17 disparates que cometemos todos los d¨ªas con el espa?ol
En boca cerrada no entran moscas. Un consejo que los espa?oles, pasionales que somos, no tenemos en cuenta. Lo de dar patadas al diccionario es ya una opci¨®n de cada uno
Somos animales sociales, nos pasamos el d¨ªa hablando, y es comprensible que en nuestra desatada verborrea de vez en cuando se cuelen deslices. Otra cosa es ir por ah¨ª d¨¢ndole constantes patadas al diccionario, empleando con orgullo acad¨¦mico expresiones y palabros que en realidad constituyen una aberraci¨®n. Hemos seleccionado algunos de los m¨¢s habituales, y le hemos pedido a Juan Romeu, doctor en Filolog¨ªa Hisp¨¢nica por la Universidad Complutense y el CSIC, colaborador de la RAE y divulgador en la web sinfaltas.com, que nos indique por d¨®nde hacen aguas y cu¨¢l ser¨ªa la alternativa correcta.
Encima m¨ªo (o detr¨¢s tuyo)
Hay gente muy posesiva, qu¨¦ le vamos a hacer. Sufren el complejo de ET: tienen su tel¨¦fono, su casa y su encima, como si el vac¨ªo que se cierne sobre su cabeza les perteneciera. Tambi¨¦n son generosos, y opinan que lo que tienes detr¨¢s es tuyo. Por desgracia, no es as¨ª. ¡°Se recomienda evitar el uso de tuyo o m¨ªo con adverbios que no admitan tu o su delante¡±, decreta Romeu. ¡°As¨ª, como no se puede decir tu detr¨¢s o mi encima, tampoco se considera v¨¢lido decir detr¨¢s tuyo o encima m¨ªo (y mucho menos detr¨¢s tuya y encima m¨ªa). Hay que decir detr¨¢s de ti y encima de m¨ª. En cambio, son v¨¢lidos al lado tuyo o en contra tuya porque se puede decir a tu lado o en tu contra¡±. No obstante, en su web matiza que si podemos decir a tu lado, tampoco ser¨ªa un crimen decir a tu cerca.
Contra m¨¢s
Contra m¨¢s lo escuchamos, m¨¢s nos subimos por las paredes. Pongamos un ejemplo: Contra m¨¢s practico, mejor me sale. Estamos haciendo referencia al hecho de practicar mucho ¡ªcuantificando esa pr¨¢ctica¡ª, as¨ª que lo l¨®gico (y correcto) ser¨ªa utilizar cuanto m¨¢s. ¡°Se justifica porque hay un sentido de oposici¨®n, pero no es un contexto en el que quepa la preposici¨®n contra. Tampoco se aceptan variantes como cuantim¨¢s, contrim¨¢s, contim¨¢s¡ S¨ª se acepta el uso de mientras (en el habla coloquial) y el de entre, t¨ªpico de zonas como M¨¦xico y Centroam¨¦rica¡±, arguye el fil¨®logo. El contra m¨¢s tambi¨¦n est¨¢ muy extendido en el ¨¢rea de Mujeres, Hombres y Viceversa.
Bizarro
Esta es muy buena, porque quien lo usa quiere d¨¢rselas de cool y est¨¢ quedando como todo lo contrario¡ por lo menos a d¨ªa de hoy. Bizarre en ingl¨¦s significa ¡°raro¡±, pero si usas bizarro para describir ese cacof¨®nico grupo de rock que has o¨ªdo en Radio 3 estar¨¢s diciendo que es ¡°valiente¡±, que es lo que significa en espa?ol (lo cierto es que osad¨ªa no les falta a algunos). Aun as¨ª, parece que el pulso entre modernos y la RAE ya tiene ganador. Lo explica Romeu: ¡°En su origen, bizarro en italiano significaba ¡®iracundo¡¯, lo que pas¨® a ¡®raro¡¯ o ¡®fant¨¢stico¡¯ en italiano, pero a ¡®valiente¡¯ en espa?ol. El significado de ¡®raro¡¯ del italiano lleg¨® al franc¨¦s y al ingl¨¦s, y hace no mucho al espa?ol, donde los pocos que conoc¨ªan el t¨¦rmino como ¡®valiente¡¯ dieron la voz de alarma. La RAE empez¨® censurando el uso de bizarro como ¡®raro¡¯, pero parece que, por la extensi¨®n del uso, ya lo va a admitir¡±.
Hay a veces que¡
Propio de quienes piensan que enrevesar el lenguaje les hace m¨¢s cultos. Hay veces que me despierto sobresaltado o A veces me despierto sobresaltado, pero las dos cosas juntas, no, por favor. ¡°No es correcto porque haber necesita un nombre como complemento (hay leche). Decir Hay a veces que me da por re¨ªr ser¨ªa como decir Hay de vez en cuando que me da por re¨ªr, lo cual tiene bastante poco sentido¡±, sentencia Romeu.
Ambos dos
Nuevo ejemplo de lenguaje pretenciosamente rococ¨® que deja a la altura del bet¨²n a quien lo usa. Como explica la RAE, ambos significa ni m¨¢s ni menos que ¡°los dos, uno y otro¡±. Si queremos decir que dos personas se fueron de viaje, con decir ambos ya estaremos dejando claro que los dos hicieron las maletas. ¡°Aunque algunas redundancias se pueden aceptar porque aportan algo, en un caso como ambos dos no parece que ambos aporte hoy nada que no tenga ya dos, por lo que es preferible o decir ambos o decir los dos¡±.
Cuanto menos
¡°En casos como La situaci¨®n es, cuanto menos, complicada se debe usar cuando menos porque lo que se quiere expresar es ¡®en la situaci¨®n o en el momento en el que menos¡¯, no ¡®cuantas menos veces¡¯. De igual manera que usar¨ªamos cuando m¨¢s y no cuanto m¨¢s en Dice muchas tonter¨ªas y, cuando m¨¢s (las dice), con dos copas de vino, no debemos usar cuanto menos en casos como el anterior¡±, expone el divulgador, autor tambi¨¦n del libro Lo que el espa?ol esconde.
A nivel de
Se escucha hasta en el lenguaje period¨ªstico: ¡°A nivel de vestuario, los jugadores est¨¢n con el m¨ªster¡±. Solo se puede usar cuando hablamos, de hecho, de niveles. Como explica Romeu, ¡°no se debe abusar de a nivel de cuando no hay niveles o grados de una escala, sino simplemente diferentes ¨¢reas. As¨ª, se puede hablar de a nivel de equipo, frente a nivel individual, pero tiene menos sentido hablar de a nivel de vestuario, sobre todo cuando simplemente se quiere decir en lo que respecta a o en lo que ata?e a¡±.
Preveer
Nuestros sufridos o¨ªdos lo han escuchado hasta en forma de doloroso gerundio: preveyendo. Pocas cosas requieren una explicaci¨®n m¨¢s sencilla: prever significa ¡°ver con anticipaci¨®n¡±, y se conjuga exactamente igual que ver. Y todo porque tendemos a confundirlo con proveer. El experto nos ilustra acerca del origen de este disparate. ¡°Aunque los dos verbos vienen de vid¨¥re y podr¨ªan haber terminado en -veer, en prever (igual que en ver) se dio un paso m¨¢s en la evoluci¨®n y se simplific¨® la doble e. En cambio, proveer se qued¨® con la doble e. Por eso, prever se debe conjugar como ver (prev¨ª, previ¨®, previendo¡) y proveer como leer (prove¨ª, provey¨®, proveyendo¡). Como curiosidad, a¨²n se puede encontrar veer como forma desusada en el diccionario¡±.
La l¨ªbido
Si la sueltas as¨ª acentuada en los proleg¨®menos de una escaramuza sexual, tu amante pensar¨¢ que, m¨¢s que estar excitado, te ha dado un pasmo. Porque l¨ªvido (esdr¨²jula y con uve) significa ¡°intensamente p¨¢lido¡± o tambi¨¦n ¡°amoratado¡±. ¡°El adjetivo l¨ªvido ha hecho que se pronuncie libido (¡®deseo sexual¡¯) tambi¨¦n como esdr¨²jula (l¨ªbido), aunque en verdad es llana¡±, indica Romeu. De una vez por todas: libido es tan llana como gemido o lamido. ¡°La raz¨®n de que se pronuncien distintas se debe a que en lat¨ªn la segunda i de liv?dus (de donde viene l¨ªvido) era breve, mientras que la de lib¨©do era larga¡±, aclara.
Totalmente gratuito
Si es gratuito, no lo es a medias. Seg¨²n Romeu, ¡°el espa?ol est¨¢ lleno de supuestas redundancias que a veces pueden servir para dar ¨¦nfasis o para precisar. Pasa con totalmente gratuito, que puede servir para aclarar que algo es gratis de verdad y no en apariencia, y en casos como lleno absoluto, otra alternativa, volver a repetir, concierto de m¨²sica, arder en llamas¡ En espa?ol nos encanta dejar claro lo que queremos decir. De hecho, hay redundancias exigidas por la sintaxis, como la concordancia (Los hombres j¨®venes vinieron), la duplicaci¨®n de pronombres (a m¨ª me gusta), la doble negaci¨®n (no he ido nunca) o los casos de subir arriba, entrar dentro¡¡±.
Surgi¨® efecto
Estos engendros se conocen como malapropismos, y son muy comunes. ¡°Se producen cuando una determinada expresi¨®n contiene una palabra que nos resulta menos familiar que otra a la que se parece (se dice que son par¨®nimas). As¨ª, como surtir es m¨¢s rara que surgir, hay quien dice surgir efecto¡±. Esta expresi¨®n comparte desfachatez con estar en el candelabro o rebanarse los sesos. ¡°Uno de estos casos, que es el uso de virulento (relacionado con los virus) por violento, est¨¢ muy extendido. Se ha preferido la palabra rara, seguramente por expresividad¡±, a?ade Romeu.
En base a
Aqu¨ª base se utiliza con el significado de fundamento, t¨¦rmino que no casa nada bien con la preposici¨®n a. ¡°Lo normal es con base en¡±, opina el fil¨®logo. ¡°Por eso, dependiendo del contexto, se recomienda usar con base en o bas¨¢ndonos en o a juzgar por, sobre la base de, de acuerdo con...¡±. Su mejor sonoridad se impone en el uso cotidiano a su falta de sentido, y en eso el experto la compara a otras que tampoco lo tienen, como a medida que o al fin y al cabo.
Asuntos a tratar
Esta construcci¨®n y otras similares llevan ya un tiempo infiltradas en el espa?ol y est¨¢n cada vez m¨¢s asentadas. ¡°Hay un uso de a raro (aqu¨ª por calco del franc¨¦s) y se debe evitar, pero el problema es que la construcci¨®n es c¨®moda. La RAE recomienda evitar expresiones como temas a tratar, ejemplo a seguir. Mejor asuntos para tratar o, sencillamente, los asuntos que hay que tratar. "Pero va a ser dif¨ªcil que se dejen de usar¡±, lamenta el experto. Y pone otros ejemplos: ¡°Construcciones como camisa a rayas o falda a cuadros se consideran ahora tan v¨¢lidas como camisa de rayas o falda de cuadros. As¨ª que Hombres G cantaba bien cuando dec¨ªa "voy a comprarme un jersey a rayas". Antes se desechaban por ser calcos del franc¨¦s, pero hoy se van aceptando los distintos sentidos que la preposici¨®n a gana en espa?ol, lo que hace pensar que las construcciones del tipo de asuntos a tratar tambi¨¦n se aceptar¨¢n¡±.
Y dem¨¢s
Anta?o dec¨ªamos etc¨¦tera, hasta que lleg¨® Jes¨²s Gil y, de un manotazo, implant¨® el y tal. Ahora ambas opciones han ca¨ªdo en desuso en favor de una expresi¨®n en boga entre los m¨¢s j¨®venes. Pr¨¢cticamente todas sus frases terminan con y dem¨¢s, incluso cuando no haya nada m¨¢s que contar: He tenido que bajar al perro y dem¨¢s, Fui a hacer unas fotocopias y dem¨¢s¡ Como si quisieran enfatizar lo atareados que est¨¢n. ¡°Las muletillas son un cl¨¢sico del espa?ol¡±, dice Romeu. ¡°Ahora se usa en plan, ?sabes? y, por lo que se ve, tambi¨¦n y dem¨¢s. Aportan poco, pero son necesarias en la comunicaci¨®n oral. Las que insin¨²an que hay m¨¢s de lo que se ha dicho aunque no lo haya son muy ¨²tiles para rellenar y hacernos los interesantes. Hay otras frecuentes como y eso o y esas cosas. Por supuesto, en el lenguaje cuidado es mejor evitar todo lo superfluo o poco informativo¡±.
Venir a ver esto
Recientemente, se ha hecho viral la imagen de un cartel en un ba?o en el que pone: Dejar limpio el inodoro. Como advierte Romeu, ¡°en indicaciones generales, como carteles que no van dirigidos a nadie en particular, se admite el infinitivo. Es como si pusiera: Hay que dejar limpio el inodoro¡±. Otra cosa es decir a los compa?eros de trabajo Venir a ver esto. ¡°Es incorrecto porque estamos usando un infinitivo cuando es un contexto en el que hay que usar el imperativo¡±. Para no espantar a nadie, es mejor emplear Venid a ver esto.
No lo caigas
No es tan habitual, pero lo hemos escuchado: le damos un vaso a un ni?o para que lo lleve al comedor y le decimos: Ten cuidado, no lo caigas. Si lo que nos preocupa es que se caiga el vaso, lo recomendable ser¨ªa Ten cuidado, no dejes que se caiga. El ni?o podr¨ªa caerse ¨¦l o tirar el vaso, pero en ning¨²n caso caerlo. ¡°Son usos muy bonitos, llamados causativos, de determinados verbos. No se pueden considerar incorrectos, porque los usos causativos han variado a lo largo del tiempo, pero se recomienda evitarlos en el espa?ol general, ya que puede haber mucha gente que no los entienda. ?Pero son preciosos!¡±, ironiza el experto.
Lo primero, decir que¡
Romeu reconoce que es una de las cosas que m¨¢s le molestan del habla actual. ¡°Es el uso independiente del infinitivo. Lo correcto es incluir un elemento que introduzca ese infinitivo: Me gustar¨ªa decir que¡, Hay que decir que¡, Ser¨ªa conveniente decir que¡ Es una forma de mostrar esmero a la hora de usar la lengua¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.