus mesas vac¨ªas. Esta vez no hubo curiosos ni regalos espont¨¢neos para el capit¨¢n de la selecci¨®n, como suele suceder. El ¨²nico sitio alborotado fue Villa Gobernador G¨¢lvez, en las afueras de la ciudad, pero el motivo fue la presencia de otro hijo dilecto, Ezequiel Lavezzi, uno de los invitados de honor y el primero en llegar, desde China. El hermano del pocho es el presidente del club Coronel Aguirre, lugar donde se realiz¨® un evento del que particip¨® el jugador.

Acostumbrados a las visitas del crack y a verlo moverse con libertad por la ciudad, los rosarinos aceptaron el tono reservado del acontecimiento, aunque no pudieron evitar emocionarse con la lista de invitados, muchos de ellos, figuras que nunca imaginaron ver. Y que, en apariencia, no ver¨¢n. La m¨¢s nombrada, la cantante colombiana Shakira. As¨ª, el desfile de estrellas s¨®lo se produjo en el aeropuerto de Fisherton, lugar donde aterrizaron los vuelos privados de Luis Su¨¢rez, Neymar Jr., Sergio Busquets, Samuel Umtiti, Jordi Alba, Gerard Piqu¨¦, Xavi Hern¨¢ndez, Fabregas, Samuel Eto¡¯o, Sergio Ag¨¹ero y Carles Puyol, todos con sus respectivas familias. De all¨ª partieron y se instalaron desde temprano en el hotel y casino City Center, lugar donde se hace el evento, ubicado en el borde de Rosario, y que es investigado por lavado de dinero. El gran ausente es Ronaldinho, ¨ªntimo amigo y padrino del 10 desde desde sus comienzos en el FC Barcelona. El exjugador brasile?o participa este viernes de un partido a beneficio entre exestrellas del equipo cul¨¦ y del Manchester United en el Nou Camp.

El barrio donde naci¨® el novio tambi¨¦n permaneci¨® tranquilo. La cuadra de los Messi tiene apenas cuatro focos mortecinos que por la noche alumbran a tres autos que superan la d¨¦cada de antig¨¹edad. La calle en la que todav¨ªa viven sus padres, Lavalleja, termina unos metros m¨¢s adelante de la vivienda de dos pisos con frente despintado en la que Lionel vivi¨® de chico. A la vuelta, un altar del Gauchito Gil congrega a dos noct¨¢mbulos que cerveza de por medio, matan la noche conversando. El pu?ado de manzanas est¨¢ cercado por la avenida Uriburu, que cruza el sur de Rosario de Este a Oeste y un enorme terreno perteneciente al Batall¨®n de Comunicaciones 121, donde en la ¨²ltima dictadura funcion¨® un centro clandestino de detenci¨®n y, a?os m¨¢s tarde, sirvi¨® de potrero cada vez que el peque?o Lio se anim¨® a jugar con los m¨¢s grandes. El barrio recibe numerosos nombres: Hertz y La Bajada, Tiro Suizo y General Las Heras. Pero los vecinos del crack prefieren llamarlo ¡°el barrio de Messi¡±.

¡°Lo conozco de chiquito y tengo los mejores recuerdos de ¨¦l¡±, se apura en definir Alejandra Ferreyra, visiblemente emocionada. La mujer es apenas una d¨¦cada mayor que Lionel y todav¨ªa recuerda como retumbaba el frente de su casa cada vez que Messi met¨ªa un gol en su arco imaginario. ¡°Le gustaba jugar en la calle o enfrente, donde hab¨ªa un bald¨ªo y ahora est¨¢ el garage de la familia, desde que lo compraron, incluso mi mam¨¢ ha devuelto varias pelotas. Si no hubi¨¦semos pintado el frente tendr¨ªamos las manchas m¨¢s famosas del mundo¡±, evoca la mujer que, para apa?arse de la crisis, convirti¨® el garaje de la vivienda en un centro de est¨¦tica. ¡°El era el m¨¢s chico de la barra; los dem¨¢s pibes se dispersaban con otras cosas pero ¨¦l ten¨ªa la idea fija con el f¨²tbol. Siempre estaba atr¨¢s de la pelota, que era m¨¢s grande que ¨¦l, al punto que no pod¨ªamos entender como la segu¨ªa para todos lados, parec¨ªa que la tenia pegada al pie. Por eso le pusimos un apodo cari?oso: l¨ªobol¡±, completa Alejandra.

¡°Lionel es un pibe com¨²n y a m¨ª me cuesta creer que es el mejor del mundo, porque yo lo sigo viendo como el nene que conoc¨ª; para nosotros es un chico normal y no vemos la estrella que es, imaginate que ya era campe¨®n Sub 20 con la selecci¨®n y ven¨ªa a andar en bicicleta con los pibes del barrio¡±, dice Silvana Calcagno, otra vecina, que vive justo enfrente de la casa de los Messi y habla casi todos los d¨ªas con mam¨¢ Celia, ¡°un pilar con perfil bajo que mantiene unida a la familia¡±. ¡°Los m¨¢s peque?os lo tienen como un faro, su ¨ªdolo, y se vuelven locos. Todos tienen su camiseta de la selecci¨®n y hay un chiquito de 5 a?os que anda por el barrio diciendo que la mam¨¢ de Messi lo conoce a ¨¦l desde que naci¨®¡±, afirma la mujer.

Los muros del barrio descansan un poco de la agobiante rivalidad entre Rosario Central y Newell¡¯s, los clubes de la ciudad, y dejan espacio para el hijo pr¨®digo. As¨ª, los retratos de Messi se multiplican por toda la zona sur. ¡°Lionel, tu barrio te espera ?Campe¨®n!¡±, dice uno de ellos, ubicado en una vieja estaci¨®n de servicio abandonada. Sin embargo, esta vez, el astro no pas¨® por all¨ª. ¡°No estar¨ªa mal que saliera de la casa y pudi¨¦ramos verlo, como hacemos con todos los vecinos cuando cumplen a?os¡±, se esperanza Alejandra. ¡°A m¨ª me parece muy bien que haga una fiesta ¨ªntima, con los mas cercanos y la gente que quiere¡±, la cruza Silvana, ¡°Como en todo barrio tenemos nuestro grupo de WhatsApp que es entre las mujeres, pero no para prevenir asaltos sino para organizar fiestas. Nos hubiese gustado organizarle la despedida a Antonella, con baile y karaoke. Ella lo hubiese disfrutado¡±, bromean las vecinas. La novia, en cambio, pas¨® su ¨²ltima noche de soltera junto a Sof¨ªa Balbi y Daniella Semaan, las parejas de Luis Su¨¢rez y Cesc Fabregas. Lionel, recluido junto a sus amigos de la infancia y los jugadores Lavezzi, ?ngel Di Mar¨ªa, Ag¨¹ero y Ever Banega en una modesta reuni¨®n que se hizo el piso 21 que la familia tiene en el lujoso complejo Punta Norte, cerca del estadio de Rosario Central.

Un celoso operativo de seguridad, con cinco fuerzas y unos 300 efectivos involucrados (m¨¢s polic¨ªas que invitados) har¨¢ el resto para que el casamiento del a?o se desarrolle bajo una reserva impensada, dada la talla de los participantes.