El hombre que ha fabricado todas las series espa?olas que has visto (¡®La casa de papel¡¯ incluida)

Su ¨²ltimo cap¨ªtulo se emiti¨® hace cinco meses en Antena 3 y La casa de papel ya es una de las series espa?olas m¨¢s famosas. Netflix, la plataforma digital de contenidos que opera en todo el mundo, ha comunicado que se trata de la serie de habla no inglesa m¨¢s vista de su cat¨¢logo. El edificio del CSIC (que hace las veces de la Casa de la Moneda y Timbre donde los protagonistas ejecutan un atraco) est¨¢ asediada por turistas extranjeros que quieren hacerse fotos en ella. El exalcalde de Ankara (Turqu¨ªa), Melih G?k?ek, ha pedido a los servicios secretos y a la polic¨ªa que intervengan en la emisi¨®n de una serie que ¡°se est¨¢ convirtiendo en un s¨ªmbolo de rebeld¨ªa muy peligroso¡±. Los aficionados del equipo de f¨²tbol de Arabia Saudi Al Ittihad desplegaron una pancarta con la cara del entrenador y varios jugadores enmascarados con la careta de Dal¨ª que llevan los personajes de la serie. Esa ya ic¨®nica m¨¢scara aparece en manifestaciones en Argentina, en billetes dise?ados por artistas-protesta en Uruguay y en lonas promocionales de Netflix (que acaba de anunciar que producir¨¢ la tercera temporada) alrededor de todo el planeta.

¡°La casa de papel traslada a los espectadores un sentimiento de decepci¨®n hacia los gobiernos centrales y los bancos y retrata el deterioro del capitalismo, algo que evidentemente est¨¢ calando. Tambi¨¦n habla, aunque sea en peque?o, del 15M, de la crisis y de los rescates¡±, explica su creador (se le ocurri¨® la idea, la desarrolla, hace los guiones, lo supervisa todo...), ?lex Pina (Pamplona, 50 a?os). El p¨²blico encuentra una satisfacci¨®n liberadora en acompa?ar a un grupo de marginados sociales en su plan de robar dinero a los poderosos y erigirse como h¨¦roes populares, dentro y fuera de la serie. ¡°Pedro Alonso, que interpreta a Berl¨ªn, est¨¢ ahora en Argentina y no puede salir del hotel porque est¨¢ rodeado por fans¡±, cuenta Pina.

El exalcalde de Ankara (Turqu¨ªa), Melih G?k?ek, ha pedido a los servicios secretos que intervengan en la emisi¨®n de una serie que ¡°se est¨¢ convirtiendo en un s¨ªmbolo de rebeld¨ªa muy peligroso¡±

La capacidad de La casa de papel para trascender el entretenimiento puro y despertar entusiasmo mundial est¨¢ exportada en formato reducido: sus cap¨ªtulos de 70 minutos han sido remontados para durar 50 y 15 episodios se han convertido en 22. La serie viaja con una efectividad innegable y, sin embargo, si fuera por Antena 3 probablemente no tendr¨ªa tercera temporada. Su primer episodio se estren¨® arrasando (cuatro millones de espectadores y 25 % de cuota de pantalla) y en dos meses perdi¨® por el camino la mitad de su p¨²blico.

Aquel ¨²ltimo episodio comenz¨® casi a las 22:53 horas. ¡°Antena 3 se financia con publicidad y tiene sus estudios de cu¨¢ndo emitir y por qu¨¦, no creo que hiciera nada malo¡±, explica Pina. Y a?ade: ¡°El horario es muy exigente con el espectador, que si 'seis minutos y volvemos', que si telepromociones. Pero el espectador ahora tiene el poder y lo sabe: decide cu¨¢ndo, c¨®mo y el qu¨¦. Y eso es irreversible. En La casa de papel sale una mesa con champ¨²s de Natural Honey en medio de un atraco y tu cerebro se te cortocircuita. La televisi¨®n lineal no va a desaparecer, porque siempre habr¨¢ noticias, deportes o telerrealidad, pero los avances tecnol¨®gicos ya han acabado con empresas como Kodak o Blackberry y las plataformas de streaming est¨¢n cambiando la cultura y c¨®mo se consume. Los j¨®venes no encienden la tele al llegar a casa: mi hija adolescente no ha visto La 1 jam¨¢s¡±, reconoce.

?lex Pina sabe de lo que habla. Lleva 20 a?os escribiendo toda la televisi¨®n que has visto (Caiga Quien Caiga, Periodistas, Los Serrano, Los hombres de Paco, El barco) e incluso la que no has visto (Bienvenidos al Lolita). Echando la vista atr¨¢s, Pina considera que Caiga Quien Caiga, el informativo de reporteros que vacilaban a los pol¨ªticos emitido por Telecinco a mediados de los 90, no podr¨ªa existir hoy: ¡°El desparpajo que hab¨ªa antes era mucho mayor, se le pod¨ªa dar las gafas al Rey. Con las redes sociales hemos ganado en libertad e informaci¨®n, pero tambi¨¦n hay un factor de miedo, de contenci¨®n y de ir con el freno de mano echado. Antes ¨¦ramos m¨¢s proclives al gamberrismo y a la sorna, que est¨¢n en nuestro ADN como pa¨ªs¡±.

En cada proyecto, Pina ha ido a?adiendo capas a su creatividad. Asegura que en la serie Periodistas pretend¨ªan presentar conflictos dial¨¦cticos (dos personajes, normalmente los de Jos¨¦ Coronado y ?lex Angulo, que debat¨ªan con argumentos igual de s¨®lidos) mediante el entretenimiento. En Los Serrano la ficci¨®n espa?ola empez¨® a explorar personajes deleznables: ¡°En aquel momento se pensaba que la televisi¨®n ten¨ªa que ser blanca, como Farmacia de guardia o M¨¦dico de familia, o el espectador cambiar¨ªa de canal. Pero Santi (Jes¨²s Bonilla) era vil, mezquino y usurero. Cuando ve¨ªa a unas travestis les gritaba que no ten¨ªan padre, lo cual es dif¨ªcil de defender desde el punto de vista moral, pero no desde la ficci¨®n¡±.

En Los hombres de Paco, una serie que empez¨® como una comedia de enredo y acab¨® como el rosario de la aurora, ?lex Pina asegura que aprendi¨® a escribir. ¡°Fue un banco de pruebas con una gran libertad y con mucho desparpajo¡±, recuerda, ¡°toc¨¢bamos el surrealismo, el dada¨ªsmo, descongelamos a Walt Disney. En la ¨²ltima temporada enfrentamos a Paco con el demonio¡±.

?Y qu¨¦ aprendi¨® del ¨²nico fracaso de su carrera? ¡°Bienvenidos al Lolita fue el momento m¨¢s dif¨ªcil de mi vida¡±, confiesa. Los recortes en el presupuesto y en la publicidad obligaron al equipo a parar las m¨¢quinas y navegar a velocidad de crucero apostando por lo que sab¨ªan que les funcionaba: la comedia amable. ¡°La serie narraba la historia de un cabaret y ten¨ªa que ser canalla, pero con la crisis hubo mucho miedo y acab¨® siendo una serie diocesana que no representaba lo que es un cabaret. Y cuando algo no es verdad se hunde. La serie estaba desenfocada, ten¨ªa problemas por todos los lados y yo lo sab¨ªa¡±. Pero como dir¨ªa cualquier coach profesional, si t¨² dices crisis ¨¦l dice oportunidad: en Bienvenidos al Lolita, ?lex Pina aprendi¨® a rodar, lo cual la convierte a la vez en la peor y la mejor etapa de su carrera.

¡°Tuvimos que grabar el 40 % menos de material, pero era mucho mejor, porque lo planificabas de antemano y grababas solo lo que necesitabas. Antes rod¨¢bamos todo tipo de planos, ibas a la sala de montaje y pod¨ªas montar la misma secuencia en comedia y en drama. As¨ª tuvimos que aprender a construir el tono de cada secuencia y a apreciar valores de producci¨®n como la direcci¨®n de fotograf¨ªa¡±, recuerda. Ante el fracaso de Bienvenidos al Lolita, Pina se encerr¨® en su casa a ver ficci¨®n estadounidense durante meses tomando apuntes. Breaking Bad le cambi¨® la vida y, a continuaci¨®n, ¨¦l cambi¨® la ficci¨®n espa?ola.

¡°No me gust¨® el final de 'Los Serrano', francamente. Pod¨ªa haber sido m¨¢s emocionante o creado mayor satisfacci¨®n en el espectador"

¡°En Vis a vis quisimos incorporar la narrativa de la ficci¨®n de cable americana [HBO, AMC, Showtime] con la ambig¨¹edad moral. Ya no valen los personajes blancos y lo diferente es lo que manda¡±, asegura. ¡°Zulema es el personaje m¨¢s querido de Vis a vis por el magnetismo que aporta Najwa Nimri, pero tambi¨¦n por sus dobleces. En La casa de papel Berl¨ªn es un hijo de la gran puta, un mis¨®gino y un cruel. Cuando termina la serie el p¨²blico lo adora, lo cual es mucho m¨¢s inesperado y el espectador sabe que est¨¢ ocurriendo algo que no controla¡±.

La sordidez y perversidad de Vis a vis dinamit¨® las expectativas del p¨²blico respecto a qu¨¦ esperar de una serie espa?ola: el m¨¦dico de la prisi¨®n recib¨ªa la noticia del aborto de su mujer y a continuaci¨®n violaba a una reclusa (Alba Flores) sodomiz¨¢ndola, se inyectaba morfina y recitaba un mon¨®logo. Todo ello en seis minutos. ¡°Ven¨ªamos de Bienvenidos al Lolita y estaba claro que si haces un drama carcelario, tienes que hacer un drama carcelario.Yo reconozco que ah¨ª se nos fue la mano, hab¨ªa gente que no pod¨ªa verla¡±.

Pero ahora todo el mundo puede ver La casa de papel. Y lo est¨¢ haciendo en masa. La ambig¨¹edad moral resulta esta vez m¨¢s l¨²dica, trepidante y hedonista que en Vis a vis. Lo perverso, en este caso, es la voz femenina. ¡°La serie trabaja con los par¨¢metros de ficci¨®n masculinos: la acci¨®n, el robo, el thriller, la violencia. Pero la mirada es deliberadamente femenina, porque los tres focos m¨¢s importantes son Tokio (?rsula Corber¨®), la narradora; Murillo (Itziar Itu?o), la polic¨ªa que se hace cargo del atraco en un mundo de hombres y que ha sufrido violencia de g¨¦nero; y Nairobi (Alba Flores), que se ocupa de todo desde dentro. Las tres representan el matriarcado¡±, explica.

La casa de papel es, adem¨¢s, el primer proyecto de su carrera al margen de Globomedia, la productora fundada por Emilio Arag¨®n que abandon¨® hace dos a?os para fundar su propia empresa (Vancouver Media). ?Por qu¨¦ ahora? ¡°Vis a vis cambi¨® la ficci¨®n espa?ola, pero hab¨ªa que cambiarla. He trabajado 20 a?os en Globomedia y he aprendido muchas cosas de [su presidente y creador de ficci¨®n] Daniel ?cija, pero yo trabajaba para un se?or que me pagaba, as¨ª que como es l¨®gico todo lo que hac¨ªa estaba mediatizado por eso. La libertad creativa siempre es mayor si no est¨¢s unido a una compa?¨ªa que tiene una l¨ªnea editorial o unos intereses econ¨®micos. Y aparte creo que hay que valorar la mirada del escritor y del autor. Se est¨¢ produciendo un cambio en la ficci¨®n y en el dise?o de personajes que hace que cualquier cosa sea posible¡±.

Y para terminar, una pregunta que seguro que no le han hecho nunca: ?qu¨¦ le pareci¨® el final de Los Serrano? ¡°Yo siempre digo que nunca tuve que ver con ese final. Los Serrano pas¨® por varias fases de producci¨®n ejecutiva y eso cambiaba el alma de la serie¡±. ?Pero qu¨¦ le pareci¨® el final de Los Serrano? ¡°A m¨ª no me gust¨®, francamente. Estaba artefactado y pod¨ªa haber sido m¨¢s emocionante o creado mayor satisfacci¨®n en el espectador. Creo que los finales de las series deber¨ªan tener algo de lo que ha tenido la serie. Para m¨ª fue decepcionante y creo que para mucha gente tambi¨¦n¡±.

La casa de papel, cuya tercera temporada se estrenar¨¢ en Netflix en 2019, est¨¢ lejos de su final todav¨ªa, pero ?lex Pina sabe que, cuando llegue, ser¨¢ en sus propios t¨¦rminos esta vez. El golpe perfecto ha acabado siendo el suyo y, como sucede con los atracos perfectos, nadie lo ha visto venir, pero sus consecuencias son imparables. Y esto no ha hecho m¨¢s que empezar.