La esperanza est¨¢ en los detalles

Si los desfiles vistos ayer en la Mercedes Benz Fashion Week Madrid fuesen los resultados de una anal¨ªtica y el paciente, el dise?o espa?ol, solo cabr¨ªa un diagn¨®stico posible: estable dentro de la gravedad, pero con un preocupante d¨¦ficit de la hormona del crecimiento.

Ailanto, Ana Locking o Roberto Torretta son firmas tenaces que han sobrevivido a la crisis. Contin¨²an produciendo y vendiendo, actividades que se supone intr¨ªnsecas a una marca de ropa, pero que en la pasarela espa?ola representan un logro extraordinario. Sus proyectos empresariales y -a veces tambi¨¦n creativos- parecen, sin embargo, congelados. Pese a ello, pueden considerarse casos de ¨¦xito dentro de una industria que, en los ¨²ltimos a?os, ha visto fracasar a nombres consagrados. El ¨²ltimo de ellos, Amaya Arzuaga, Premio Nacional de Dise?o de Moda 2013. En la cita madrile?a, vence el que resiste; no necesariamente quien evoluciona. Y este hecho, por si solo, dice mucho del momento que atraviesa el sector.

Aunque no todo. Ayer fue necesario colocar las colecciones bajo la lupa del microscopio para descubrir uno de los aspectos m¨¢s saludables de la moda espa?ola: el ambicioso trabajo de sastrer¨ªa y costura que todav¨ªa exhiben algunas marcas.

La propuesta para la pr¨®xima primavera-verano de Ana Locking se llama Preachers and belivers (predicadores y creyentes). Busca ser, en palabras de la dise?adora, ¡°una reflexi¨®n sobre la relaci¨®n que mantienen los pol¨ªticos contempor¨¢neos y sus votantes. Sobre las promesas que los primeros hacen a los segundos y que pocas veces pueden cumplir¡±. Por si alguien no hab¨ªa entendido la referencia, un busto gigante y agrietado de Donald Trump presid¨ªa la pasarela. Acto reivindicativo o desaf¨ªo gratuito, el debate merece casi atriles y cron¨®metros. De lo que no cabe duda es que esta tesis ha servido de excusa a Locking para dividir su colecci¨®n en dos. Un parte naif y country con vestidos de guipur y trajes pijameros de l¨²rex. Y otra, la de los predicadores, mucho m¨¢s potente. Es en el patronaje de esta ¨²ltima donde la dise?adora vuelca todo su esfuerzo: americanas con falsas solapas, chalecos que se abrazan al cuello como mitras sacerdotales, faldas marcadas por un raya propia de un pantal¨®n de vestir y tops con las cazuelas del sujetador cosidas por fuera. Para las camisas blancas elige un popelin picado que lleva tambi¨¦n a su l¨ªnea masculina. ¡°Tengo debilidad por los tejidos imperfectos¡±, explica. Locking es una de las pocas valientes que todav¨ªa sigue presentando prendas para el hombre en Madrid. La dise?adora espera que el cambio de fechas que planea llevar a cabo la Mercedes Benz Fashion Week Madrid le ayude a llegar a m¨¢s clientes y compradores dentro de este sector: la pr¨®xima edici¨®n de la pasarela se celebrar¨¢ en enero, y la siguiente en julio. En ambas ocasiones, inmediatamente antes de que comiencen las semanas de la moda masculina internacionales.

Afortunadamente, no est¨¢ sola. Garc¨ªa Madrid abri¨® la jornada con un desfile dedicado ¨ªntegramente al hombre, su cliente. ¡°El punto de partida es un recuerdo: cuando nos pon¨ªan guapos los domingos. Por eso hay tantos colores pastel y bermudas¡±, explica el director creativo Manuel Garc¨ªa. Para la pr¨®xima temporada, propone un atractivo juego que ya est¨¢ en la calle: combinar piezas cl¨¢sicas del armario masculino con pantalones y chaquetas de running realizados en pa?o de sastrer¨ªa. Que sus trajes est¨¢n exquisitamente confeccionados resulta incuestionable, pero tambi¨¦n que ha firmado otras colecciones m¨¢s emocionantes en el pasado. Sin que esto reste un ¨¢pice de calidad a su trabajo: especial y comercial, a partes iguales.

Tampoco Ailanto destac¨® por su energ¨ªa sino por su delicadeza. Como siempre, los tejidos de Aitor e I?aki Mu?¨®z merecen un primer plano. Esta temporada, toman como referente la obra de la pintora estadounidense Jessie Arms Botke -reconocida por sus estudios sobre las aves ex¨®ticas- para enhebrar una colecci¨®n donde sus tradicionales cortes geom¨¦tricos dieron paso a siluetas m¨¢s org¨¢nicas, y sus abrigos de entretiempo -se?a de identidad de la marca- a caftanes y batas fluidas. De entre todos los estampados que componen su propuesta destaca uno elaborado a partir de un collage en el que los Mu?oz utilizaron 15 tipos distintos de telas: lentejuelas, plumetti, jacquard. El metatejido, en definitiva. Toda la paleta de colores de la colecci¨®n est¨¢ extra¨ªda del universo de las aves: del azul pavo real al verde loro. Completan su propuesta las delicadas peinetas realizadas en semilla de fresno del artesano sevillano Luis Ben¨ªtez y los colgantes con forma de abanico te?idos a mano de Mariana Barturen.

Antes de su desfile, los dise?adores de Malne, Juanjo M¨¢nez y Paloma ?lvarez, presum¨ªan de haber vendido ya una pieza de su ¨²ltima colecci¨®n, reivindicaci¨®n de la pedrer¨ªa y los palabra de honor. La actriz Lindsay Lohan, que ha sido invitada a la pasarela por la organizaci¨®n de la semana de la moda, visit¨® su backstage y reserv¨® una chaqueta azul marino rematada en plumas y de afiladas hombreras, seg¨²n aseguran.