El otro golpe en Turqu¨ªa

Cuando faltan pocos d¨ªas para que se cumpla un a?o del intento de golpe de Estado en Turqu¨ªa la situaci¨®n en el pa¨ªs no es ni mucho menos de afianzamiento de libertades y del r¨¦gimen democr¨¢tico. Todo lo contrario. La multitudinaria marcha que llega hoy a Ankara, encabezada por el opositor Kemal Kili?daroglu, denuncia precisamente la involuci¨®n que est¨¢ sufriendo Turqu¨ªa, impulsada por el presidente Recep Tayyip Erdogan.

Las purgas masivas en la Administraci¨®n y el Ej¨¦rcito, la islamizaci¨®n creciente, el acoso y censura de los medios de comunicaci¨®n, el recurso constante a los decretos ley ignorando completamente al Parlamento, el acaparamiento de poderes en la figura del presidente de la Rep¨²blica, los procesos a presuntos golpistas sin las debidas garant¨ªas, la persecuci¨®n dentro y fuera de Turqu¨ªa de quienes critican al presidente y la muerte civil de quienes son purgados en cualquier nivel de la Administraci¨®n del Estado constituyen de hecho el desmantelamiento de la Turqu¨ªa laica, con aspiraciones a entrar en Europa, que recibi¨® Erdogan cuando lleg¨® al poder como primer ministro en 2014. Desde entonces, todas sus reformas han ido encaminadas no a un acercamiento del pa¨ªs a los est¨¢ndares democr¨¢ticos sino a la consolidaci¨®n de un r¨¦gimen personalista y autocr¨¢tico. En este sentido, se puede hablar sin ambages de que hace un a?o el Estado turco sufri¨® un golpe aunque no triunfaran los alzados.

No puede extra?ar por tanto la contundencia del voto en el Parlamento Europeo que el jueves exigi¨® la suspensi¨®n inmediata de las negociaciones de adhesi¨®n de Turqu¨ªa a la UE. Es obvio que Ankara en este momento no cumple los m¨ªnimos requisitos. Tampoco sorprende que el Consejo de Europa exigiera en sus t¨¦rminos m¨¢s duros la liberaci¨®n de 10 activistas pro derechos humanos ¡ªentre ellos un alem¨¢n y un sueco¡ª acusados de terrorismo. Erdogan debe devolver inmediatamente a Turqu¨ªa a la normalidad democr¨¢tica.