La venganza de Lola Vendetta
La ilustradora Raquel Riba habla de Lola Vendetta, su ¨²ltima creaci¨®n que combina feminismo con violencia expl¨ªcita
Lola Vendetta naci¨® matando. La ¨²ltima versi¨®n de este personaje, reci¨¦n parida, cometi¨® un asesinato en las v¨ªas de un tren. La v¨ªctima era un entra?able ancianito que unas horas antes se hab¨ªa insinuado a su creadora. ¡°El tipo llevaba hasta bast¨®n, pero no le impidi¨® pedirme una cita solo porque hab¨ªamos estado hablando cinco minutos¡±, asegura Raquel Riba Rossy, ¨¢lter ego de Vendetta y responsable de uno de los fen¨®menos editoriales m¨¢s inesperados de este a?o con su libro Lola Vendetta. M¨¢s vale Lola que mal acompa?ada (Lumen 2017).
Una de las cosas que m¨¢s sorprende de su libro es la violencia expl¨ªcita que empapa todas las historias. Su personaje se va vengando de todos los hombres machistas con una katana. "S¨ª, de hecho al principio recib¨ª muchas cr¨ªticas; me preguntaban c¨®mo iba a combatir la violencia de g¨¦nero con m¨¢s violencia". Su respuesta siempre es la misma: "Una mujer con katana y cortando cabezas es algo ex¨®tico, pero un hombre con katana y cortando cabezas es la historia de la humanidad".
En sus vi?etas, adem¨¢s de la katana, aparecen personajes mutilados, corazones ensangrentados, hasta una planta carn¨ªvora que va devorando a Lola. Cuando alguien lee la novela espera que la creadora sea alguien muy enfadada, y ella no lo parece. Adem¨¢s, se r¨ªe: "S¨ª, claro". Cuenta que Lola naci¨® un poco "en plan visceral" para defenderse a s¨ª misma, de sus fantasmas internos. "Ten¨ªa 24 a?os y estaba harta de pasar momentos inc¨®modos cada vez que sal¨ªa a la calle. Estaba harta de normalizarlo, como cuando haces un trayecto de tu casa a una cena de tus amigas y te pasa algo por el camino, alguien te acosa, y al llegar ni siquiera lo comentas. El acoso es tan com¨²n que no lo denunciamos ni dentro de nuestro c¨ªrculo".
A pesar de eso, y ¨²ltimamente, parece que el feminismo se ha normalizado, extendido, algunos dir¨ªan incluso que se ha puesto de moda, todo ello con un tinte negativo. "Quejarse de eso es como quejarse de que se ha puesto de moda salir a correr. Mira, hace 10 a?os lo que estaba de moda era la coca¨ªna y ahora est¨¢ de moda el running, ?Qu¨¦ es lo peor?, ?que la gente se va a fastidiar las rodillas? Lo importante es que consigues una sociedad m¨¢s sana". Riba asegura que existen las feministas que corrieron delante de los grises, "y hay que agradecerles su papel". Pero tambi¨¦n existen aquellas que se arreglan el pelo y llevan tacones. "Para m¨ª una clave fundamental del feminismo es estar en pac¨ªfico desacuerdo. Eso de entender que la otra persona no ha reflexionado antes, creer que est¨¢ equivocada, es muy hip¨®crita, muy patriarcal. Hay que hablar de feminismo en la Iglesia Cat¨®lica y en la casa okupa".
Precisamente su ¨²ltima obra se expone en una capilla. Una idea que sali¨® de Pilar Bonet, una profesora de Bellas Artes especializada en feminismo. "Se trata de reinterpretar el espacio seg¨²n cada artista. En mi caso Lola Vendetta sube a ver a Dios y le dice hay que hacer una segunda edici¨®n de la Biblia. Son seis quejas, y luego, el s¨¦ptimo d¨ªa, Lola descans¨®. Aunque luego vuelve y se sigue quejando porque hay muchas cosas de las que quejarse".
Entre otras cosas, de la alerta que se crea en torno a los genitales, tambi¨¦n llamados "chochos mandalas" en el mundo de Lola. "El problema es que cada vez que las ni?as se tocan sus genitales es ¡°no te toques que vas a infectar¡±, ¡°no te toques que te vas hacer da?o¡±, son todo alertas. Las ni?as empiezan a tener negaci¨®n, los ni?os empiezan a tener afirmaci¨®n". Vehemente, asegura que es muy importante sentarse delante del espejo y abrir las piernas. "Eso se nos olvida y deber¨ªa ser lo m¨¢s normal del mundo. Cr¨¦eme si te digo que hay mujeres con 30 a?os que no saben que tienen tres agujeros abajo".
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