La pit¨®n que quiso comer y acab¨® siendo la comida
La enorme serpiente termin¨® alimentando a un poblado tras atacar a un guarda de seguridad en Indonesia
Una pit¨®n de 7,8 metros de longitud acab¨® alimentando a todo un pueblo en la isla de Sumatra, Indonesia, tras atacar a un guarda de seguridad. La v¨ªctima del ataque sufri¨® heridas graves en una mano por el mordisco del animal. La serpiente fue despellejada, troceada y frita por los locales.
Los hechos sucedieron en el distrito de Batang Gansal. El agente de seguridad Robert Nababan, de 37 a?os, encontr¨® a la pit¨®n en un camino frecuentado por personas en una plantaci¨®n de aceite de palma, seg¨²n ha informado la cadena brit¨¢nica BBC. El hombre intent¨® alejar al animal, pero este fue m¨¢s r¨¢pido y le mordi¨® en la mano. "Intent¨¦ atraparla, me mordi¨® en la mano y me las arregl¨¦ para pelear contra ella" ha explicado la v¨ªctima al peri¨®dico local Detik. Nababan, con la ayuda de los habitantes de la zona, consigui¨® matar al animal, que posteriormente fue cocinado por los lugare?os.
El gobernador del distrito, Elinaryon (muchas personas en Indonesia tienen un solo nombre), dijo que el guarda fue trasladado a un hospital de la ciudad de Pekanbaru, donde a¨²n se recupera de las heridas provocadas por los colmillos de la pit¨®n.
Seg¨²n afirma el dirigente, las pitones son muy comunes en la zona. "Suele haber al menos 10 avistamientos cada a?o. En la estaci¨®n seca salen al exterior para beber, mientras que en la h¨²meda salen para lavarse con la lluvia", explica. Adem¨¢s, se?ala que "habitualmente hay un mont¨®n de ratones en las plantaciones de aceite de palma, y por eso salen a cazar". Recientemente se encontr¨® en Indonesia el cad¨¢ver de un hombre que se encontraba en paradero desconocido en el interior de una pit¨®n.
El administrador del distrito no se ha sorprendido de que los lugare?os se hayan comido la serpiente, cuya sangre, se cree en la zona, tiene propiedades curativas. "He o¨ªdo por amigos que son muy sabrosas. Quiero decir, es una serpiente de siete metros, ?eso es un mont¨®n de carne!", exclama.
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