Ana de Armas: "Antes de 'Blade Runner' no me sal¨ªa nada, por el acento"

De Cuba a Hollywood pasando por Madrid. En 29 a?os. A estas alturas de su pel¨ªcula personal, Ana de Armas podr¨ªa decir aquello de: "Yo he visto cosas que vosotros no creer¨ªais". Naci¨® en Cuba, en 1988. Una infancia y adolescencia en la isla caribe?a supuso crecer sin m¨®viles, sin Internet, sin canales de televisi¨®n, sin tener plena conciencia de qu¨¦ era Hollywood. "Como ni?a en Cuba, el mundo no existe para ti, no tienes ni idea de lo que pasa fuera. Es muy dif¨ªcil so?ar, porque supuestamente estamos bien con lo que tenemos", dice en respuesta a si alguna vez se imagin¨® compartiendo cartel con una estrella como Ryan Gosling en una superproducci¨®n como la secuela del cl¨¢sico entre cl¨¢sicos de la ciencia ficci¨®n, Blade runner.

No so?aba con ser estrella del cine mundial, pero s¨ª sab¨ªa que quer¨ªa actuar. Y tras cuatro a?os en la escuela de interpretaci¨®n en Cuba, en cuanto cumpli¨® los 18, sac¨® su pasaporte espa?ol, su tesoro heredado de unos abuelos nacidos en Valverde (L¨¦on) y Guardo (Palencia), y se compr¨® un billete a Madrid con los 200 euros que le quedaban de sus tres primeras pel¨ªculas. A las pocas semanas de llegar a Espa?a, Luis San Narciso, el rey del casting espa?ol, la llam¨®. La hab¨ªa visto en Una rosa de Francia, de Manuel Guti¨¦rrez Arag¨®n, y quer¨ªa hacerle una prueba para una nueva producci¨®n televisiva que promet¨ªa. Y tanto. La serie fue El internado, aquel colegio misterioso del que sali¨® una generaci¨®n de actores triunfitos: Blanca Su¨¢rez, Marti?o Rivas, Yon Gonz¨¢lez y, s¨ª, Ana de Armas.

Pas¨® tres a?os corriendo por aquellos pasillos de internado encantado, mientras en la calle la reconoc¨ªan como una estrella. Ana de Armas entend¨ªa ya qu¨¦ significaba ser famosa, pero no entend¨ªa por qu¨¦, si lo era, no recib¨ªa ofertas para m¨¢s proyectos. Tras El internado vino su primer ¨¦xito en cine con la hormonada Mentiras y gordas, y particip¨® en otra serie, Hispania; Antonio Trashorras confi¨® en ella para El callej¨®n y Anabel; y rod¨® Por un pu?ado de besos. Pero no avanzaba, se sent¨ªa estancada, encasillada en el tipo de papeles con los que hab¨ªa empezado.

Una nueva vida le espera en las colonias espaciales. Podr¨ªa volver a empezar en una tierra dorada llena de oportunidades y aventuras. Y la llamada lleg¨®. Era el cineasta venezolano Jonathan Jakubowicz, desde Los ?ngeles, buscaba a una actriz para interpretar a la mujer del boxeador paname?o Roberto Dur¨¢n. Ya ten¨ªa el resto del reparto: Edgar Ram¨ªrez, Robert De Niro, John Turturro, Ellen Barkin¡­ Ana se fue para all¨¢, Jakubowicz le dio el papel y cuando acab¨® el rodaje decidi¨® que se mudaba a EE UU. As¨ª. De nuevo estaba cruzando el charco.

"Lo hice porque mis agentes all¨ª me dijeron que era un buen momento, que era importante estar aqu¨ª, presente", cuenta en una parada breve en Los ?ngeles antes de volver a Londres y seguir rodando Three seconds, con el actor Joel Kinnaman. "Lo decid¨ª y, dos d¨ªas despu¨¦s, vend¨ª mis muebles y cog¨ª un avi¨®n".

?C¨®mo fue llegar a Los ?ngeles y ser alguien an¨®nimo de nuevo?

Tiene sus altos y bajos, porque de pronto te tratan como si acabaras de empezar. Y no, yo empec¨¦ a los 13 a?os, pero para ellos todo lo que hab¨ªa hecho antes es como si no contara. Ahora que ya he hecho cinco o seis pel¨ªculas en EE UU [entre ellas Knock knock y La hija de Dios, ambas con Keanu Reeves] a¨²n les cuesta. Es muy buen ejercicio para el ego, te pone los pies en la tierra. Es una oportunidad para empezar, no cometer los mismos errores, reflexionar, elegir mejores proyectos. Tiene sus cosas buenas y cosas malas.

?No te cuestan los cambios?

Siempre he estado abierta a cambios. S¨¦ que, al principio, vendr¨¢n con limitaciones. Necesitas un periodo de adaptaci¨®n, pero no me doy por vencida porque siempre son para bien. Siempre.

En tu caso s¨ª han resultado as¨ª; primero en Espa?a y ahora en Los ?ngeles.

Pero siempre sacrificas cosas. Tiene su parte buena en el sentido de vivir aventuras. Soy una persona curiosa con ganas de aprender y superarse, pero dejas muchas cosas detr¨¢s: a la familia, a los amigos, no sientes que tienes una casa detr¨¢s...

?A¨²n no sientes Los ?ngeles como tu casa?

Despu¨¦s de tres a?os all¨ª, ahora mismo es cuando mejor me siento. Estoy disfrutando mucho de m¨ª misma como mujer, me siento superrealizada y orgullosa; conozco gente maravillosa y talentos¨ªsima con la que puedo hablar de cine, de proyectos en el futuro. Tengo amigos, pero fue duro: primero me fui de Cuba y dej¨¦ a la familia y a los amigos. Ok, me voy a Espa?a y, despu¨¦s de ocho a?os, cuando ya ten¨ªa mis nuevos amigos y una nueva familia que hab¨ªa elegido, otra vez me voy, y lleva tiempo. S¨ª, casi se siente casa.

?Qui¨¦nes son tus amigos all¨ª?

Para empezar, tengo a mi equipo en el que conf¨ªo plenamente, me apoya y entiende qu¨¦ quiero hacer y qui¨¦n soy yo personalmente... tengo una relaci¨®n muy cercana con ellos. Adem¨¢s, Jonathan [Jakubowicz], Edgar Ram¨ªrez, Keanu Reeves o ahora Denis [Villeneuve, director de la nueva Blade runner] son muy cercanos. Gente a la que admiro mucho y me ha dado muy buenos consejos. Me han ayudado a ser paciente y a entender que esto es una carrera de fondo, que tienes que tom¨¢rtelo con calma, y ser m¨¢s inteligente que agresiva.

?Y con Ryan Gosling tienes relaci¨®n?

?Te parece poco haber pasado tres d¨ªas en la Comic-Con juntos, m¨¢s todo el tour promocional? [risas].

El test Voight-Kampff, que invent¨® Philp K. Dick en su novela ?Sue?an los androides con ovejas el¨¦ctricas? para saber si alguien es replicante o humano, no funcionar¨ªa con Ana de Armas. Primero nos reunimos con ella en Barcelona, en la presentaci¨®n mundial de Blade runner?2049, en las primeras entrevistas con prensa de todo el mundo. La actriz est¨¢ exultante, derrocha energ¨ªa y sentido del humor tanto hablando en un perfecto ingl¨¦s (m¨¢s perfecto a¨²n sabiendo que lo ha aprendido en los tres a?os que lleva en Los ?ngeles) como en espa?ol. Abre mucho sus ojos cuando habla y sus iris de color miel casi verdes no paran de moverse. La maquinita de Blade runner se habr¨ªa vuelto loca. Y no es porque tome mil caf¨¦s al d¨ªa¡­ La siguiente vez que la vemos, en esta sesi¨®n de fotos futurista trash, pide solo zumo de naranja: "Es mi cafe¨ªna", dice. Y as¨ª evita el az¨²car que se echa "hasta formar isla en el caf¨¦". "Tomo mucha, supongo que es algo que me queda de Cuba". De all¨ª tambi¨¦n le queda una actitud llena de optimismo y lucha. "No s¨¦ qu¨¦ fue lo que me hizo lanzarme a irme de mi casa y luego de Espa?a, supongo que mi familia, mis valores", reflexiona.

L?GRIMAS EN LA LLUVIA

Blade Runner 2049, como su predecesora, hablar¨¢ de la memoria, de nuestros recuerdos, y de c¨®mo pueden acabar conformando la identidad humana. 35 a?os separan las dos historias y la secuela promete dar respuestas a todas las preguntas que plante¨® Ridley Scott con Rick Deckard. De hecho, el argumento (por ahora desvelado) es que el nuevo protagonista, el Agente K (Ryan Gosling), va en busca de Deckard (de nuevo Harrison Ford) para hallar esas respuestas, esos recuerdos perdidos en el tiempo. Un poco como le pasa a Ana, que no recuerda muy bien cu¨¢ndo vio la pel¨ªcula original. Aqu¨ª pinchar¨ªa en el test.

?Cu¨¢l es tu primer recuerdo cin¨¦filo?

No s¨¦ [piensa un momento]. Me viene a la cabeza Tibur¨®n. De peque?a me encantaban las pel¨ªculas de terror. Y supongo que el cine s¨ª debi¨® tener influencia en m¨ª para decidir que quer¨ªa ser actriz, porque recuerdo que, despu¨¦s de ver alguna de esas pel¨ªculas con mi abuela en Cuba, siempre me iba delante del espejo y repet¨ªa las escenas.

?Recuerdas qu¨¦ te pareci¨® Blade Runner la primera vez que la viste?

Ni siquiera hab¨ªa nacido cuando se estren¨®, y no recuerdo cu¨¢ndo la vi, seguramente fue en Cuba cuando era muy peque?a. Pero cuando me dieron este papel volv¨ª a verla, obviamente, la vi muchas veces, y sent¨ª distintas experiencias, m¨¢s a¨²n cuando tienes la continuaci¨®n en tus manos. Es incre¨ªble pensar que 35 a?os despu¨¦s vas a ser parte de ese cl¨¢sico que ha crecido con los a?os. Ridley fue un visionario: en 1982 habl¨® del futuro, de la humanidad, de la tecnolog¨ªa, y creo que por lo que se convirti¨® en algo tan importante fue porque lo que planteaba podr¨ªa ser algo real, podr¨ªamos ir en esa direcci¨®n. Y ahora estos nuevos personajes a?aden un valor y un significado a la primera.

?Qu¨¦ a?ade Joi, tu personaje?

Denis Villeneuve dice que es el m¨¢s complejo de todos. Es una mujer muy especial. Es muy valiente, apasionada, real, emocional. Es muy importante en la vida de K: es su mejor amiga, su amante, su mayor fan, est¨¢ ah¨ª para apoyarle. Es fuerte emocionalmente. Tiene un arco en la pel¨ªcula incre¨ªble, ves c¨®mo se va transformando, c¨®mo cambia de parecer. A veces lo m¨¢s dif¨ªcil no es mantenerte en tu posici¨®n sino ser flexible, aprender de las cosas, moldearte con las situaciones.

Joi, adem¨¢s, tiene el mismo acento que tiene Ana de Armas hablando en ingl¨¦s. Desde el momento en que la eligieron para interpretar a esta mujer que acompa?a al Agente K, le dijeron que fuera ella misma. Un triunfo personal y un gran logro para las latinas de Hollywood: perder el miedo a ser una misma, rechazar etiquetas.

Para ella, el estereotipo de latina en Hollywood ha sido m¨¢s dif¨ªcil de pelear, y a¨²n lo es. Es cubana blanca, con ojos claros. "No soy una Sof¨ªa Vergara, tienen todav¨ªa muchos prejuicios, a veces subestiman a la audiencia y piensan que no es cre¨ªble que puedas interpretar otros papeles, que no les va a encajar y van a lo seguro en vez de arriesgar", se queja. "Es un buen momento en Hollywood, est¨¢n?cambiando cosas, pero a¨²n hay mucho por hacer y la conversaci¨®n tiene que mantenerse viva".

Por suerte para ella, Denis Villeneuve y los productores de Blade runner 2049 s¨ª decidieron arriesgar y apostar por ella.Ahora lo cuenta orgullosa, pero cost¨® mucho que la admitieran incluso en el casting. "Supongo que ten¨ªan otra idea muy distinta para mi personaje", dice. Al equipo de la actriz le dio igual y pele¨® y pele¨® porque, al menos, Villeneuve la viera en la audici¨®n. Acab¨® vi¨¦ndola en tres, la ¨²ltima con Gosling, y le dieron el papel. "Por lo menos que te consideren ya es mucho, a veces me parece m¨¢s importante tener como m¨ªnimo la oportunidad de que te llamen para un casting, estar ah¨ª¡­ Aunque no te cojan, en alg¨²n momento te coger¨¢n. No puedes desesperar, tienes que disfrutar y ser paciente".

Es un poco lo que contaba La la land: todas esas pruebas, todos esos "noes". Y ahora Ana de Armas est¨¢ como en ese momento del final del musical de Emma Stone, a punto de estrenar Blade runner 2049, a punto de convertirse en una estrella m¨¢s en la Ciudad de las Estrellas. "Nunca se sabe del todo, pero pase lo que pase, como actriz y a nivel personal, esto es un antes y despu¨¦s: esos cinco meses rodando en Budapest con Denis y Ryan han sido un aprendizaje enorme", dice. "La gente solo sabe todos los 's¨ªes', pero he o¨ªdo muchos 'noes'. De hecho, cuando hice la prueba para Blade Runner estaba en un momento en que no me sal¨ªa nada, por el tema del acento, que eres cubana pero no pareces cubana¡­ Despu¨¦s de la tercera prueba con Denis y Ryan tardaron en llamarme y yo estaba convencida de que me iban a decir que no por las mismas razones que llevaba oyendo meses", contin¨²a. "Para m¨ª fue totalmente inesperado haber roto esa barrera con esta pel¨ªcula porque normalmente te dan la oportunidad de ser t¨² misma en una m¨¢s peque?ita, pero con una pel¨ªcula as¨ª que te digan 'te queremos como eres, est¨¢ bien que seas as¨ª, que tengas acento' para m¨ª fue muy loco. No me lo cre¨ªa".

HE VISTO COSAS QUE NO CREER?AIS

En Budapest construyeron los mundos de Blade runner, sets f¨ªsicos en los que Roger Deakins ejerc¨ªa su magia para conseguir la sensaci¨®n de realidad que buscaba Denis Villeneuve. "Estar en esos sets, el vestuario, las luces de Roger, la niebla¡­ era alucinante; y, de pronto, aparece Harrison Ford y te transportas, porque ¨¦l es Blade runner. Fue una experiencia muy surrealista, ¨¦l trae el esp¨ªritu de la original a nuestra pel¨ªcula, y fue alucinante".

?C¨®mo fue trabajar con ¨¦l?

Siempre estaba muy preocupado por m¨ª. "?Tienes fr¨ªo? ?Est¨¢s c¨®moda? ?Tienes hambre?". "?Est¨¢ bien?", le preguntaba a otros [risas]. Fue muy dulce, y siempre le respond¨ªa: "Estoy bien". Y me dec¨ªa: "Qu¨¦ profesional eres".

?Y Ryan Gosling?

Es un compa?ero de ensue?o. Los cinco meses de rodaje fueron muy intensos y ¨¦l lo hizo muy f¨¢cil. Denis y ¨¦l me hicieron sentirme parte, me dejaban proponer. Hab¨ªa d¨ªas que pas¨¢bamos horas los tres solos y Roger Deakins en el set probando distintas versiones de las escenas hasta que encontr¨¢bamos lo que quer¨ªamos.

Ha sido un cursillo intensivo de interpretaci¨®n, de Hollywood y de cine. Uno que le servir¨¢ para seguir creciendo all¨ª y quiz¨¢ un d¨ªa para volver, porque como Pen¨¦lope Cruz o Antonio Banderas antes que ella, espera volver. "Pero a¨²n hoy no recibo ninguna llamada o propuesta de Espa?a. No s¨¦ si todav¨ªa no ven la transici¨®n de adolescente a mujer o creen que no soy capaz de tener un rol importante, o cargar con una pel¨ªcula o saber gestionar una producci¨®n de este tama?o, o si piensan que voy a decir que no y ni siquiera lo intentan, pero me pone muy triste porque hay directores incre¨ªbles. Y yo seguir¨¦ diciendo, hasta que se me caiga la lengua: 'Estoy disponible, aqu¨ª estoy".