Un error legal deja con un pie en la calle a decenas de cient¨ªficos punteros
Un cambio en la ley impide a fundaciones p¨²blicas renovar a sus investigadores y pone en peligro estudios sobre el c¨¢ncer y las enfermedades cardiovasculares

Massimo Squatrito no sale de su asombro. Es uno de los mejores cient¨ªficos en su campo, el de la b¨²squeda de nuevos tratamientos para tumores cerebrales letales. El equipo que dirige en el Centro Nacional de Investigaciones Oncol¨®gicas (CNIO), en Madrid, ha conseguido 300.000 euros de diferentes entidades privadas para financiar sus estudios durante los pr¨®ximos tres a?os. Pero ¨¦l y su grupo, seg¨²n denuncia, tienen un pie en la calle por un absurdo matiz legal.
¡°Con la ley como est¨¢, cuatro de los seis miembros del grupo se van a quedar en casa. Incluido yo¡±, explica este genetista italiano. Su contrato expira el 29 de octubre y el CNIO no se lo puede renovar. Hay decenas de afectados como ellos en algunos de los mejores centros cient¨ªficos de Espa?a.
El Centro Nacional de Investigaciones Oncol¨®gicas reconoce la situaci¨®n "dram¨¢tica" de algunos de sus laboratorios
El problema es la Ley de Presupuestos Generales de 2017, que se ha convertido en una amenaza para la ciencia espa?ola. Su disposici¨®n adicional 34 responsabiliza personalmente a los gerentes de los centros p¨²blicos de irregularidades como la realizaci¨®n de contratos temporales de m¨¢s de tres a?os o la concatenaci¨®n de contratos. La Ley de la Ciencia, aprobada en 2011, establece excepciones para estas contrataciones en universidades y organismos p¨²blicos de investigaci¨®n, necesitados de flexibilidad. Sin embargo, la Ley de la Ciencia se deja fuera a fundaciones cient¨ªficas, como el CNIO. En estas condiciones, algunos gerentes han paralizado contrataciones y renovaciones.
¡°Las nuevas restricciones de contrataci¨®n a las que hace referencia la ley afectan a m¨¢s de 80 trabajadores del centro hasta diciembre. M¨¢s de 10 contratos podr¨ªan verse afectados este mismo mes de septiembre. Y las cifras pueden superar el centenar en el pr¨®ximo a?o¡±, alerta la direcci¨®n del CNIO en respuesta a preguntas de Materia. ¡°Mostramos nuestra m¨¢xima preocupaci¨®n ante esta grave situaci¨®n, que puede ser dram¨¢tica en el caso de algunos grupos o departamentos que perder¨ªan a la mayor¨ªa de su personal en los pr¨®ximos meses¡±. El CNIO es uno de los mejores centros de investigaci¨®n del c¨¢ncer del mundo.

Otro de los equipos m¨¢s afectados es el del bioqu¨ªmico ?scar Fern¨¢ndez Capetillo, l¨ªder del Grupo de Inestabilidad Gen¨®mica del CNIO. ?l ha sido elegido por la prestigiosa revista Cell como uno de los cient¨ªficos m¨¢s prometedores del planeta, por sus estudios sobre el c¨¢ncer y el envejecimiento. Ahora, alerta de que la nueva normativa es ¡°mortal¡± para equipos como el suyo, con cient¨ªficos excelentes fichados para proyectos punteros concretos con financiaci¨®n europea.
Otra de las instituciones golpeadas es el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC), tambi¨¦n en Madrid. La direcci¨®n de la instituci¨®n ha comunicado al comit¨¦ de empresa que este enredo legal afectar¨¢ a unos 30 trabajadores de aqu¨ª a finales de a?o. Dos ya no forman parte de la plantilla, seg¨²n fuentes del comit¨¦.
El enredo legal pone en peligro la renovaci¨®n de 80 trabajadores del CNIO y de otros 30 del CNIC
En los ¨²ltimos a?os, trabajadores temporales del CNIC y de otros centros cient¨ªficos han llevado sus casos a los tribunales y han conseguido que los jueces reconozcan su situaci¨®n de indefinidos, seg¨²n las mismas fuentes. Los gerentes, ahora vistos como responsables por la nueva ley, rechazan renovar contratos que puedan suponer en el futuro una declaraci¨®n judicial de indefinido no fijo.
¡°Adem¨¢s, las fundaciones del sector p¨²blico tienen restringida la contrataci¨®n indefinida. Se encuentran en una situaci¨®n en la que no pueden renovar los contratos temporales y no pueden hacer contratos indefinidos, lo que est¨¢ llevando a la p¨¦rdida de empleo en estos centros de personal muy cualificado¡±, subrayan las fuentes del comit¨¦ de empresa.
"Hay empleados del CNIC que se ver¨ªan afectados por esta normativa, pero nos consta que desde los organismos p¨²blicos involucrados est¨¢n haciendo todo lo posible por solucionarlo con la mayor rapidez", sostiene el cardi¨®logo Valent¨ªn Fuster, director general del CNIC. Su instituci¨®n se puso en contacto este verano con otros posibles afectados, como el Centro de Regulaci¨®n Gen¨®mica de Barcelona, para pedir juntos soluciones a la secretaria de Estado de I+D+i, Carmen Vela.
¡°Estamos trabajando para que en la Ley de la Ciencia se incluya entre las excepciones a todos los agentes del Sistema de Ciencia, Tecnolog¨ªa e Innovaci¨®n¡±, afirma un portavoz del gabinete de Vela. Su estrategia principal era introducir este cambio a trav¨¦s de los Presupuestos Generales de 2018, pero la crisis de Catalu?a y la falta de apoyos del Gobierno de Mariano Rajoy amenazan con retrasar su aprobaci¨®n hasta el a?o que viene. Decenas de cient¨ªficos punteros pueden quedarse en la calle antes. ¡°Vamos a buscar soluciones caso por caso si hace falta¡±, asegura el portavoz.
?Tienes m¨¢s informaci¨®n sobre este caso u otros similares? Escr¨ªbenos a manuel@esmateria.com
¡°No sabemos qu¨¦ va a pasar con nosotros¡±
El estupor se ha adue?ado del Centro Nacional de Investigaciones Oncol¨®gicas (CNIO), situado en la vanguardia mundial de la lucha contra el c¨¢ncer. Unos 80 de sus 464 trabajadores est¨¢n afectados por el surrealista barullo legal creado alrededor de la Ley de Presupuestos Generales de 2017 y de la Ley de la Ciencia de 2011. El 17% de la plantilla, con su nombre escrito en una lista negra, se siente con un pie en la calle.
"Lo peor es que no tenemos noticias. No sabemos qu¨¦ va a pasar con nosotros", lamenta el genetista Massimo Squatrito, que lleg¨® hace cinco a?os procedente del Centro Oncol¨®gico Memorial Sloan Kettering de Nueva York. El grupo que dirige en el CNIO dispone de 300.000 euros para investigar tumores cerebrales, gracias a ayudas de entidades privadas como la Fundaci¨®n Seve Ballesteros, la Asociaci¨®n Espa?ola contra el C¨¢ncer y la Fundaci¨®n BBVA. "No es un problema de dinero, es un problema burocr¨¢tico", comenta todav¨ªa sin dar cr¨¦dito.
El contrato de cinco a?os de Squatrito termina el 29 de octubre. Ha superado todas las evaluaciones cient¨ªficas para su renovaci¨®n, pero la nueva normativa amenaza con expulsarlo de su propio laboratorio. "Hay estudiantes que se pueden quedar sin grupo en medio de su tesis doctoral", advierte. "Y de todo esto nos hemos enterado el 14 de septiembre, hace dos semanas". Su centro, el CNIO, parece por el momento el m¨¢s afectado por la nueva legislaci¨®n. La direcci¨®n del organismo, con la bioqu¨ªmica Mar¨ªa Blasco al frente, es ahora la m¨¢s combativa a la hora de denunciar el caos generado.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
