Que Espa?a funcione
Se ha roto el v¨ªnculo entre crecimiento econ¨®mico y progreso social y es necesario restaurarlo
Hay algo en Espa?a que no funciona, que debemos arreglar. Se ha roto el v¨ªnculo entre crecimiento econ¨®mico y progreso social. Nuestro pa¨ªs crece en este momento por encima de la media europea, y sin embargo el 70% de los hogares, seg¨²n el Informe FOESSA, no percibe efectos positivos de la recuperaci¨®n de la actividad econ¨®mica. Es m¨¢s, a 13 millones de personas (el 28% de la poblaci¨®n espa?ola) este crecimiento no les dice nada: siguen en riesgo de pobreza o exclusi¨®n social.
En esta brecha entre lo que el gobierno subraya (el PIB crece y se crea empleo) y lo que la mayor¨ªa experimenta (mi situaci¨®n no mejora), hay dos cuestiones clave: la calidad del empleo y la evoluci¨®n de los salarios. Ambas dimensiones se han visto profundamente erosionadas por las ¡°pol¨ªticas estructurales¡± aplicadas durante la crisis, con la excusa de favorecer la recuperaci¨®n.
Sin embargo, la devaluaci¨®n salarial (que ha aumentado la desigualdad y la pobreza) no es la causa del crecimiento actual, como sugiere el gobierno. El Informe Anual del Banco de Espa?a identifica los principales determinantes de este crecimiento: la pol¨ªtica monetaria del BCE, los precios del petr¨®leo, el tir¨®n del turismo y una pol¨ªtica fiscal t¨ªmidamente expansiva en 2015-2016 explican m¨¢s de dos terceras partes. Las exportaciones tambi¨¦n est¨¢n contribuyendo al crecimiento, pero no m¨¢s que en la anterior fase expansiva, ni como consecuencia de la reducci¨®n de los costes laborales (que se han trasladado de forma limitada a los precios).
La investigaci¨®n acad¨¦mica apunta m¨¢s bien en sentido contrario: los estudios que han analizado el ¡°crecimiento impulsado por los salarios¡± prueban repetidamente que un aumento del peso de los salarios en el PIB no s¨®lo no pondr¨ªa en peligro el crecimiento y la creaci¨®n de empleo, sino que los reforzar¨ªa. Un buen ejemplo es el trabajo de Onaran y Obst Wage-led growth in the EU15 member-states: the effects of income distribution on growth, investment, trade balance and inflation, publicado en el Cambridge Journal of Economics en 2016.
Los salarios son un coste para las empresas, pero tambi¨¦n son el origen principal de su demanda, especialmente si las subidas salariales se concentran en los salarios bajos, con mayor propensi¨®n marginal al consumo. Los mencionados estudios evidencian que los efectos positivos de las subidas salariales superan en la mayor¨ªa de pa¨ªses ¡ªincluido Espa?a¡ª a los posibles efectos negativos sobre la competitividad y las exportaciones, o sobre los beneficios empresariales y la inversi¨®n. De hecho, ¨¦sta crecer¨ªa, porque una potente raz¨®n de las empresas para ampliar su capacidad productiva es una demanda estable. El problema de los salarios en Espa?a no es por tanto que su aumento ponga en peligro la creaci¨®n de empleo, sino su bajo crecimiento.
Primero, porque impide que la recuperaci¨®n llegue realmente a la mayor¨ªa social. Segundo, porque sin un incremento suficiente de los salarios, el crecimiento seguir¨¢ siendo fr¨¢gil y dependiente de los vientos de cola. Y una tercera raz¨®n tiene que ver con la reproducci¨®n del modelo de crecimiento centrado en sectores de bajo valor a?adido ¡ªcomercio, transporte, hosteler¨ªa y construcci¨®n¡ª a la que asistimos. Los bajos salarios y los empleos precarios son el reflejo de este modelo, pero a su vez lo retroalimentan. En una econom¨ªa donde los salarios crecen, el PIB es m¨¢s din¨¢mico y tambi¨¦n son mayores los incentivos para la innovaci¨®n y la inversi¨®n, y por tanto la productividad y la b¨²squeda de factores de competitividad alternativos a los costes bajos.
Este Gobierno se muestra incapaz de hacer que Espa?a funcione, incapaz de restablecer cierto v¨ªnculo entre crecimiento econ¨®mico y progreso social. Pero no hay por qu¨¦ resignarse. La transformaci¨®n del modelo de crecimiento es posible con las pol¨ªticas adecuadas: pol¨ªticas industriales activas para reorientar la producci¨®n hacia sectores de futuro, impulso de la transici¨®n energ¨¦tica, pero tambi¨¦n una visi¨®n completamente diferente del papel de los salarios en la econom¨ªa, para que los incrementos de productividad se capten por las rentas del trabajo y no s¨®lo por los beneficios.
En estos ¨²ltimos a?os hemos escuchado hasta la saciedad el discurso de las ¡°reformas estructurales¡±. Pero lo que se est¨¢ poniendo de manifiesto es que, en realidad, ¨¦stas s¨®lo serv¨ªan para apuntalar el viejo modelo. ?Y si la primera ¡°reforma estructural¡± que de verdad necesitamos para que Espa?a funcione es el impulso de los salarios y una aut¨¦ntica ofensiva contra la precariedad?
Nacho ?lvarez es Secretario de Econom¨ªa de Podemos y profesor de Econom¨ªa en la UAM.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.