Cuando James Cameron casi golpe¨® a Harvey Weinstein con su ?scar

James Cameron, el director que rompi¨® todos los r¨¦cords de la taquilla con Titanic (1997) y luego rompi¨® su propio r¨¦cord con su siguiente pel¨ªcula Avatar (2009) ha concedido una entrevista a la edici¨®n estadounidense de Vanity Fair en la que habla largo y tendido sobre sus dos pel¨ªculas m¨¢s taquilleras, pero se detiene tambi¨¦n en una jugosa an¨¦cdota con el productor Harvey Weinstein.

El altercado tuvo lugar el 23 de marzo de 1998, cuando la Academia celebraba la gala n¨²mero 70 de sus galardones en el Shrine Auditorium. Cuando la periodista Rebecca Keegan le pregunta a Cameron qu¨¦ recuerda de esa noche, el director responde: "Recuerdo que casi acab¨¦ pele¨¢ndome con Harvey Weinstein y golpe¨¢ndolo con mi Oscar".

?Los detalles? Estaban en el patio de butacas, presumiblemente en un corte publicitario, cuando comenz¨® la discusi¨®n. Y la gente a su alrededor pidi¨® al director y productor que lo dejasen cuando la m¨²sica empez¨® a sonar, lo que indicaba que la gala iba a volver al directo. "Aqu¨ª no, ?aqu¨ª no!", recuerda Cameron que les gritaba la gente.

Cuando la periodista pregunta los motivos del desencuentro, Cameron no entra en detalles pero repasa las causas en l¨ªneas generales: "Tiene que ver con Guillermo del Toro y lo mal que lo trataron en Miramax cuando hizo [el filme de ciencia ficci¨®n de 1997] Mimic. Harvey apareci¨® y empez¨® a hacerme la pelota y a hablarme de los buenos que eran ellos con los artistas, y tuve que leerle la cartilla y darle mi opini¨®n sobre c¨®mo se comportaban con los artistas dada la experiencia de mi amigo Guillermo. Y eso llev¨® al altercado".

?Pero qu¨¦ pas¨® entre Guillermo del Toro y Harvey Weinstein? El propio director mexicano habl¨® sobre ello durante una charla en el British Film Institute el pasado octubre. "Odi¨¦ aquella experiencia. Mi primera experiencia en la industria estadounidense fue casi la ¨²ltima, porque fue con los Weinstein y con Miramax. Tengo que decirte que dos cosas horribles me sucedieron a finales de los noventa: mi padre fue secuestrado y trabaj¨¦ con los Weinstein. S¨¦ cu¨¢l fue la peor¡­ el secuestro ten¨ªa m¨¢s sentido, al menos sab¨ªa lo que los secuestradores quer¨ªan".

Seg¨²n aclar¨® en la charla, los Weinstein le dejaron poco poder de decisi¨®n sobre su propia pel¨ªcula, aunque hay flecos que ¨¦l no permiti¨® que se tocasen. "Perd¨ª peleas sobre el reparto, perd¨ª en discusiones sobre el argumento, pero al menos puedo decir que Mimic fue, visualmente, cien por cien lo que yo quer¨ªa".

Pese a que Mimic abri¨® las puertas de Hollywood a Del Toro, la pel¨ªcula fue una decepci¨®n en taquilla y no recaud¨® en Estados Unidos su presupuesto de 30 millones de d¨®lares. A¨²n as¨ª, se rodaron dos nuevas entregas para el videoclub con las que Guillermo del Toro no tuvo relaci¨®n alguna.

Rematando la conversaci¨®n y aportando un toque de humor, James Cameron afirma que, dadas las circunstancias actuales, "hay mucha gente que hoy preferir¨ªa que hubiese seguido adelante con mi intenci¨®n de golpearlo".?