Una ocasi¨®n perdida

LO M?S PREOCUPANTE de la elecci¨®n de Joaquim Torra como presidente de la Generalitat no es que el principal representante de todos los catalanes sea un racista y un xen¨®fobo, ni siquiera que haya votado su investidura la mitad del Parlament sin que quienes lo apoyaron se molestaran en condenar sus ideas y le obligaran a abjurar de ellas. No: lo m¨¢s preocupante (al menos lo m¨¢s preocupante para m¨ª) fue la reacci¨®n de gran parte de la sociedad y la prensa catalanas, que se han apresurado a ignorar, rechazar o minimizar la toxicidad del pensamiento de nuestro presidente. En Catalu?a, innumerables instituciones, de colegios profesionales a universidades, protestan a diario porque en Espa?a hay presos pol¨ªticos, a pesar de que las organizaciones internacionales competentes (de Amnist¨ªa Internacional a Human Rights Watch) afirman que no los hay, pero ni una de tales instituciones ha protestado porque tengamos un presidente xen¨®fobo, a pesar de que SOS Racisme Catalunya ha dicho que los juicios de Torra son ¡°peligrosos, irresponsables, inaceptables¡±. En Catalu?a hemos visto a opinadores radicales y moderados (de esos que son separatistas con los separatistas y constitucionalistas con los constitucionalistas) negar que Torra sea xen¨®fobo y afirmar que todo es una manipulaci¨®n de Madrid y de Ciudadanos, que nombrar a Torra ha sido un error, s¨ª, pero no porque sea un xen¨®fobo, sino porque sus deslices pueden usarse contra Catalu?a por Madrid y por Ciudadanos. Jam¨¢s he votado a Ciudadanos, ni tengo la m¨¢s m¨ªnima intenci¨®n de hacerlo, y no vivo en Madrid sino entre Barcelona y Verges, un pueblo del Ampurd¨¢n plagado de banderas y pintadas separatistas y gobernado por la CUP, as¨ª que veamos si todo es fruto de una manipulaci¨®n.

En Catalu?a, innumerables instituciones, de colegios profesionales a universidades, protestan a diario porque en Espa?a hay presos pol¨ªticos, a pesar de que las organizaciones internacionales competentes afirman que no los hay

Tomemos un ejemplo entre muchos, un texto ya famoso escrito por nuestro hombre y titulado La lengua y las bestias. Se public¨® en El M¨®n, diario digital en catal¨¢n, el 19 de diciembre de 2012, cuando Torra contaba 50 a?os y su formaci¨®n personal e ideol¨®gica estaba m¨¢s que completada. El art¨ªculo parte de una an¨¦cdota: un pasajero de un vuelo de Swiss Air procedente de Catalu?a protesta a su llegada a Suiza porque los anuncios previos al aterrizaje se realizan en catal¨¢n y no en castellano, lo que sirve a Torra para arremeter contra quienes viven en Catalu?a de espaldas a la lengua catalana. Es verdad, como afirman los defensores de Torra, que, en su art¨ªculo, ¨¦ste no ataca a todos los espa?oles, ni siquiera a todos los que hablan castellano, sino s¨®lo a aquellos a quienes, como al pasajero de Swiss Air, ¡°les rebota todo lo que no sea en espa?ol y en castellano¡±. Ahora bien, ?qu¨¦ dice de estas personas (muchas, por cierto)? Que son ¡°bestias con forma humana (¡­) que destilan odio. Un odio perturbado, nauseabundo¡±; que son ¡°carro?eros, escorpiones, hienas¡±; que ¡°padecen un peque?o bache en su cadena de ADN¡±; que exhalan ¡°un hedor de cloaca¡±. ?C¨®mo se llama esto? ?Un desliz? ?Una afirmaci¨®n pol¨¦mica? La protesta del pasajero de Swiss Air puede parecernos todo lo poco respetuosa o inculta que queramos (o no), pero ?le convierte a ¨¦l y a quienes viven en Catalu?a ignorando la lengua catalana en bestias con forma humana, en carro?eros, escorpiones y hienas, en seres inferiores? Si esto no es xenofobia y racismo en estado puro, ?qu¨¦ demonios es?

Por supuesto, no quiero creer que las instituciones y opinadores que han negado o minimizado o ignorado la xenofobia y el racismo de Torra sean xen¨®fobos y racistas, como me niego a aceptar que lo sean todos los diputados que apoyaron su investidura y los dos millones de catalanes que les votaron; ni siquiera acepto que todos ellos crean que los catalanes somos tan excelsos que es imposible que ninguno de nosotros sea racista y xen¨®fobo. Pero todos han perdido la ocasi¨®n de sus vidas de demostrar de una vez por todas y para siempre, de manera clara, inequ¨ªvoca y taxativa, que abominan del racismo y la xenofobia antiespa?oles y que no quieren saber nada de ellos. No lo han hecho: no han impedido que el se?or Torra sea nuestro presidente, no han condenado sin paliativos sus escritos. Me pregunto por qu¨¦.?