Las desconocidas multicampeonas del juego de la soga
![Las integrantes del club de sokatira Badaiotz, en pleno entrenamiento en un front¨®n de Abetxuko, Vitoria.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/6BR4C7P6KKGNLRFQNCM4CKVLXE.jpg?auth=0af9548f4efb987c854e061ecfafbca97ed3a219dc46951b17083d58f14b22c2&width=414)
El club de sokatira femenino Badaiotz de Vitoria suma 17 medallas en los mundiales en 20 a?os. Una pel¨ªcula evoca su aventura
DICEN QUE LOS aficionados taiwaneses son capaces de repetir los nombres de las mujeres del club Badaiotz de sokatira como si se tratara de un ¨¢lbum de cromos: Amaia, Lorea, Susana, Ruth, Arrate, Eva, Garbi?e, Sonia, Maider, Jone, Ruth de nuevo. Cuando est¨¢n compitiendo, por el arrastre, estas luchadoras de pelo corto, largo o te?ido destrozan las suelas recauchutadas de las zapatillas en d¨ªas. Varias potencias asi¨¢ticas han copiado el estilo impuesto por Ion Lapazaran, su entrenador, un tirador que prefiere la resistencia a la fuerza. Y ellas han aparecido en una pel¨ªcula: Step Back to Glory (regreso a la gloria).
La mayor¨ªa tiene hijos: Eva Gonz¨¢lez de Matauco ¡ªde 44 a?os¡ª, por ejemplo, trillizas. Hay una que estudia traducci¨®n e interpretaci¨®n, dos trabajadoras sociales que acogen en sus casas a menores con problemas, una enfermera, una educadora infantil, una entrenadora de nataci¨®n, una profesora que da clases en la universidad... Son de pueblos y ciudades que no siempre quedan cerca del front¨®n vitoriano donde se re¨²nen hasta tres veces a la semana. Para ir hasta all¨¢, agarran el coche aunque nieve y suman 45 minutos o una hora y pico de kilometraje. Forman parte de uno de los pocos equipos que compiten de forma oficial por el Pa¨ªs Vasco. Tienen seis oros, siete platas y cuatro bronces en los mundiales de su especialidad ¡ªsobre suelo de goma¡ª, es decir, m¨¢s medallas que algunas de las selecciones m¨¢s laureadas de Espa?a. Pero en un pa¨ªs donde el f¨²tbol es casi una religi¨®n y donde los goles de Griezmann, Messi o Cristiano Ronaldo son como peque?os ¡°milagros¡± que cuestan millones, ellas se ven obligadas a solicitar vacaciones para tirar de la soga en citas internacionales ¡ªla ¨²ltima fue en China el pasado marzo¡ª y a participar cada verano en exhibiciones de deporte rural, como el levantamiento de yunque, para reunir el dinero que necesitan para los viajes.
Son de pueblos y ciudades que no siempre quedan cerca del front¨®n vitoriano donde se re¨²nen hasta tres veces a la semana
Entre las ocho participantes en un enfrentamiento de sokatira deben de estar por debajo de los 540 kilos, y el jam¨®n o la tortilla de patata son un manjar improbable la mayor parte de la temporada. La renuncia a ellos es el precio a pagar por intentar ganar a competidoras con m¨¢s recursos: con calzados especiales que cuestan hasta 200 euros. Cada vez que tiran, las integrantes del club Badaiotz lo hacen al ritmo de una especie de mantra ¡ª"hotz, hetz, hotz, hetz"¡ª que marca el movimiento de pies que deben hacer al un¨ªsono. Arrate Chill¨®n lleva ya 18 a?os metida en esto y dice que las manos, llenas de callosidades, no son lo m¨¢s importante: ¡°se pasa la cuerda por encima de la cadera, se sujeta con las costillas como si fueran una pinza y eso es lo que cuesta¡±. ¡°Mentalmente ¡ªa?ade¡ª, hay que pensar que el cuerpo siempre puede dar m¨¢s, aunque est¨¦ al l¨ªmite¡±. En el caser¨ªo de Garbi?e L¨®pez de Uralde, la mam¨¢ grande del club, una veterana con 23 a?os de experiencia, hay troncos y polluelos y una soga como las que suele enroscar en torno a su brazo izquierdo para anclarse a tierra. Aqu¨ª el lugar com¨²n es la cuerda, y lo que sufren y comparten alrededor de ella es lo que las convierte en una familia unida.
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