Justin Timberlake: es tu oportunidad para enmendar el episodio m¨¢s machista del siglo

Justin Timberlake?(Memphis, EE UU, 1981) ser¨¢ la estrella de la actuaci¨®n musical del medio tiempo de la Super Bowl en 2018. La misma que en los ¨²ltimos a?os ha dejado grandes momentos con Madonna, Beyonc¨¦, Bruno Mars, Coldplay, Katy Perry o Lady Gaga. Una buena noticia para los amantes del pop, ?no? Timberlake es uno de los grandes solistas masculinos de estas dos ¨²ltimas d¨¦cadas, uno capaz de combinar un ¨¦xito moderado en el cine con uno arrasador en la m¨²sica y, a la vez, recibir las simpat¨ªas de la cr¨ªtica. Con permiso del otro Justin (Bieber), Timberlake es el gran valedor del pop masculino blanco del siglo XXI.?

Pero hay un peque?o problema. En 2004 Justin Timberlake actu¨® como invitado puntual en el mismo espacio del evento deportivo, que en aquella ocasi¨®n ten¨ªa como estrella principal a Janet Jackson. Jackson (Indiana, EE UU, 1966) ha vendido m¨¢s de 100 millones de discos, acumula siete n¨²meros uno en la lista de ¨¦xitos estadounidense Billboard, ha revolucionado la m¨²sica negra de radiof¨®rmula introduciendo el sexo y la conciencia social en sus letras, ha roto r¨¦cords en los noventa tras firmar dos contratos multimillonarios con Virgin Records y ha logrado asustar con su ¨¦xito e influencia a la mism¨ªsima Madonna. Pero el 1 de febrero de 2004, cuando Justin y Janet terminaban de cantar el ¨¦xito (de ¨¦l)?Rock your body, Timberlake arranc¨® una pieza del top negro de Jackson y dej¨® ver, parcialmente, su pecho.

Desde el escenario, recogiendo un Grammy entre aplausos una semana despu¨¦s del episodio, Justin Timberlake dijo: "S¨¦ que ha sido una semana dura para todos", para luego re¨ªr travieso mientras el p¨²blico estallaba en carcajadas

Y la carrera de Janet termin¨® para siempre.

Se supone que fue "un fallo de vestuario". Se supone que cuando Justin arranc¨® la pieza textil que cubr¨ªa el pecho de Janet ten¨ªa que haber aparecido, debajo, un encaje rojo. En su lugar apareci¨® el pecho derecho de la artista, cuyo pez¨®n estaba cubierto por una pieza de joyer¨ªa. Los espectadores vieron aquel pecho (recalquemos: ning¨²n pez¨®n) durante poco m¨¢s de medio segundo, antes de que realizaci¨®n cambiase a un plano general del estadio. Pero el da?o estaba hecho: la Comisi¨®n Federal de Comunicaciones recibi¨® 540.000 llamadas de espectadores escandalizados, la cadena CBS fue multada y la MTV dej¨® de producir el evento en a?os venideros. Todas las partes pidieron perd¨®n a los espectadores.

Pero la ¨²nica carrera que se termin¨® fue la de Janet Jackson.

La actuaci¨®n de Janet Jackson y Justin Timberlake en el intermedio de la Super Bowl de 2004.

Ha publicado desde entonces otros cuatro discos de estudio, s¨ª. Hay en ellos algunas canciones que contienen la misma energ¨ªa y talento que hab¨ªa mostrado en los ochenta y los noventa. Pero sin el apoyo de las radios ni de la MTV ¨Cque la vet¨® tras el esc¨¢ndalo¨C, sus ventas se desinflaron r¨¢pidamente en las listas. Jackson no solo fue una apestada musical, sino una presencial a las que las puertas se le cerraron de forma tan literal que se pod¨ªan escuchar los engranajes de los goznes. Iba a interpretar a la activista Lena Horne en una pel¨ªcula, pero los productores no la quisieron en ella tras la actuaci¨®n. Iba a acudir a la gala de los Grammy 2004, que se celebraron solo siete d¨ªas despu¨¦s del incidente, para rendir homenaje al cantante Luther Vandross. Pero los productores tampoco la quer¨ªan all¨ª.

?Qui¨¦n acudi¨® a los premios Grammy de ese a?o? Justin Timberlake. ?l s¨ª. Desde el escenario, recogiendo un premio entre aplausos, dijo: "S¨¦ que ha sido una semana dura para todos", para luego re¨ªr travieso mientras el p¨²blico estallaba en una carcajada.

Esa semana que pas¨® desde el 1 al 8 de febrero de 2004 fue, sencillamente, una de las m¨¢s infames de la historia para la igualdad.

Ahora resulta que desde la National Football League (la liga nacional de f¨²tbol americano), la misma que dio la espalda a las v¨ªctimas de este incidente, que afirm¨® horas despu¨¦s que no sab¨ªan nada sobre ello y no hab¨ªan tenido nada que ver con el pez¨®ngate, han llamado al hombre que tir¨® de la pieza de cuero y dej¨® el pecho al descubierto.

Justin Timberlake sigue siendo una estrella y ser¨¢ el invitado del intermedio de la Super Bowl en 2018. Las secuelas del episodio de 2004 fueron muy diferentes para ¨¦l: mientras Janet Jackson ve¨ªa todas las puertas cerradas, Timberlake actu¨® en los cuatro a?os posteriores a la Superbowl en cuatro pel¨ªculas, present¨® los premios MTV Video Music Awards en 2006, colabor¨® con Madonna y Black Eyed Peas y public¨® su segundo disco en solitario?FutureSex/LoveSounds en 2007, que vendi¨® diez millones de copias en todo el mundo.

Alguien en toda esta historia considera que es deber de Timberlake restituir el honor de Jackson: los fans de la cantante. La campa?a que han iniciado en redes sociales con el hashtag #JusticeForJanet ("Justicia para Janet") culpa a la organizaci¨®n de requerir de nuevo los servicios de un cantante que sali¨® por patas del esc¨¢ndalo, mir¨® hacia otro lado y dej?o que una mujer se hundiese sola. Los fans exigen que Justin Timberlake invite a Janet Jackson a cantar con ¨¦l sobre el escenario. Como espect¨¢culo ser¨ªa perfecto: nada gusta m¨¢s en Hollywood que una reconciliaci¨®n.?

"A menos que Justin Timberlake empiece su concierto presentando a Janet Jackson con una disculpa y contin¨²e observando en silencio c¨®mo ella act¨²a 12 minutos con su repertorio, la Supwe Bowl puede quedarse su show del intermedio"

Pero nunca olvidemos qui¨¦n deber¨ªa pedir culpas a qui¨¦n. Y nunca olvidemos qui¨¦n sali¨® triunfante y qui¨¦n sali¨® hundido de un esc¨¢ndalo en el que estaban implicados un hombre blanco y una mujer negra.?