Los vestidos que forjaron el mito de Frida Kahlo
Una exposici¨®n en Londres re¨²ne m¨¢s de 200 objetos ¨ªntimos de la pintora que nunca hab¨ªan salido de su M¨¦xico natal y que ilustran c¨®mo se fabric¨® su carism¨¢tica imagen
¡°Conoc¨ª verdaderamente a Frida Kahlo al revisar por primera vez el acervo de sus objetos personales. Me encontr¨¦ con una mujer a la que le encantaba el perfume y los maquillajes, apasionada, que tomaba tequila... Esta exposici¨®n es sobre la mujer y la artista, y se aleja de ese discurso de los a?os ochenta de Frida la sufridora¡±. Qui¨¦n describe as¨ª a la ic¨®nica pintora mexicana Frida Kahlo (1907 - 1954) es Circe Henestrosa, co-comisaria de Frida Kahlo. Making Her Self Up, la exposici¨®n que desde el 16 de junio hasta el 4 de noviembre re¨²ne en el museo Victoria and Albert de Londres m¨¢s de 200 prendas, objetos, cuadros y fotograf¨ªas de la artista que nunca antes hab¨ªan salido de su pa¨ªs natal. Es m¨¢s, hasta 2004 ni siquiera se sab¨ªa de su existencia: estaban encerrados bajo llave en la Casa Azul (su hogar en Coyoac¨¢n, Ciudad de M¨¦xico, hoy convertido en el Museo Frida Kahlo), debido a un exceso de celo de Dolores Olmedo, amiga de Diego Rivera y albacea de su legado. ¡°Diego dej¨® dicho que el ba?o de Frida y los cuartos donde estaban los documentos y las fotograf¨ªas se pod¨ªan abrir 15 a?os despu¨¦s de su muerte. Pero Dolores decidi¨® que no se har¨ªa hasta que ella no estuviera, y vivi¨® hasta 2002¡±, explica Henestrosa, que en 2012 ya organiz¨® la muestra Las apariencias enga?an: Los vestidos de Frida Kahlo, que se puede considerar g¨¦nesis de esta.
En aquellas habitaciones aparecieron 22.000 documentos, 6.000 fotograf¨ªas y 300 objetos personales de Kahlo. La exhibici¨®n que se puede visitar en la capital brit¨¢nica incluye muchos de estos ¨²ltimos: desde los testigos silenciosos del dolor cr¨®nico que la atorment¨® ¨Cde sus cors¨¦s de escayola a la pierna prot¨¦sica que us¨® despu¨¦s de que le amputaran la suya en 1953, como consecuencia de una gangrena¨C hasta los cosm¨¦ticos que le ayudaron a construir su imagen, como el l¨¢piz con el que enfatizaba su ceja o su rouge de labios de la marca Revlon. Tambi¨¦n se exponen collares, cartas, numeros¨ªsimas fotograf¨ªas de todas las etapas de su vida y, como gran reclamo, sus vestidos, que dialogan con sus obras m¨¢s conocidas. Para la comisaria, esos enseres dicen tanto de la persona que fue como sus autorretratos, porque Kahlo se presentaba al mundo a trav¨¦s de ellos. ¡°?Por qu¨¦ iba a ser distinto su guardarropa a su arte?¡±, se pregunta, y pone como ejemplo sus cors¨¦s, que Frida utiliz¨® como lienzo, ilustr¨¢ndolos con s¨ªmbolos comunistas o referencias a sus abortos. ¡°Los usa como soporte m¨¦dico, pero tambi¨¦n los pinta. Se convierten en su segunda piel¡±.
Sus 22 vestidos de tehuana ¨Cuna colorida vestimenta procedente del estado de Oaxaca que la artista convirti¨® en su atuendo distintivo¨C, estaban cargados de simbolismo: ¡°Ella escogi¨® un vestido que viene de una sociedad matriarcal con mujeres poderosas. Lo adopta en el tiempo en el que quiere comunicar sus convicciones pol¨ªticas, y se quiere ver muy mexicana. Pero tambi¨¦n buscaba obtener un lugar en una sociedad dominada por pintores masculinos¡±. El vestido tambi¨¦n responde a la relaci¨®n de la pintora con su cuerpo doblemente roto: por la polio que sufri¨® a los 6 a?os y por el accidente de tranv¨ªa a los 18 que por poco la mata, y que la dej¨® inmovilizada por largos per¨ªodos de tiempo. ¡°Este vestido de tehuana va a servirle tambi¨¦n para lidiar con su cuerpo discapacitado, porque el adorno se concentra del torso para arriba, de manera que cuando el observador la miraba se distra¨ªa de sus piernas heridas¡±, afirma la experta.
Aunque la muestra no se recree en el dolor, es imposible obviarlo al hablar de Frida. ¡°Mi t¨ªo Andr¨¦s, que estudi¨® en la misma preparatoria que Frida y que era muy amigo de su primer novio, siempre dec¨ªa que ella vivi¨® muriendo¡±, cuenta Henestrosa. De hecho, el objeto que m¨¢s remueve a la comisaria ¨Cy, probablemente, a gran parte del p¨²blico¨C, es su pierna prot¨¦sica. ¡°La pr¨®tesis que le lleg¨® no le gustaba, y mand¨® hacer una bota de cuero rojo que despu¨¦s intervino con unos encajes chinos y un cascabel. Ella crea un objeto super contempor¨¢neo casi 50 a?os antes de que Alexander McQueen sacara en la pasarela a Aimee Mullins con unas pr¨®tesis de madera que hizo para ella¡±.
La exposici¨®n ha recibido cr¨ªticas dispares en la prensa brit¨¢nica, y peri¨®dicos como The Guardian han afeado que la fascinaci¨®n por los efectos personales reste importancia al legado art¨ªstico de Kahlo. Para la comisaria, no se trata tanto de poner al mismo nivel su vida y su arte como de mostrar la faceta m¨¢s desconocida de una creadora cuyo feminismo pionero transmite un mensaje profundamente actual: ¡°Estos objetos hablan de una mujer ¨²nica, no convencional y que pele¨® por definir qui¨¦n era en sus propios t¨¦rminos. ?No es lo mismo por lo que estamos luchando las mujeres hoy?¡±.
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