Campamentos urbanos o c¨®mo conciliar este verano
Cada vez m¨¢s escuelas infantiles, con alumnos de 0 a 3 a?os, deciden romper esa barrera de edad para ofrecer a los padres campamentos enfocados tambi¨¦n a ni?os m¨¢s mayores
Los campamentos de verano se han convertido para muchos padres en una eufem¨ªstica medida de conciliaci¨®n. Una tabla de salvaci¨®n a la que se agarran muchas familias, si pueden permit¨ªrsela, para poder compaginar el trabajo y el cuidado de los hijos y no naufragar durante los tres largos meses de vacaciones escolares.
El ejemplo m¨¢s paradigm¨¢tico de la creciente demanda de este tipo de actividades veraniegas lo encontramos en el auge de ofertas formativas que se despliegan ante los padres cuando se acerca el final del curso, con campamentos cada vez m¨¢s originales, profesionalizados y especializados. Tambi¨¦n en una corriente por la que de unos a?os a esta parte cada vez m¨¢s escuelas infantiles, con alumnos de 0 a 3 a?os, deciden romper esa barrera de edad para ofrecer a los padres campamentos enfocados a ni?os de hasta 9 o 10 a?os durante las vacaciones estivales.
En ocasiones estas iniciativas surgen del mismo centro, como en el caso del CEI El Manzano de Zaragoza, donde Olga P¨¦rez, su directora, reconoce que vieron el campamento como una forma cubrir con ni?os de 3 a 6 a?os las plazas que dejaban libres los alumnos de la escuelita que dejaban de asistir a la misma en verano. En otros casos, como el de la escuela infantil Peque?os Astronautas, del municipio madrile?o de Las Rozas, el campamento es fruto de una sinergia. ¡°Somos dos socias dedicadas plenamente a nuestra escuela infantil y la idea de romper con el d¨ªa a d¨ªa y de poder ofrecer no solo un espacio donde disfrutar a los peques, sino la posibilidad de dar alternativas a las familias que en numerosas ocasiones nos transmit¨ªan la imposibilidad de organizar sus vacaciones, fue lo que nos motiv¨® y motiva a ofrecer campamentos cada vez m¨¢s elaborados¡±, explican Silvia Hermo y Paloma Madrigal.
Conciliar en verano
Quienes crecimos en los a?os ochenta y principios de los noventa apenas conocimos campamentos de verano. Hab¨ªa uno municipal a lo sumo, pero no la oferta que se puede encontrar hoy en cualquier municipio de Espa?a. La mayor¨ªa, adem¨¢s, tampoco los necesit¨¢bamos. En las casas acostumbraba a trabajar solo un progenitor (generalmente el padre), los abuelos sol¨ªan estar cerca y actuaban a modo de refuerzo, y nosotros a¨²n pod¨ªamos jugar en las calles, que a su modo eran nuestro particular campamento de verano.
Hoy, en cambio, es habitual que tanto el padre como la madre trabajen, la tribu se ha disuelto y los ni?os ya no juegan en las calles. Tres factores que explican por s¨ª mismos el auge de la oferta y de la demanda de campamentos. ¡°Ahora las familias apenas se cogen vacaciones y como mucho tienen un mes. ?Qu¨¦ hacen el resto del verano con sus hijos?¡±, se preguntan las directoras de Peque?os Astronautas.
En los campamentos estivales de las escuelas infantiles, dada su vocaci¨®n de cercan¨ªa y a la estrecha relaci¨®n que mantienen con las familias, predominan entre los ni?os matriculados antiguos alumnos y hermanos mayores de alumnos del centro. Una muestra m¨¢s de que, como explica Laura Contelles Maseres, directora del CEI Pasito a Pasito de Valencia, estos campamentos surgen en parte para responder a una demanda creciente de los padres.
?Y qu¨¦ buscan los padres en estos campamentos ofertados por las escuelas infantiles m¨¢s all¨¢ de poder compaginar su vida laboral y familiar durante las vacaciones? ¡°Ante todo la seguridad de que sus hijos lo van a pasar bien¡±, afirma Laura. ¡°Principalmente el cari?o y la atenci¨®n que no encuentran una vez que entran en el colegio, la confianza de que hemos formado parte de sus vidas en los primeros meses de vida de sus hijos, y la creatividad e ilusi¨®n que ponemos en las semanas tem¨¢ticas que les ofrecemos¡±, a?ade por su parte Olga P¨¦rez.
Romper con las rutinas
La creatividad es un ingrediente b¨¢sico en cualquier escuela infantil que se precie. Tambi¨¦n en sus campamentos. Creatividad para motivar a unos peque?os que en muchos casos llegan ya con las pilas al m¨ªnimo tras un curso escolar que, con cuatro, cinco o seis a?os, se les hace muy largo. ¡°?Agotados? Miedo tengo de cuando llegue la avalancha de energ¨ªa el d¨ªa 21 de junio. Tras su paso siempre necesito irme de retiro espiritual¡±, ironiza la directora del CEI El Manzano.
Laura Contelles, por su parte, reconoce que el final del per¨ªodo lectivo ¡°se hace un poco pesado para todos¡±, tanto para los alumnos como para los propios profesores: ¡°ellos necesitan descansar, cambiar un poco de rutina, y las profes tambi¨¦n¡±. Y en ese cambio de rutina, en ese romper con los horarios y las normas del curso escolar, reside en parte el ¨¦xito de los campamentos de verano de las escuelas infantiles. ¡°Ofrecemos todas las ma?anas un rato de piscina con juegos de agua y luego actividades programadas todas ellas diferenciadas y adaptadas por edades, as¨ª como, repaso escolar, talleres de cocina, talleres de pintura, entre muchas otras cosas¡±, enumera la directora del CEI Pasito a pasito.
¡°Nuestro objetivo principal es proporcionar a los ni?os y ni?as horas y horas de entretenimiento a trav¨¦s de la cultura, la naturaleza, la innovaci¨®n, el ingl¨¦s, la tecnolog¨ªa, las artes pl¨¢sticas, los juegos de agua, el teatro, la cocina, el ejercicio f¨ªsico, los cuentos y muchas cosas m¨¢s¡±, a?aden por su parte Silvia Hemo y Paloma Madrigal, que definen la escuela de verano de Peque?os Astronautas como ¡°un viaje alucinante hacia la exploraci¨®n y el descubrimiento de una manera interactiva, l¨²dica y s¨²per divertida¡±.
En el CEI El Manzano, por ¨²ltimo, su directora Olga P¨¦rez apuesta cada a?o por la innovaci¨®n y por excursiones (al teatro, a museos, a la piscina) que rompan la monoton¨ªa diaria. Tambi¨¦n por la organizaci¨®n de semanas tem¨¢ticas, en la que focalizan su atenci¨®n en aspectos concretos. Para este verano, sin ir m¨¢s lejos, tienen una llamada ¡°Inside Out¡±, como la pel¨ªcula de Pixar, en la que ense?ar¨¢n a los alumnos a conocer sus emociones; otra, ¡°se abre el tel¨®n, comienza la funci¨®n¡±, enfocada en la expresi¨®n corporal, la danza, el teatro y la pedagog¨ªa musical; y una ¨²ltima que nos adelanta y que bajo el t¨ªtulo ¡°El Circo del Sol¡± convertir¨¢ a los alumnos en malabaristas, equilibristas y contorsionistas dignos del mejor circo del mundo.
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