Ponerse en lo peor
En la actualidad, en Espa?a, denunciar la corrupci¨®n supone pr¨¢cticamente un acto de hero¨ªsmo
Espa?a es un pa¨ªs relativamente corrupto en comparaci¨®n con los pa¨ªses de su entorno. Aqu¨ª la corrupci¨®n suele implicar mucho dinero y pocas personas. Y las elecciones, como ocurre en otros pa¨ªses, no siempre sirven para castigarla. Hace m¨¢s de dos siglos que Madison advirti¨® que la dependencia de los votantes no ser¨ªa suficiente para controlar al Gobierno. Por eso propuso establecer mecanismos adicionales de control, como la divisi¨®n de poderes.
?Cu¨¢les ser¨ªan los mecanismos adicionales para frenar la corrupci¨®n, m¨¢s all¨¢ de las elecciones? Uno es prevenir la corrupci¨®n reformando las instituciones que la favorecen. Sobre ello hay mucho escrito y poca iniciativa pol¨ªtica. Se sabe, por ejemplo, que el dise?o del gobierno local en Espa?a concentra el poder y contribuye a fusionar el inter¨¦s de los gestores p¨²blicos con el del partido que gobierna. Y que la heterogeneidad y el reducido tama?o de los municipios impiden la comparaci¨®n y auspician las redes clientelares.
Los expertos insisten asimismo en lo poco costoso que ser¨ªa reforzar el control interno de la Administraci¨®n mediante la protecci¨®n a las personas que informen sobre pr¨¢cticas corruptas. En la actualidad, denunciar supone pr¨¢cticamente un acto de hero¨ªsmo.
Tambi¨¦n puede ampliarse el control externo mejorando el acceso a la informaci¨®n p¨²blica de los ciudadanos. Se trata del derecho a saber. Por ejemplo, conocer qu¨¦ contratos firma la Administraci¨®n y con qui¨¦n, o c¨®mo se toman las decisiones que afectan a derechos individuales. La ley de transparencia est¨¢ muy lejos de conseguir tal objetivo. Las excepciones al derecho de informaci¨®n son excesivamente generales, no hay sanciones en el caso de que no se facilite la informaci¨®n, la Administraci¨®n no est¨¢ obligada a explicar su falta de respuesta y no est¨¢ claro qu¨¦ entidades deben cumplirla.
Las instituciones representativas se construyeron sobre el supuesto de que los pol¨ªticos no eran ¨¢ngeles. Sobre la prevenci¨®n que se deriva del ejercicio de ponerse en lo peor. En Espa?a sobra actualidad para ponernos en el peor escenario, pero falta iniciativa para prevenirlo. @sandraleon_
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