Tonter¨ªa completa

Lo sucedido en Madrid, de ser una hip¨®tesis, parecer¨ªa inveros¨ªmil, incomprensible bajo las leyes aristot¨¦licas. Pero es real. Y eso lo convierte en un espect¨¢culo fascinante; por supuesto de locos, pero fascinante. Cifuentes es un cad¨¢ver pol¨ªtico con la fecha de caducidad por definir, entre la dimisi¨®n y la censura. El PP, asumido el balance de da?os, ya s¨®lo maniobra para desgastar a Ciudadanos, a quienes retrata como c¨®mplices de la izquierda a la que van a regalar Madrid. Y con la derecha en pleno duelo al sol, explorando sus trampas y contradicciones, Podemos y PSOE parecen decididos a dilapidar la mejor ventana de oportunidad en Madrid para la izquierda en d¨¦cadas. Las ¨²nicas buenas noticias para Cifuentes provienen todas de ellos. Incluso la moci¨®n de censura, que parec¨ªa s¨®lida, ahora se ve gaseosa.

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Iglesias zanja con un acuerdo entre Errej¨®n y Espinar la crisis en Podemos

Qui¨¦n es qui¨¦n en la crisis de Podemos

Claro que generalizar la izquierda no hace justicia a los m¨¦ritos de cada cual. Los errores de PSOE y Podemos son desiguales. La oferta a Carmena sucedi¨® meses atr¨¢s, en un tono informal, e inspira ternura. Franco deb¨ªa saber que hay cosas que es mejor no decir; como Bescansa deb¨ªa saber que hay cosas que es mejor no documentar. Pero no es lo mismo un coqueteo infantil con la rival que una conspiraci¨®n bescansoerrejonista para derrocar a Iglesias. Por dem¨¢s, ah¨ª queda la iron¨ªa chusca de ver en la trinchera del Frente Anticifuentes a Errej¨®n, que arrastra la sombra de su beca en M¨¢laga, y a Franco, con un curr¨ªculum tuneado. Parecen, en fin, inspirarse en la Ley de Murphy. Pero Podemos no s¨®lo ha cometido un desliz, sino un error may¨²sculo con la bronca de las primarias de Madrid en v¨ªspera de la moci¨®n. Iglesias dijo ¡°ni media tonter¨ªa¡± y acert¨®: ha sido una tonter¨ªa completa.

Naturalmente acaban de convertir en trending topic la imagen del pacto de Pablo, ??igo y Ram¨®n bajo el cartel de NOSOTRAS; toda una met¨¢fora de la impostura de ese pacto ficticio, con un lenguaje gestual de r¨¦quiem. Esa impostura otra vez delata la distancia en Podemos entre la ret¨®rica y la realidad. De hecho, su ret¨®rica ya ni siquiera resulta seductora y amenazante, como en aquellos tiempos de asaltar los cielos, sino cada vez m¨¢s rid¨ªcula. Ya sucedi¨® al anunciar Iglesias y Montero que iban a ser padres con un comunicado que parec¨ªa un gag de Monty Python sobre Paulo Coelho: ¡°Pablo y yo hemos emprendido un camino que en los pr¨®ximos meses revolver¨¢ nuestras emociones, transformar¨¢ mi cuerpo y llenar¨¢ nuestras vidas de belleza¡±, mientras se desencadenaba un gran choteo en las redes sobre los nombres de los ni?os: Pabla e Ireno, Vladimira y Fidel, Cersei y Jon Nieve, o mejor consultar a las bases¡­ Podemos cada vez genera menos editoriales y m¨¢s memes.

El PSOE s¨ª que puede reprocharse no aprovechar la decadencia de Podemos, mientras ellos sufren una fuga masiva hacia Ciudadanos salvo en sus propios sondeos triunfales. Seg¨²n Metroscopia, casi un mill¨®n de votos. Y esto con Podemos acumulando errores desde el no a S¨¢nchez, el pacto con IU, Vistalegre II y el proc¨¦s de Catalu?a, donde Colau es otro agujero negro. La izquierda est¨¢ a la deriva. Es l¨®gico que Cifuentes, que no puede esperar mucho de Rajoy o Rivera, ponga todas sus esperanzas en PSOE y Podemos. Hay motivos para confiar en que sean capaces de estropearlo todo.