Serrat y Messi m¨¢s TV3

La segunda p¨¢gina de Opini¨®n es, despu¨¦s de la portada, el espacio m¨¢s prestigioso del diario. Normalmente, se dedica a tribunas sobre temas pol¨ªticos o de gran relevancia social. Por eso sorprendi¨® la que se public¨® el s¨¢bado 18 de noviembre. No por quien la firmaba: Joan Manuel Serrat, uno de los cantautores m¨¢s famosos y admirados en Espa?a y en Latinoam¨¦rica. Lo que sorprendi¨® fue el tema. Titulada Cuarenta y cinco d¨ªas, la tribuna era en realidad una carta dirigida al presidente del FC Barcelona, Josep Maria Bartomeu, en la que se le urg¨ªa a renovar el contrato del jugador Leo Messi antes de que expire.

¡°Soy fan de Serrat desde que tengo uso de raz¨®n, le admiro como persona y como artista. Me sorprendi¨® que EL PA?S publicara este art¨ªculo sobre algo tan poco importante mientras en Espa?a est¨¢n sucediendo hechos mucho m¨¢s notables¡±, me escribi¨® una lectora, Concha Baquero. ¡°?Una p¨¢gina entera de la normalmente seria secci¨®n de Opini¨®n con una nota de Serrat sobre algo tan relevante para el mundo como el salario de Messi?¡±, se preguntaba desde Argentina Bernardo Frau.

Jos¨¦ Ignacio Torreblanca, jefe de Opini¨®n, defiende la decisi¨®n de publicar la tribuna: ¡°Decidimos que la relevancia p¨²blica de Serrat desbordaba la cuesti¨®n estrictamente futbol¨ªstica y que sus reflexiones interesar¨ªan a nuestros lectores. Independientemente del juicio que esto merezca, es una realidad que f¨²tbol y pol¨ªtica est¨¢n bastante entrelazados, especialmente en Catalu?a y con relaci¨®n al Bar?a¡±.

Creo, por mi parte, que el art¨ªculo de Serrat hubiera tenido mucho m¨¢s sentido en la secci¨®n de Deportes.

No es el ¨²nico tema catal¨¢n sobre el que he recibido alguna queja. Manuel Blanch S¨¢nchez, lector de Valencia, y Josep Vil¨¤ Batlle, de Olesa de Montserrat (Barcelona), me han escrito para protestar por el reportaje Una semana en la burbuja de TV3 que se public¨® el domingo 12 de noviembre. Su autor, el redactor ??igo Dom¨ªnguez, que pas¨® siete d¨ªas enchufado a esta televisi¨®n, llegaba a una conclusi¨®n que se destacaba en el sumario: "La cadena p¨²blica catalana abraza la causa independentista en informativos, en programas c¨®micos suspendidos si no hay ganas de broma y hasta con propaganda para ni?os".

Josep Vil¨¤ Batlle me env¨ªa una ¡°r¨¦plica¡± de 1.088 palabras al art¨ªculo, que en su opini¨®n contiene, ¡°un c¨²mulo de falsedades y de medias verdades¡±. No aborda, sin embargo, m¨¢s que dos puntos. El relativo al programa humor¨ªstico Pol¨°nia, acusado de parcialidad por la mayor dureza de su parodia del Gobierno central, y por la suspensi¨®n de la emisi¨®n del 2 noviembre tras el encarcelamiento de parte del Govern. El lector cree, por su parte, que dichas cr¨ªticas demuestran que el periodista ¡°ha visto muy pocos programas de Pol¨°nia¡±, porque tambi¨¦n ha habido ¨¢cidas burlas, asegura, del Govern destituido. El se?or Vil¨¤ discute tambi¨¦n que el periodista juzgue la suspensi¨®n del programa el 2 de noviembre, ¡°una prueba de su falta de distancia, porque un c¨®mico no se casa con nadie, y menos con el poder¡±. Para el lector, ¡°habr¨ªa que precisar qui¨¦n es y qui¨¦n ostenta realmente ese 'poder' al que se refiere el se?or Dom¨ªnguez¡±.

Pero son las cr¨ªticas que se hacen a un espacio infantil dedicado a los "presos pol¨ªticos", las que le parecen m¨¢s ¡°err¨®neas". El periodista censura que el programa, ilustrado con fotos de los Jordis y de los exconsellers, redujera su veredicto sobre si son o no presos pol¨ªticos, a una cuesti¨®n de opiniones. ¡°?Pues qu¨¦ va a ser si no!¡±, protesta el lector. ¡°Son opiniones e interpretaciones distintas ante unos hechos que no admiten una ¨²nica lectura, ya que de la misma manera que, por ejemplo, hay muchos jueces y fiscales que no consideran que sean ¡°presos pol¨ªticos¡±, tambi¨¦n los hay, en la misma medida, que s¨ª los consideran como tales (¡­) El programa expone un tema, con sus dos puntos de vista, sin quedarse con ninguno de ellos, y despu¨¦s ser¨¢n los ni?os, con la ayuda de sus familias, quienes deber¨¢n acabar de hacerse una idea al respecto, en un sentido u otro. Eso es informar a los ni?os, y no hacer "propaganda para ni?os" como sostiene el se?or Dom¨ªnguez¡±.

??igo Dom¨ªnguez me ha enviado esta respuesta: ¡°Critico el programa Pol¨°nia precisamente por haberlo visto en el pasado y haberme pegado panzadas de re¨ªr con ellos. Pero hago notar que ahora me parecen parciales y que toman claramente partido por un bando pol¨ªtico. Eso mismo me lleva a cuestionar la decisi¨®n de suspender el programa el d¨ªa del encarcelamiento de los consellers. Una considerable parte de la poblaci¨®n catalana, -y muchos ver¨¢n Pol¨°nia-, puede creer justo ese arresto. Es evidente que ese d¨ªa notaron que el programa estaba de parte, y a¨²n m¨¢s el resto, que vio que estaba de la suya¡±.

Respecto al programa infantil, Dom¨ªnguez explica: ¡°Creo que est¨¢ muy claro lo que es un preso pol¨ªtico y estos [Jordis y exconsellers] no lo son. Se podr¨¢ pensar que es una decisi¨®n injusta o err¨®nea, pero eso es otra cosa. Cuestiono el hecho de que una televisi¨®n p¨²blica politice a menores simplificando asuntos complejos y presentando este hecho en concreto como una cuesti¨®n de opiniones, y eso ya es un punto de vista. Por eso creo que es propaganda, y es tendenciosa, dentro de una corriente de deformaci¨®n sem¨¢ntica interesada de muchos conceptos, que tiene un papel decisivo en el independentismo. Creo que explicar este asunto a un ni?o, en el caso de que le interese -y esto es otro debate nada inocente, suponer que les interesa o les tiene que interesar- es un embolado que corresponde a sus padres¡±.