La venganza de Ronan Farrow al destapar a Weinstein

Las agresiones en serie de Bill Cosby, las acusaciones de Tippi Hedren contra Hitchcock, el pol¨¦mico rodaje de El ¨²ltimo tango en Par¨ªs, la condena por violaci¨®n a una menor de Roman Polanski... La historia de Hollywood est¨¢ trufada de esc¨¢ndalos sexuales. Casi todos ellos contienen un marcado acento machista. Ronan Farrow (Nueva York, 1989) fue v¨ªctima colateral de uno de los casos m¨¢s sonados, y ahora ha sido el encargado de destapar el ¨²ltimo caso de esta lista con su reportaje de investigaci¨®n para la revista The New Yorker sobre los abusos del productor Harvey Weinstein. Se toma as¨ª la revancha contra el hombre que resucit¨® la carrera de su padre y contra un Hollywood que mir¨® hacia otro lado.

La infancia del ¨²nico hijo biol¨®gico de Mia Farrow y Woody Allen transcurri¨® en medio de la escabrosa guerra medi¨¢tica que libraba la pareja, despu¨¦s de que el director abandonara a la familia para casarse con una de las hijas adoptivas de la actriz. Era el principio de los noventa y Allen se quedaba sin el respaldo de una compa?¨ªa que financiara sus pel¨ªculas. Pero un hombre apost¨® por ¨¦l a pesar de la controversia. Harvey Weinstein inici¨® una fruct¨ªfera relaci¨®n laboral con el cineasta neoyorquino produciendo con Miramax una de sus obras maestras: Balas sobre Broadway (1994). ¡°Que te rechace Hollywood no significa nada para nosotros. Estamos hablando de un genio de la comedia¡±, declar¨® en su d¨ªa al diario Los Angeles Times.

Dos d¨¦cadas m¨¢s tarde, Ronan Farrow se ha convertido en activista, asesor pol¨ªtico y reportero, adem¨¢s de posicionarse como el mayor defensor de su madre en un conflicto que todav¨ªa no ha llegado a esclarecerse. En mayo de 2016, mientras el realizador presentaba con todos los honores en el Festival de Cannes su pel¨ªcula Caf¨¦ Society, Farrow firmaba un art¨ªculo de opini¨®n en The Hollywood Reporter titulado: ¡°Mi padre, Woody Allen, y el peligro de las preguntas sin hacer¡±.

Ocurr¨ªa poco despu¨¦s de que dos de sus hermanos protagonizaran un nuevo conflicto. Dylan denunciaba haber sufrido abusos sexuales por parte de Allen siendo una ni?a. Pero Moses, otro de los hijos adoptivos de la pareja, aseguraba que esa acusaci¨®n era un falso recuerdo fruto de las manipulaciones y el despecho de Mia Farrow. Ronan decid¨ªa creer a su hermana y denunciaba la pasividad general ante este tipo de testimonios. ¡°Los medios tradicionales y su lenta evoluci¨®n han colaborado a la hora de crear una cultura de la impunidad y el silencio. Amazon ha pagado millones de d¨®lares para trabajar con ¨¦l mientras que actores y actrices, incluidos algunos a los que admiro profundamente, contin¨²an encabezando sus repartos. No es nada personal, me dijo una vez uno de ellos¡±, aseguraba en la publicaci¨®n. El discurso, que bien podr¨ªa referirse a Harvey Weinstein, fue el inicio de su particular ajuste de cuentas.

Muy pocas semanas despu¨¦s de firmar este texto, Ronan Farrow iniciaba una investigaci¨®n que se ha prolongado durante m¨¢s de un a?o para desenmascarar al que era hasta ahora uno de los hombres m¨¢s poderosos en la industria del cine. El periodista hab¨ªa comenzado a trabajar en la cadena NBC despu¨¦s de que su rostro se hiciera mundialmente conocido en 2014, cuando su madre insinu¨® que el verdadero progenitor de Ronan era su primer marido, Frank Sinatra.

Tras meses recopilando testimonios de mujeres dispuestas a acusar a Weinstein, el canal de televisi¨®n decidi¨® no emitir su reportaje, alegando, a pesar de todas las pruebas existentes, que la historia no estaba lo suficientemente bien atada. Los jefes de Farrow le dieron libertad para proponer el tema a otro medio y ¨¦l continu¨® trabajando en el asunto para The New Yorker. Fue entonces cuando descubri¨® que un equipo de reporteras de The New York Times tambi¨¦n estaba entrevistando a algunas de esas actrices y persiguiendo su misma exclusiva.

Jodi Kantor, autora del libro The Obamas, y la finalista del premio Pulitzer Megan Twohey lanzaron su art¨ªculo el 5 de octubre en el peri¨®dico estadounidense. La actriz Ashley Judd y varias exempleadas de Weinstein cuentan en ¨¦l sus experiencias con el productor en un texto que hace referencia a ¡°acoso sexual y contacto f¨ªsico no deseado¡±. Ronan Farrow public¨® cinco d¨ªas m¨¢s tarde, aunque logr¨® una mayor repercusi¨®n al incluir en su escrito la palabra ¡°violaci¨®n¡±, con las expl¨ªcitas de declaraciones de la int¨¦rprete y directora Asia Argento. Desde entonces, Angelina Jolie, Gwyneth Paltrow y otras estrellas femeninas se han atrevido a contar lo que hasta el momento callaban. La calculada venganza de Farrow es un relato que el otrora todopoderoso Weinstein podr¨ªa haber convertido en una pel¨ªcula ganadora del Oscar.