La 'plumofobia' ataca las redes sociales en forma de 'unfollow'
El rechazo a quienes cuestionan los estereotipos de g¨¦nero afecta a Instagram. El ¡°gente sin pluma¡± o ¡°afeminados, no¡± es una constante en las aplicaciones gays de ligoteo
Hace pocas semanas la firma de ropa holandesa Suitsupply lanz¨® una campa?a en redes sociales para promocionar su nueva colecci¨®n veraniega mediante im¨¢genes que mostraban a hombres en actitud cari?osa. Pero a pesar de que las instant¨¢neas ten¨ªan muy poco de er¨®ticas (los modelos est¨¢n vestidos en la mayor¨ªa de fotos: un dato a tener muy presente), en los d¨ªas posteriores las redes sociales se llenaron tanto de comentarios a favor como en contra de dicha estrategia publicitaria.
Precavidos por lo que podr¨ªa pasar (en 2016 ya recibieron un aluvi¨®n de cr¨ªticas por lanzar una campa?a totalmente opuesta a esta en la que gratuitamente cosificaron la figura de la mujer para aumentar sus ventas), Suitsupply de antemano decidi¨® que en pa¨ªses como Rusia o los Emiratos ?rabes no pudiesen verse estas im¨¢genes. Pero ni con esas consiguieron evitar algo muy llamativo: a las pocas horas de hacerse p¨²blicas, 12.000 de sus usuarios en Instagram decidieron dejar de seguirles porque imaginamos que se sintieron ofendidos al ver dos hombres trajeados alejados del prototipo del t¨ªpico macho alfa. La homofobia sigue andando a sus anchas aunque venga dada por una acci¨®n tan aparentemente inocente como la del unfollow.
"12.000 de sus usuarios en Instagram decidieron dejar de seguirles porque imaginamos que se sintieron ofendidos al ver dos hombres trajeados alejados del prototipo del t¨ªpico macho alfa"
Y sino que se lo digan a Jens de Fries, un dise?ador de juegos de mesa esculpido en el gimnasio con m¨¢s de 180.000 seguidores en Instagram. Hace poco, con tal de ironizar sobre los prejuicios de la masculinidad, decidi¨® subir a la red social una serie de im¨¢genes en las que se mostraba llevando un cors¨¦ o unos meros pendientes que no acabaron de entender parte de sus seguidores, en su mayor¨ªa homosexuales. 1.600 personas decidieron dejar de seguirle, ¡°sobre todo de Brasil y Estados Unidos¡±. Pero tal como nos cuenta lo que m¨¢s le impact¨® no fue el n¨²mero de unfollows que recibi¨®, sino que ¡°hubo gente que incluso me escribi¨® para preguntarme si me sent¨ªa mujer. Yo lo hice como una simple provocaci¨®n, pero lo que no esperaba es que tantas personas estuvieran tan desinformadas y perdidas sobre cuestiones de g¨¦nero¡±.
Tras aquello de Fries decidi¨® impulsar el hashtag #notwrong precisamente para denunciar las normas de g¨¦nero preestablecidas, abriendo un debate muy interesante sobre el que hemos querido preguntar a Gabriel J. Mart¨ªn, el mayor exponente en nuestro pa¨ªs de la psicolog¨ªa afirmativa gay, quien esta misma semana publica en Roca Editorial Sobrevivir al ambiente, su tercer libro.
¡°Dentro de las diferentes expresiones de la homofobia hay una muy particular, la que se conoce en la calle como plumofobia, que se refiere al rechazo hacia quienes, en su comportamiento, cuestionan los estereotipos de g¨¦nero. Detr¨¢s de todo ello hay mucho machismo. El machismo, como ideolog¨ªa, sostiene que la mujer es inferior al hombre y que los comportamientos femeninos son menos valiosos que los masculinos. Para muchos, incluso para no pocos homosexuales, no s¨®lo es m¨¢s valorable un hombre con comportamientos estereotipadamente masculinos sino que, adem¨¢s, entienden que un hombre que presenta un comportamiento m¨¢s femenino o se pone complementos de mujer pierde valor como hombre. Lo que hay detr¨¢s del rechazo al homosexual afeminado o al que se pone un cors¨¦ es machismo puro y duro¡± argumenta. No hace falta m¨¢s que darse una vuelta por las aplicaciones de ligoteo gays para darse cuenta de que el ¡°gente sin pluma¡± o ¡°afeminados, no¡± es una constante.
"Dentro de las diferentes expresiones de la homofobia hay una muy particular, la que se conoce en la calle como plumofobia, que se refiere al rechazo hacia quienes, en su comportamiento, cuestionan los estereotipos de g¨¦nero. Detr¨¢s de todo ello hay mucho machismo"
Tanto Mart¨ªn como de Fries coinciden en que ¡°los seres humanos somos el resultado de la educaci¨®n que hemos recibido, y aunque no nos demos cuenta nos han educado de una forma machista¡±. Aunque no todo est¨¢ perdido como el psic¨®logo advierte: ¡°Cada vez se habla m¨¢s sobre g¨¦nero y eso es con lo que debemos de quedarnos. El n¨²mero de personas que han dejado de seguir tanto a Suitsupply como a Jens en realidad es peque?o. ?Imagina qu¨¦ hubiese ocurrido hace veinte a?os! Las actitudes hom¨®fobas siguen siendo preocupantes pero, afortunadamente, cada vez es mayor el n¨²mero de personas que las encuentran rid¨ªculas. Es bueno que sigamos trabajando para que sean mayor¨ªa los ciudadanos que consideran absurdos tanto los estereotipos de g¨¦nero como la homofobia¡±.
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