Gesto con el Govern

A falta de m¨¢s iniciativas concretas ¡ªdif¨ªciles de exigir tras apenas un d¨ªa de gobierno¡ª el Ejecutivo de Pedro S¨¢nchez ha acotado con acierto su prioridad m¨¢s urgente: la normalizaci¨®n de las relaciones con Catalu?a. De esa determinaci¨®n surge la ¨²nica medida pr¨¢ctica tomada por su primer Consejo de Ministros: la de levantar la superintervenci¨®n de las cuentas que el anterior Gobierno impuso a la Generalitat en septiembre del pasado a?o y que, despu¨¦s, incluy¨® en la aplicaci¨®n del art¨ªculo 155. Si bien se trata casi de un mero tr¨¢mite, una vez que el 155 ha quedado suspendido, lo cierto es que la premura en tomar tal decisi¨®n demuestra que, en efecto, como la propia portavoz ha declarado, Catalu?a es el problema m¨¢s importante con el que el Gobierno tiene que trabajar. S¨¢nchez, por otro lado, llam¨® ayer a Quim Torra, el presidente de la Generalitat: la comunicaci¨®n se ha restablecido.

Hay se?ales positivas sobre las posibilidades de ¨¦xito de ese empe?o de normalizaci¨®n. El PDeCAT favoreci¨® el Gobierno de S¨¢nchez apoyando la moci¨®n de censura contra Mariano Rajoy en el Congreso, Torra ha formado Gobierno con consejeros libres de la persecuci¨®n de la justicia, Pedro S¨¢nchez se dispone a reunirse cuanto antes con ¨¦l y, como simb¨®lico precedente, ya ha habido una reuni¨®n con propuesta de di¨¢logo entre el propio Torra y el primer secretario del PSC, Miquel Iceta. Consciente este nuevo Gobierno de que ya se ha consumido la mitad de la legislatura, no dispondr¨¢ de mucho tiempo para poner en marcha iniciativas ambiciosas. El realismo, como ha alertado S¨¢nchez a sus ministros, se impone y la normalizaci¨®n de las relaciones con Catalu?a deber¨¢ conformarse por el momento con iniciar un camino que ser¨¢ probablemente largo y tortuoso. Porque en el di¨¢logo que ambas partes tienen intenci¨®n de abrir no cabe ni la vulneraci¨®n de la Constituci¨®n ni el derecho a decidir. Pero el cambio de interlocutor en Moncloa ya ha generado palabras conciliadoras por parte del independentismo catal¨¢n. Es una ventana de oportunidad que, aunque con cautela y sin generar excesivas expectativas, es obligatorio explorar.

Pero si Catalu?a es el principal problema de Espa?a, Podemos, su m¨¢s importante socio de moci¨®n de censura, puede ser la gran amenaza para la estabilidad del nuevo Ejecutivo. Y esa amenaza puede erosionar la ansiada estabilidad econ¨®mica y el cumplimiento de los compromisos europeos que busca S¨¢nchez. El perfil centrista del nuevo Gobierno y la agenda social son dos aspectos que ya han suscitado la cr¨ªtica de Podemos. Y ah¨ª ser¨¢ dif¨ªcil mantener el equilibrio entre la contenci¨®n del d¨¦ficit y un mayor gasto social en este ejercicio, a pesar de que los presupuestos heredados del PP son ligeramente expansivos.

La nueva portavoz del Gobierno, Isabel Cela¨¢, asegura que este Gobierno no es sectario y tiene la intenci¨®n de dialogar y negociar con todas las formaciones pol¨ªticas, incluido el PP. El ¨¦xito de tal empe?o, por tanto, y como corresponde a un Gobierno en minor¨ªa, va a depender en gran medida de la voluntad ajena tanto en llegar a acuerdos como en regalar al PSOE el escaparate que le ha brindado este cambio de Gobierno. Quiz¨¢ de esa debilidad surja la fortaleza de un proyecto que requiere consenso, determinaci¨®n y mucha prudencia.