Las ¡®commodities¡¯ y la comodidad

Las secciones de Econom¨ªa de los diarios recogen a menudo la palabra commodity, casi siempre sin explicar su significado.

Muchos podr¨¢n creer a primera vista que equivale a ¡°comodidad¡±; pero en tal caso caer¨ªan en la trampa del ¡°falso amigo¡±; es decir, una palabra con similar sonido o escritura en dos lenguas pero con distinto significado en cada una de ellas; es decir, lo que suceder¨ªa si alguien creyese que table en ingl¨¦s o en franc¨¦s significa ¡°tabla¡± en vez de ¡°mesa¡±.

Commodity, que en Espa?a concuerda normalmente en femenino, a diferencia de lo que sucede en Am¨¦rica, quiere decir en el ingl¨¦s general ¡°art¨ªculo de consumo¡± o ¡°producto¡±. En el l¨¦xico de la econom¨ªa, sin embargo, su uso se ha especializado en algo parecido a ¡°materia prima¡±, pero adem¨¢s puede referirse a cualquier bien que no posea rasgos espec¨ªficos. Por ejemplo, la cebada ser¨ªa una commodity porque, una vez que re¨²ne los requisitos para ser considerada como tal, lo mismo suele darnos una que otra. Las commodities suelen competir en precio, no tanto en calidad.

El Diccionario LID empresa y econom¨ªa, dirigido por Marcelino Elos¨²a, define commodity como ¡°mercanc¨ªa gen¨¦rica¡±. Adem¨¢s, incluye la expresi¨®n commodities exchange, que traduce como ¡°Bolsa de materias primas¡±.

Por su parte, las Academias indican en el Diccionario Panhisp¨¢nico de Dudas que ese t¨¦rmino ingl¨¦s se usa como referencia a materias primas o bienes b¨¢sicos y tambi¨¦n con la idea de ¡°producto objeto de comercializaci¨®n¡±. Esta obra de consulta propone para sustituirlo las opciones ¡°mercanc¨ªas¡±, ¡°art¨ªculos o bienes de consumo¡±, ¡°productos b¨¢sicos¡± o ¡°materias primas¡±, seg¨²n los casos.

Para obtener una alternativa en espa?ol m¨¢s precisa y corta podr¨ªamos acudir al adjetivo ¡°gen¨¦ricos¡± (¡°el trigo es un gen¨¦rico¡±), pero tal casilla ha sido ocupada ya por los medicamentos que ofrecen la misma composici¨®n que un espec¨ªfico y que se comercializan bajo la denominaci¨®n de su principio activo. En este caso, el adjetivo se convierte en un sustantivo masculino: ¡°me recet¨® un gen¨¦rico¡±. Por tanto, convendr¨ªa buscar otro vocablo. Veamos.

La idea de que una commodity es un producto que no se distingue de otros de su misma especie nos evoca el concepto de ¡°indiferenciado¡±. Ya tenemos, pues, una alternativa: ¡°Mi primo se dedica a un negocio de indiferenciados¡±. Pero suena raro, sobre todo por la longitud del adjetivo, tal vez; o por su extra?o disfraz de sustantivo. Disponemos en cambio de la alternativa ¡°b¨¢sico¡±, puesto que las commodities suelen carecer de complejidades t¨¦cnicas o de gran valor a?adido: ¡°Mi primo se dedica a un negocio de b¨¢sicos¡± (del mismo modo que dir¨ªamos ¡°mi hermana ha abierto una empresa de c¨ªtricos¡±).

Busco en Google ¡°negocio de b¨¢sicos¡± y s¨®lo ofrece ?dos! resultados, en todo su oc¨¦ano de profundidades kilom¨¦tricas, pero ambos encajan perfectamente en lo que aqu¨ª se expone (uno de ellos, por cierto, est¨¢ publicado en EL PA?S en 2007).

Este ejercicio gimn¨¢stico s¨®lo pretend¨ªa explorar opciones frente a un anglicismo concreto y mostrar que siempre hay una alternativa en espa?ol (otra cosa es que guste o no). Pese a eso, muchos economistas y redactores seguir¨¢n usando commodity. Quiz¨¢s por comodidad (ahora s¨ª). Para ellos, claro. Para otros resultar¨¢ m¨¢s bien una incommodity, porque produce gran desaz¨®n leer algo y no entenderlo.