Virgil Abloh, el dise?ador 'influencer'
VIRGIL NOS ha invitado¡±, replica un grupo de adolescentes. Aunque su tono pretende ser categ¨®rico, se nota que est¨¢n al borde la pataleta. Un agente de seguridad les bloquea el paso a las gradas que se han instalado frente al palacio Pitti de Florencia. No figuran en la lista de asistentes ni tienen sitio asignado en el desfile de Off White, pero insisten en que su director creativo, Virgil Abloh, las ha convocado ¡°a trav¨¦s de WhatsApp¡±. El hombre del pinganillo en la oreja no cede y las aparta. La idea de que el responsable de una de las marcas de lujo m¨¢s cacareadas del momento utilice emoticonos en vez de un ampuloso tarjet¨®n manuscrito parece rid¨ªcula. Pero este estadounidense de 37 a?os encarna como ning¨²n otro el poder que las redes sociales y, por ende, sus l¨ªderes de opini¨®n ¡ªlos influencers¡ª est¨¢n adquiriendo en la industria de la moda. Su m¨¦todo de trabajo, estrategia de comunicaci¨®n e, incluso, su discurso creativo responden a las reglas de este universo digital. Representa el paradigma del nuevo creador que est¨¢ por venir. ¡°Tengo un grupo de chat con mi equipo, copio y pego, env¨ªo fotos de cosas que me inspiran, dibujo. No tengo asistente. Es una forma de trabajar nueva. Las ideas fluyen, nadie tiene una tarea concreta¡±, explica en el backstage del palacio.
Hace solo tres a?os que fund¨® Off White, acaba de firmar una colaboraci¨®n con Nike y en junio present¨® su primera colecci¨®n para hombre dentro de Pitti Uomo, la feria de moda masculina m¨¢s relevante de Europa. Este r¨¢pido ascenso dentro del establishment resulta especialmente sorprendente teniendo en cuenta su singular y subversiva percepci¨®n del lujo. ¡°Antes deb¨ªa ser algo caro y ten¨ªa que ver con los mejores materiales del mundo, pero creo que las nuevas generaciones entienden que es cualquier cosa que les guste y que codicien¡±, argumenta.
Antes del desfile, Abloh se mueve fren¨¦ticamente de un lado a otro: da indicaciones a sus modelos ¡ªmucho m¨¢s relajados que ¨¦l¡ª, escribe personalmente notas en post-its que luego colocar¨¢ en cada una de las zapatillas deportivas que se ver¨¢n en la pasarela, habla con su esposa por tel¨¦fono y consulta su iphone 70 veces por minuto. Es su universo y su arma. Ah¨ª promociona y es promocionado, elogia y recibe elogios de su medi¨¢tica y mundialmente famosa troupe. A saber: las hermanas Kardashian (solo Kim tiene 103 millones de seguidores en Instagram), las hermanas Jenner (Kylie atesora 97,8 millones) o las hermanas Hadid (Gigi, 35,8 millones).
El dise?ador de Chicago es el chico popular de la clase. Adem¨¢s de celebrities varias, cuenta entre su c¨ªrcu?lo de amigos y followers con dos de los dise?adores m¨¢s influyentes y vanguardistas del momento: Demna Gvasalia, al frente de Vetements y Balenciaga, y Shayne Oliver, responsable de Hood by Air y recientemente nombrado director creativo de la revivida firma de culto Helmut Lang. Adem¨¢s, no hay fiesta de la moda con pretensiones hiphoperas que no cuente con ¨¦l como DJ. El pasado septiembre, incluso pinch¨® en el desfile de Tom Ford.
Abloh ha demostrado ser un maestro en la gesti¨®n del fen¨®meno influencer. A trav¨¦s de sus c¨¦lebres amigos alcanza a una audiencia global, refuerza la imagen de su marca en el nicho de mercado que le interesa ¡ª?el de los que admiran a las mujeres que defienden su ?est¨¦tica¡ª y gana a su vez poder de prescripci¨®n. No es una habilidad superficial. Entre los 10 dise?adores m¨¢s buscados en Google durante el a?o pasado no hab¨ªa ni uno solo en n¨®mina de Kering o LVMH, los dos ?conglomerados de empresas del lujo m¨¢s grandes del mundo. S¨ª estaban, sin embargo, Kylie y Kendall Jenner, Ivanka Trump, la exestrella de Disney Zendaya, Beyonc¨¦ y el rapero/dise?ador/celebrity/marido de Kim Kardashian, Kanye West.
Este genio de las relaciones p¨²blicas 3.0 fue, precisamente, el pigmali¨®n de Abloh. Empezaron a trabajar juntos en 2002, cuando el m¨²sico todav¨ªa no hab¨ªa publicado su primer ¨¢lbum, The College Dropout. Durante m¨¢s de una d¨¦cada, el de Chicago colaborar¨ªa en el desarrollo de las portadas de sus discos, en la escenograf¨ªa de sus conciertos y hasta en el merchandising. Cuando en 2012 West fund¨® la agencia creativa Donda, el dise?ador de Off White declar¨® v¨ªa tuit que el rapero recoger¨ªa el testigo de Steve Jobs. Dos a?os despu¨¦s, la estrella corresponder¨ªa a semejante halago en The New York Times: ¡°Virgil es una de los profesionales m¨¢s inteligentes, r¨¢pidos e innovadores con los que he creado jam¨¢s¡±.
Por supuesto, fue una de las 16.400 personas en darle un me gusta a la foto que Abloh colg¨® en Instagram de su desfile en Florencia. Curiosamente, solo public¨® dos fotos de este evento. La segunda, para destacar que The New York Times lo hab¨ªa escogido como uno de los 10 momentos m¨¢s relevantes de las semanas de la moda de hombre celebradas el pasado junio. La publicaci¨®n estadounidense destacaba la espectacular puesta en escena que la artista conceptual Jenny Holzer organiz¨® para la ocasi¨®n: sobre la fachada del palacio Pitti se proyectaron en gigantescas letras fragmentos de poemas que Anna Swirszczynska escribi¨® durante el levantamiento de Varsovia en 1944. Debajo de ellas, el dise?ador de Off White present¨® una colecci¨®n en la que volv¨ªa a incidir en las se?as de identidad de su joven marca. A saber: una contundente tipograf¨ªa que decora bolsos, botas y la espalda de chaquetas deportivas, y las famosas rayas oblicuas que recorren todas sus prendas, empezando por sus camisetas de 300 euros, que son uno de los best sellers de la ense?a.
Abloh asegura sin parpadear que el fin de su marca no es vender ropa. ¡°Si solo persigue ese objetivo deja de ser una expresi¨®n art¨ªstica¡±. Dando forma a todo, una est¨¦tica urbana y deportiva que trata de elevar los c¨®digos de la cultura skater y grafitera con ¨ªnfulas experimentales y una buena dosis de iron¨ªa. ¡°Es la ra¨ªz del dise?o moderno, lo que define a nuestra generaci¨®n. No queremos entrar en una tienda y salir vestidos de arriba abajo de esa marca, sino mezclar lo exclusivo, lo caro con lo barato¡±, argumenta.
Aunque Abloh fue el ¨²nico estadounidense nominado a los prestigiosos premios LVMH en la edici¨®n de 2015, algunas voces se?alan que lo m¨¢s interesante de Off White no es su discurso creativo, sino su capacidad para conectar con una generaci¨®n que vive en las redes sociales. Eso opina el actual director creativo y consejero delegado de Calvin Klein, Raf Simons, que, en unas declaraciones a la edici¨®n estadounidense de GQ el pasado enero, sembraba la semilla de la discordia: ¡°Es un chico encantador. Me gusta mucho de verdad. Pero me inspira la gente que aporta cosas que no est¨¢n vistas, que son originales. No siempre se trata de ser el m¨¢s nuevo, porque ?qui¨¦n lo es?¡±. El estadounidense prefiere no hacer comentarios. Ya dijo todo lo que ten¨ªa que decir cuando un mes despu¨¦s bautiz¨® la colecci¨®n que presentaba en Par¨ªs Nada nuevo. ¡°Mucho m¨¢s que las cr¨ªticas, me importa lo que diga mi c¨ªrculo social. Yo tambi¨¦n puedo poner a parir a todo el mundo¡±.
El dise?ador tampoco quiere pronunciarse sobre c¨®mo este enfrentamiento al m¨¢s puro estilo Bette Davis / Joan Crawford ya se ha convertido en carne ¡ªo en este caso, tela¡ª de la iron¨ªa posmoderna que ¨¦l mismo practica. Inmediatamente despu¨¦s de que saltase la pol¨¦mica, el artista conocido como @Shirtnyc, que dise?a prendas donde fusiona los logos de Nike y Adidas, lanz¨® una serie de camisetas en las que simula una posible colaboraci¨®n entre Raf Simons y Off White. ¡°No tengo nada que decir¡±, zanj¨® Abloh.
Su madre, una inmigrante de Ghana, fue modista durante ¡°casi 50 a?os¡±, y aunque Abloh estudi¨® ingenier¨ªa en la Universidad de Wisconsin, defiende que sabe perfectamente c¨®mo se debe coser una prenda. No todo son likes y retuits. El creador de Chicago tiene su sede empresarial en Mil¨¢n y desfila en la semana de la moda de Par¨ªs. Su proyecto es serio, asegura, aunque, a veces su forma de gestionarlo no lo sea tanto. En junio del a?o pasado, el creador compart¨ªa en su cuenta de Instagram la foto de una invitaci¨®n para su desfile a nombre de Luka Sabbat, un influencer neoyorquino de tan solo 19 a?os que se precia de ser el mejor amigo de Jaden Smith, hijo del actor Will Smith. En el texto que acompa?aba a la imagen pod¨ªa leerse: ¡°Voy a sacar a Luka en el show, as¨ª que no va a necesitar su invitaci¨®n. La direcci¨®n y la hora est¨¢n aqu¨ª para que vengan todos los chicos. Muy inclusivo, no muy exclusivo¡±. Quiz¨¢ las adolescentes de Florencia no ment¨ªan. Tal vez ¡°Virgil¡± s¨ª las convoc¨® ¡°a trav¨¦s de las redes sociales¡±.
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