El ¡®ej¨¦rcito oscuro¡¯ y ¡®White Rose¡¯
Un ej¨¦rcito de hackers inform¨¢ticos obedece a un carism¨¢tico l¨ªder, el denominado White Rose, para influenciar la opini¨®n p¨²blica mundial
La guerra fr¨ªa ya no se hace con cabezas nucleares colocadas estrat¨¦gicamente en el tablero de ajedrez mundial como en el pasado. La batalla hoy se libra entre distintos malwear (programas maliciosos) ubicados en servidores estrat¨¦gicos capaces de influir en la opini¨®n p¨²blica y en los centros decisorios de procesos determinantes en las distintas ¨¢reas globales. Unos nuevos dominios que no se dividen en "zonas de influencia" como anta?o, ni tampoco se limitan a espacios geogr¨¢ficos, sino que se encuentran atomizadas en la diversidad global y desde ah¨ª ¡ªen la sombra¡ª, influyen en los centros econ¨®micos, financieros, monetarios y de igual forma, condicionan las procesos pol¨ªticos y electorales.
Todas estas nuevas din¨¢micas cibern¨¦ticas tienen un impacto en la vida de los seres y grupos humanos que fijan su opini¨®n individual y colectiva por la informaci¨®n recibida y por el estado de opini¨®n de los entornos sociales en los que se mueven. El grave problema se encuentra en que los procesos vitales del sistema internacional son condicionados y adulterados utilizando una informaci¨®n cocinada y falseada por esas redes oscuras, capaces de crear virtualmente una posverdad artificiosa para propiciar un relato y un imaginario falsario. Este nuevo ej¨¦rcito de hackers inform¨¢ticos obedece a un carism¨¢tico l¨ªder, el denominado por los servicios secretos occidentales como White Rose.
Un "ej¨¦rcito oscuro" que, seg¨²n las ¨²ltimas pesquisas, se ha ido nutriendo de dos perfiles bien distintos: por un lado, los hackers mercenarios que tuvieron su origen en algunas agencias estatales rusas y del KGB pero que finalmente consiguieron emanciparse. Por otro, excelentes programadores dentro de los grupos Anonymous antisistema, convencidos de estar haciendo la revoluci¨®n por la v¨ªa cibern¨¦tica provocando la ca¨ªda de los n¨²cleos de poder financiero en un ¡°capitalismo corrupto¡± embriagado en la globalizaci¨®n m¨¢s especulativa que, como estaba predestinado prof¨¦ticamente, no puede escapar antes o despu¨¦s de su derrumbe definitivo.
No es exagerado decir que las principales din¨¢micas que han movido al mundo en los ¨²ltimos a?os han pasado por ese ej¨¦rcito oculto entronizado eje de la nueva geoestrategia mundial de un sistema internacional en permanente desorden con tendencia irremisible al caos. Seg¨²n las ¨²ltimas pistas seguidas por los centros de inteligencia, parece claro que los servicios de estos profesionales deformadores de opini¨®n han sido contratados por los cambiantes intereses tanto del poder¨ªo ruso, como chino, ¡ªdependiendo de los escenarios geogr¨¢ficos espec¨ªficos o din¨¢micas concretas, trabajado incluso para ambos¡ª en operaciones encubiertas para propiciar la p¨¦rdida de influencia de Estados Unidos, de la Uni¨®n Europea y del "inter¨¦s occidental" en el escenario global.
El nuevo equilibrio planetario y las din¨¢micas globales pasan por la "cocina" de este nuevo y oscuro centro de poder desde que en 2010 los rusos pusieron en ¨®rbita tres sat¨¦lites de comunicaciones militares Rodnik-S, bautizados una vez en ¨®rbita como Kosmos 2496, Kosmos 2497 y Kosmos 2498 actualizados en 2014 con el cohete Rokot-KM lanzado desde el cosm¨®dromo de Plesetsk. En ese momento se iniciaba una nueva fase en el proceso totalizador planetario: la globalizaci¨®n 'Big Data'. Este avance permit¨ªa desde una nueva arquitectura de programaci¨®n crear perfiles multi series en redes bidimensionales para tener m¨¢s y mejor presencia e influencia en el ciberespacio.
Las manifestaciones del mundo ¨¢rabe de 2010-2013, conocidas como "primaveras ¨¢rabes", fueron la primera manifestaci¨®n de su poder en la opini¨®n global con un despliegue en las comunidades virtuales sin precedentes con m¨¢s de tres billones de impulsos y varios millones de perfiles interactuando para fortalecer la presencia rusa en esa regi¨®n. El problema y las divisiones vinieron cuando se pudo constatar que en los procesos de transici¨®n pod¨ªan decantarse por fortalecer la posici¨®n de los intereses occidentales, especialmente en Libia y Egipto, frente a los intereses rusos y de los dos hegemones ¨¢rabes. Para evitarlo, la estrategia de contenci¨®n fue elevar al ISIS al para¨ªso de las redes comenzando una estrategia de expansi¨®n virtual para, desde la Deep Web y la Dark Web (la red profunda y la red oscura), hacer realidad la yihad digital.
De esta forma, el "ej¨¦rcito oscuro" facilit¨® el espacio virtual a ese ej¨¦rcito cibern¨¦tico capaz de lanzar ataques, dar difusi¨®n, y reclutar a esos nuevos yihadistas dentro de los 50.000 contactos diarios que tienen desde ese momento. En 2012 se publicaba en los foros yihadistas Al-Fida y Sumukh al-Islam que todo creyente que deseara hacer la yihad electr¨®nica contra el enemigo era un gran muyahid¨ªn merecedor del para¨ªso para "descansar reposando su cabeza en el regazo del Profeta".
La crisis siria, no ofrece dudas respecto al potencial que supuso el nuevo Dark Army en la manipulaci¨®n para conseguir el descr¨¦dito de una oposici¨®n armada, instrumentalizada y manipulada por Occidente. De esta forma, la operaci¨®n lanzada en las redes a lo largo de finales de 2012, centraba su atenci¨®n en una campa?a claramente orquestada por los intereses rusos en connivencia con Ir¨¢n para desacreditar al Congreso Nacional Sirio ¡ªprincipal fuerza opositora acusada de estar manejado por Arabia Saud¨ª¡ª y se?alar que el vac¨ªo de poder con la previsible e inmediata ca¨ªda de Bachar el Asad dejaba Siria en manos del autodenominado Estado Isl¨¢mico. Esta campa?a con m¨¢s de 80.000 impulsos en las redes, mucho tuvo que ver con la cumbre de Mosc¨² de diciembre de 2014 y con el mantenimiento de un r¨¦gimen genocida que, meses antes, nadie hubiera dado nada por ¨¦l.
Sin embargo, a tenor de los informes del servicio secreto brit¨¢nico, las operaciones de mayor ¨¦xito?¡ª en un ejercicio combinado de envenenamiento saturado de la opini¨®n p¨²blica a trav¨¦s de "gusanos" (programas maliciosos que se multiplican) y falsos perfiles en redes sobre procesos estrat¨¦gicos, pol¨ªticos y electorales para restar peso e influencia al hist¨®ricamente denominado "inter¨¦s occidental"¡ª, fue el triunfo del Brexit y la llegada de Trump a la Casa Blanca. Dos acontecimientos que suponen un claro debilitamiento del eje transatl¨¢ntico beneficiando los intereses nacionalistas de Rusia y China, los dos principales apoyos que ha tenido White Rose en su transformaci¨®n de movimiento oscuro marginal a ser esa "mano negra invisible" capaz de condicionar el equilibrio del poder mundial.
S¨®lo as¨ª, se explica el sorpresivo triunfo del Brexit y de Trump con dos campa?as antisistema esperp¨¦nticas, sustentadas sobre grandes mentiras muchas veces repetidas por los "troyanos" lanzados desde servidores rusos ¡ªcomo ya est¨¢ claramente demostrado¡ª para crear usuarios m¨²ltiples que atomizaron y difundieron mensajes falsos consolidando un estado de opini¨®n que determin¨® sobremanera el voto. El objetivo ¨²ltimo es claro: propiciar el retraimiento de Estados Unidos y de Reino Unido en el mundo provocando cambios imprevisibles distorsionadores en ambos pa¨ªses y sembrando dudas sobre las dos democracias m¨¢s asentadas de Occidente, a la vez que el debilitamiento de la UE.
Una Uni¨®n Europea que, inducida por esta adulterada opini¨®n p¨²blica y ocupada por la gesti¨®n de un ¡°divorcio¡± incomodo, encuentra cada vez m¨¢s dificultades para asumir sus responsabilidades en la gobernanza global y a la vez, con la salida de Reino Unido, pierde el soporte central sobre el que se mantiene el pilar europeo dentro de Alianza Atl¨¢ntica. Por si fuera poco, una UE que tambi¨¦n debe atender focos de crisis internas con el auge de las posiciones nacionalistas, autoritarias y secesionistas ¡ªcomo en Catalu?a¡ª que, apoyadas por ese "ej¨¦rcito oscuro" de omnipresencia en las redes y desde hosting alojados en territorio ruso con perfiles multi serie, repiten una y otra vez las falsas razones para un movimiento de autodeterminaci¨®n en b¨²squeda de una supuesta rep¨²blica irredenta.
Este relato que podr¨ªa ser el argumento de una serie de ¨¦xito global es, probablemente, la cr¨®nica del nacimiento y consolidaci¨®n del nuevo poder oculto que domina el mundo.
Gustavo Palomares Lerma es catedr¨¢tico ¡°Jean Monnet¡± en la UNED y presidente del Instituto de Altos Estudios Europeos.
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