Los riesgos y escollos de un periodista
Los informadores de EL PA?S Pablo Ferri y Pilar Bonet desgranan las trabas a las que se enfrentan en M¨¦xico y Rusia, respectivamente, para ejercer su oficio
Los medios de comunicaci¨®n deben garantizar la transparencia y rendici¨®n de cuentas de los Gobiernos y contar la realidad social tal y como es. Sin embargo, los periodistas se topan con graves dificultades a la hora de realizar su trabajo en muchos pa¨ªses, bien por la censura incoada desde los poderes p¨²blicos, bien porque sus vidas se ven amenazadas por grupos criminales. Los periodistas de EL PA?S no son ajenos a estos supuestos. Este jueves, D¨ªa Mundial de Libertad de Prensa, Pilar Bonet, corresponsal en Mosc¨², y Pablo Ferri, periodista en la delegaci¨®n de M¨¦xico, relatan las dificultades de trabajar en estas regiones.
M¨¦xico fue, en 2017, el segundo pa¨ªs m¨¢s mort¨ªfero del mundo para los periodistas, seg¨²n Reporteros sin Fronteras: 11 informadores perdieron la vida. ¡°Del m¨¢s de medio centenar de periodistas mexicanos que he conocido trabajando en los estados, no conozco a uno que no haya sido amenazado, presionado o amedrentado¡±, apunta Ferri, que a?ade que la libertad de prensa ¡°es un concepto tan extra?o a la clase pol¨ªtica mexicana, como la reflexi¨®n a las redes sociales¡±. Desde la capital mexicana reconoce que la presi¨®n es m¨¢s sutil y que donde m¨¢s se percibe es en otros estados, como Guerrero o Sinaloa; sin embargo, generaliza la afirmaci¨®n de que el periodismo en M¨¦xico ¡°est¨¢ atrapado entre el capricho de la clase pol¨ªtica y el fuego de los grupos criminales¡±.
El periodista asevera que no hay informador en el pa¨ªs que no sepa lo que es el chayote, el soborno, pues ¡°pol¨ªticos locales fidelizan voluntades a base de dinero con m¨¢s o menos descaro¡± y los medios de comunicaci¨®n surgen y desaparecen seg¨²n el inter¨¦s de los candidatos y gobernantes. La profesi¨®n est¨¢ muy mal pagada, con lo que ese soborno se convierte en muchos casos en ¡°el principal sustento¡± de los trabajadores. ¡°El periodista se convierte as¨ª en un mercenario, ajeno a la misi¨®n de informar, incapacitado para el ejercicio cr¨ªtico¡±, valora el redactor.?
Las regiones que est¨¢n dominadas por grupos criminales, que se sirven de cultivos de amapolas, marihuana u otro tipo de recursos naturales, ¡°marcan la l¨ªnea editorial de los medios¡±, seg¨²n denuncia Ferri. La b¨²squeda de informaci¨®n y fuentes se convierte en un trabajo dificultoso, pues el miedo de la poblaci¨®n a molestar a estos delincuentes provoca la autocensura, ¡°que no es otra cosa que la normalizaci¨®n del miedo¡±, se?ala.
La impunidad con la que act¨²an pol¨ªticos corruptos y grupos criminales se ampara en el estado de paralizaci¨®n de la justicia mexicana, que funciona ¡°a duras penas¡±, seg¨²n Ferri. Incide en que ¡°el mecanismo de protecci¨®n a periodistas de la Secretar¨ªa de Gobernaci¨®n ha demostrado reiteradamente su inutilidad¡±, pues ¡°no tienen medios, ni capacidad para proteger a todos los periodistas amenazados del pa¨ªs¡±.
Pilar Bonet se enfrena en Mosc¨² a ¡°la cerraz¨®n o la mentira de las entidades oficiales a la hora de confirmar informaciones sensibles que no son del agrado de la administraci¨®n¡±. Habla de la presencia del pa¨ªs en el Este de Ucrania o de conocer el n¨²mero de v¨ªctimas en los ataques que se producen en Siria.
Aunque el pa¨ªs vivi¨® una etapa de apertura en todos los ¨¢mbitos durante el gobierno de Mija¨ªl Gorbachov, el control sobre la informaci¨®n se ha ido intensificando desde la llegada de Vlad¨ªmir Putin al poder. La corresponsal explica que se manifiesta en m¨²ltiples campos, ¡°sobre todo en las televisiones que machacan las versiones oficiales y construyen ¡®realidades virtuales¡¯ en torno a la versi¨®n de los hechos que conviene a la direcci¨®n del pa¨ªs¡±. Las informaciones negativas sobre el pa¨ªs son silenciadas y se construye una imagen peyorativa de occidente. ¡°Esta tendencia se hizo especialmente evidente y agresiva a partir de 2013, cuando incluso se lleg¨® a pasar una serie en el primer canal de televisi¨®n sobre la decadencia y las lacras de Europa: emigraci¨®n, drogas, prostituci¨®n, crimen, desempleo, etc¨¦tera¡±, ejemplifica.
Esta labor consigue la evangelizaci¨®n de la sociedad rusa, ¡°el arraigo en la cabeza de la gente de los estereotipos oficiales sobre la interpretaci¨®n del mundo y de las razones y elementos de distintos conflictos en ¨¦l¡±, seg¨²n valora Bonet, lo que le parece ¡°el mayor peligro¡± de la falta de la libertad de prensa.
Adem¨¢s de sesgar la realidad, el gobierno ruso ataca por otro frente a los periodistas. Los trabajadores cuentan con una acreditaci¨®n que debe ser renovada cada a?o, con el peligro de que sea rescindida si las autoridades as¨ª lo consideran. La legislaci¨®n de la prensa rusa es, en principio, progresista, pero Bonet explica que en algunos aspectos se ha quedado anticuada, pues data de los a?os 90 y no se ha actualizado ante el desarrollo de los medios electr¨®nicos. Adem¨¢s, se han a?adido algunas restricciones, algunas tan simples como no decir tacos, pero su incumplimiento conlleva una advertencia. A las tres, el medio de comunicaci¨®n puede ser castigado e incluso cerrado.
Bonet afirma que no se ha sentido ¡°censurada ni amenazada¡±, pero concede que tiene ¡°una percepci¨®n basada en la experiencia de hasta donde se puede llegar en temas sensibles y los riesgos que puede comportar el traspasar las l¨ªneas rojas que existen, aunque no est¨¦n escritas en ninguna parte¡±.
EL PA?S se une con este art¨ªculo a la celebraci¨®n de la conferencia del D¨ªa Mundial de la Libertad de Prensa de la UNESCO.
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