Esto es lo que pasa cuando te obsesionas con gustar a todo el mundo

Ni acomplejada, ni sometida, ni pendiente de dietas, clich¨¦s y comentarios ¡ªal menos, seg¨²n sus publicaciones, eso es lo que parece¡ª King convirti¨® la sinceridad o la crueldad o la falta de respeto, seg¨²n se mire, en una campa?a contra el acoso el Internet. Y le sali¨® muy bien. Cre¨® un v¨ªdeo en el que, seg¨²n los insultos, iba modificando con ayuda de Photoshop las partes del cuerpo con las que se met¨ªan sus trolls. El resultado es una mujer deforme e imposible y un mensaje tajante: no se puede gustar a todo el mundo (ni hay por qu¨¦ querer gustarle a todo el mundo).

Junto al v¨ªdeo, la bloguera escribi¨® este mensaje: "Si cambiamos nuestro cuerpo por cada troll, escuchamos a cada cibermat¨®n, ser¨ªamos monstruos. Ya se tengan 23 seguidores o tres millones, NADIE deber¨ªa tener que lidiar con el habitual odio online. Mirad mis stories destacadas para ver c¨®mo acab¨® mi cuerpo as¨ª. #TrollingIsUgly No lo hagas". El v¨ªdeo termina avisando sobre el peligro para la salud mental y f¨ªsica de quien sufre ciberacoso.

En Espa?a, los casos de bullying en Internet a menores ha aumentado un 65% en los ¨²ltimos cinco a?os, suman ya m¨¢s de 6.500. De los 824 casos en 2012 se pas¨® a 1.364 registrados entre enero y octubre del pasado, seg¨²n los ¨²ltimos datos que facilit¨® el Ministerio del Interior y recogidos en el Sistema Estad¨ªstico de Criminalidad. Estr¨¦s y depresi¨®n son las principales consecuencias del ciberacoso, de forma extrema, pueden llegar al suicidio, sobre todo en la adolescencia, cuando todav¨ªa la personalidad no ha terminado de formarse y las cr¨ªticas afectan especialmente.?

Chessie King lo tuvo claro: frente al acoso solo cabe la respuesta constructiva. Y nada con m¨¢s potencia que una imagen: la del monstruo en el que nos convertir¨ªamos si intent¨¢semos agradar a cada una de las personas que nos critican. King condens¨® en poco m¨¢s de un minuto la confianza en s¨ª misma que deja ver en cada uno de sus posts. Y eso, para sus seguidores, se ha convertido en un regalo.