Val¨¨ncia y la anomia: el dise?o, ACTV y el origen del Bacalao (con C)
En la historia de la Ruta todo sucede m¨¢s o menos por casualidad. El movimiento en s¨ª, para ser m¨¢s precisos, no responde a la estrategia de nadie.
Ahora que este diario de grabaci¨®n ha superado la mitad y antes de que se me olvide, he de decir lo estimulante que es descubrir c¨®mo los actos m¨¢s ingenuos acaban influyendo en el relato de una historia que involucra a muchos. En esta historia, la de la Ruta del Bakalao, todo sucede m¨¢s o menos por casualidad. El movimiento en s¨ª, para ser m¨¢s precisos, no responde a la estrategia de nadie. Nadie propone ning¨²n objetivo ni trata de emular lo que sucede en ninguna otra ciudad. Surge as¨ª en todo su esplendor porque sus protagonistas son los j¨®venes sedientos de explorar sus nuevas libertades y en un lugar alejado del foco medi¨¢tico.
Que Juan Santamar¨ªa volviera a Val¨¨ncia despu¨¦s de haberse mudado a Escocia, casado y temporalmente retirado de los platos, quiz¨¢ sea uno de los hechos fortuitos m¨¢s decisivos. Pero la historia de este hombre ¨Cel DJ fundacional que supo dar con la f¨®rmula para hacer progresivamente masivo el uso de la m¨²sica moderna como m¨²sica de fiesta¨C es una historia que se hilvana en casi todas las etapas de la Ruta. ?l (otra vez) dio promoci¨®n a aquella idea del Bacalao (con C). Cabeza visible e ide¨®logo de la tienda de discos Zic Zac, por la que pasaban las bandas estatales e internacionales que actuaban cada semana en Val¨¨ncia, escuchaba a un chico de Sagunto gritar: ¡°?vaya Bacalao!¡±, ¡°a?¨° si que ¨¦s un Bacalao¡¡±.
El ilustre an¨®nimo acompa?aba a un DJ de la capital del Camp de Morvedre. A Santamar¨ªa le hizo gracia la idea del Bacalao: ¡°el bacalao sale de aqu¨ª¡±, ¡°aqu¨ª se parte el Bacalao¡±, ¡°?tienes algo de Bacalao? S¨ª, creo que por ah¨ª dentro ¨Cen la tienda¨C hay algo de Bacalao¡±. Dos aspectos son los m¨¢s reveladores en esa historia. El primero, que Bacalao nunca tuvo ninguna conexi¨®n con referirse a m¨²sica electr¨®nica. Era m¨²sica moderna y, de hecho, lo que imperaba era la m¨²sica rock del momento. Como nos comenta en la serie el periodista musical Eduardo Guillot, incluso, en maxi singles como Spirit in the Sky de Doctor & the Medics, la multinacional que lo editaba incluy¨® una etiqueta en su portada que pon¨ªa Bacalao. Esa es el segundo aspecto, el de una marca que funcion¨® incluso en el ¨¢mbito comercial.
En este sexto episodio nos detenemos un momento en la historia para recuperar nombres que, en paralelo, influyeron decisivamente en el movimiento. En general, una de las premisas para analizar todo lo sucedido durante la Ruta es tratar de comprender c¨®mo funcionaba la comunicaci¨®n sin Internet. Y por supuesto, sin redes sociales. Los canales de distribuci¨®n del mensaje entre los j¨®venes se podr¨ªan reducir a tres: carteler¨ªa, fanzines y radios de FM sin licencia. No obstante, como el flujo de capitales de las discotecas s¨ª ten¨ªa cierto volumen ¨Caunque viv¨ªan al l¨ªmite porque no hab¨ªa estrategia alguna¨C los contratados para esa carteler¨ªa, flyers y dise?o eran los miembros de una generaci¨®n de dise?adores valencianos de repercusi¨®n internacional.
En Val¨¨ncia Destroy: la historia no contada de la Ruta del Bakalao hablamos con Dani Nebot, Premio Nacional de Dise?o, o Marisa Gall¨¦n, Medalla de la Faculta de Bellas Artes de San Carlos. Ambos formaron parte de La Nave y compartieron vida profesional y personal con Paco Bascu?¨¢n y Quique Company, como ellos mismos y Julio And¨²jar comentan, fue finalmente Company el que desarroll¨® durante muchos a?os la imagen de una de las discotecas m¨¢s coherentes en este sentido: ACTV. Situada en la playa de la Malvarrosa, capricho de And¨²jar que ya hab¨ªa montado un local de bailes de sal¨®n y una terraza de dise?o, ACTV fue creciendo progresivamente como discoteca. And¨²jar quer¨ªa un club de videoarte e invirti¨® una millonada en lograrlo, pero todav¨ªa era demasiado pronto. M¨¢s tarde Vicente Pizcueta con una fiesta y los DJ¡¯s Fran Lenaers, Toni Vidal y Arturo Roger en distintas ¨¦pocas, har¨ªan que ACTV ocupara la terraza y todo el local de las antiguas Termas Victoria.
El trabajo de marca de Company para ACTV elev¨® el nivel de todo el ecosistema. La inversi¨®n en comunicaci¨®n y publicidad empez¨® a desatarse. Company realiz¨® constantes carteles ¨Ca partir de colores planos, degradados y formas rectangulares propias de la ¨¦poca, con fotograf¨ªa inserta utilizando el collage¨C, pero tambi¨¦n pinturas y alg¨²n v¨ªdeo. En un largo periodo, Company se dedic¨® casi por entero a ACTV, generando una cantidad de afiches que todav¨ªa comercializa And¨²jar. Pero no fue el ¨²nico y, aunque la lista ser¨ªa extens¨ªsima dado que tambi¨¦n era extens¨ªsima la lista de discotecas, destaca el Premio Nacional de C¨®mic y Goya al mejor guion adaptado (Arrugas) Paco Roca.
Toda esta actividad fren¨¦tica en torno a la Ruta va generando cierta profesionalizaci¨®n. Los empresarios van madurando su idea de hacer dinero y los m¨¢rgenes deseados son mayores. Las salas cada vez est¨¢n m¨¢s llenas y la m¨²sica ha empezado a virar en una extra?a conexi¨®n de prototechno ¨Ciniciado por la electr¨®nica de los nuevos rom¨¢nticos¨C y Electronic Body Music. El polo de atenci¨®n, muy lentamente, va a pasar de Londres a Berl¨ªn, aunque en Val¨¨ncia est¨¢ a punto de generarse una ruptura con todas las fuentes de inspiraci¨®n. Mientras por la ciudad pasan una cantidad de conciertos que ahora ser¨ªan inasumibles, todo el caldo de cultivo disfruta de una anomal¨ªa en el Estado de derecho muy poco estudiada desde la sociolog¨ªa en Espa?a: la anomia.
La ausencia de leyes y normas ten¨ªa un origen, como explica de manera detallada en el sexto episodio el catedr¨¢tico de filosof¨ªa del derecho y filosof¨ªa pol¨ªtica Javier de Lucas. Los pactos hablados de la Transici¨®n ofrec¨ªan una continuidad a jueces y polic¨ªa. Una continuidad por la cual estos segu¨ªan operando de manera similar y s¨®lo una paulatina y lenta llegada de reformas en los c¨®digos servir¨¢ para que eso vaya cambiando. Mientras tanto, durante al menos 15 a?os, esa anomia mantiene el estado de convivencia de manera muy similar en t¨¦rminos generales.
Sin embargo, para el sustrato underground, esa anomia es ox¨ªgeno. La libertad de horarios, la libertad de movimientos, de reuni¨®n y, sobre todo, de expresi¨®n, desata la creatividad. Es s¨®lo para unos pocos, pero esa ausencia de restricciones y de supervisi¨®n, la ausencia de una sobreprotecci¨®n de las instituciones, es uno de los rasgos m¨¢s interesantes que acompa?an al fen¨®meno.Tambi¨¦n decidimos que fuera la anomia la que diera t¨ªtulo a este episodio.
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