Espa?oles bajo el yugo nazi

En lo referente a la memoria hist¨®rica, no solo hacen falta gestos y acciones, se necesita adem¨¢s fomentar la investigaci¨®n. A ra¨ªz de la Ley de Memoria Hist¨®rica en 2007 se hizo un inventario de deportados espa?oles a los campos de concentraci¨®n del nazismo. Sin ese inventario, el memorial y mi posterior investigaci¨®n, nunca hubiese sabido que el hermano de mi abuela era el prisionero 73986 de Dachau. Es m¨¢s, no hubiese podido conocer a mi familia. Han pasado bastantes a?os y ahora que el Gobierno de S¨¢nchez retoma la Memoria Hist¨®rica se deber¨ªa actualizar este inventario; quiz¨¢ as¨ª muchas personas puedan saber si entre sus familiares hubo alg¨²n prisionero del nazismo. Hay que actualizarlo porque se han documentado m¨¢s deportados, y tambi¨¦n hay que hacer labores de correcci¨®n de erratas en los nombres. Hay entidades, como la Amical de Mauthausen, que han seguido trabajando en estas cuestiones. Cuando hablamos de Memoria Hist¨®rica, junto a las v¨ªctimas del franquismo nunca nos debemos olvidar de los espa?oles prisioneros del Reich.¡ª Juan Pedro Rodr¨ªguez. Legan¨¦s (Madrid).